⸻ ¿A eso llamamos amor, realmente eso es amor? Verán para muchos es algo que quieren experimentar y no quiero ser pesimista, persistan y arriesguen por eso que aman ¿Qué pierden si fallan, tiempo?
⸻ Hermano, ¿De qué hablas?
⸻ ¿Hm, como que de que hablo?
⸻ Steve solo pregunto qué hacer si una chica se enamoraba de él, luego viniste tu a hablar como si fueras un poeta o algo así, ¿estas drogado ya?
⸻ Cierra la boca imbécil, no sé ni porque decidí hablar de esto con ustedes. ⸻ Di una profunda calada al rollo entre mis dedos para luego pasarlo y tras unos segundos exhalar todo el humo de mis pulmones. ⸻ Ya debo irme.
⸻ ¿Tan pronto, fue por interrumpirte? Venga hombre, quédate un rato más.
⸻ Como si unas palabras fueran capaces de herirme, imbécil. Debo cuidar de mi hermano. ⸻ Que gran mentira, si debía cuidar de mi hermano, pero aquello de que unas palabras no pueden herir... Eso si es una gran mentira.
El trayecto a casa, como siempre, tan solitario y tranquilo; incapaz de perturbar mi mente mientras camino por estos callejones oscuros con los faroles como única luz. Se podría decir que es una gran forma de enfocarme en mis pensamientos y en mí mismo. La tenue luz que escapa por la terraza me indica que llegue a casa y peor aún, mis padres me esperaban y el aroma que lleva mi ropa encima iba a empeorar la situación.
Un estruendo me alarmo, me apresuré en subir las escaleras para encontrarme con una grata sorpresa, tal parece que no me esperaban a mi después de todo, sino que estaban discutiendo por ello solo preferí seguir directo a mi habitación saludando a medias.
⸻ ¿Dónde estabas Connor? ⸻ Esa voz tan irritante era la de mi padre, un desempleado que vivía a expensas de mi madre y estafando gente.
Siempre que entro para detener esas discusiones termino más lastimado yo que ellos, ahogaba el ruido de los gritos con mis auriculares ya que en cierto modo eran capaces de estresarme solo con oír sus patéticas discusiones. Solo me di vuelta para responder.
⸻ Solo estaba con unos amigos, es todo.
⸻ ¿A la media noche? ⸻ Esa dulce pero cansada voz, esa era mi madre.
⸻ No seas idiota mujer, era obvio que se estaban drogando... Puedo olerlo desde aquí. ⸻ Todo de ese hombre me resultaba repulsivo, inclusive su forma de hablar. ⸻ Criaste un drogadicto y un retrasado.
Aquello último fue la gota que rebaso el vaso, tomando una postura más firme me acerque al sillón donde se hallaba, obstruyendo su visión del televisor para que no pudiera ignorarme. Tome un poco de aire buscando las palabras adecuadas para no tener que recurrir a una confrontación.
⸻ Escucha imbécil. ⸻ Ya todo se fue al carajo. ⸻ Puedo tener una jodida adicción, pero al menos no soy un desempleado de ochenta kilos que se la pasa en un sillón viendo la televisión y buscando gente a la cual estafar para gastar todo después en alcohol.
Si con solo ofenderlo ya se había levantado el resto de cosas fue lo suficiente como para hacerlo enojar, es decir que era hora de una pelea.
⸻ ¡Maldito desagradecido! ⸻ ¿Qué debería agradecer de tener a alguien como tú de padre? Se abalanzo sobre mi sujetando mis hombres sacudiéndome como un jabalí enojado.
⸻ ¡Di que es mentira si no es verdad lo que digo! ⸻ Mi madre miraba con temor como ambos forcejeábamos para ver quien cedía primero, no tenía voz si quiera como para intervenir.
Digamos que mi equilibrio y fuerza tras consumir no era la mejor de todas y por ello podía notar como iba perdiendo contra él, lo último que vi cuando finalmente me empujo lejos fue su puño izquierdo volando hacia mi boca; ya era demasiado tarde para esquivar. Ese puñetazo impacto en un costado de mi boca haciéndome retroceder aún más con la mirada clavada en el muro, enfurecido y decidido en arremeter contra él, fue cuando mi madre hizo su jugada colocándose en el medio de ambos y en un grito desesperado corto toda mi ira.
⸻ ¡Deténganse ustedes dos, ya! ⸻ Tuvo el valor para evitar que siguiéramos discutiendo y que todo acabara en circunstancias peores. ⸻ ¡Connor ve a tu habitación!
⸻ ¡¿Dejaras que se vaya así nada más?! ⸻ Juro que si volvía a hablar le iba a romper la cara entera.
⸻ Ve a tu habitación, Connor.
A pesar de estar totalmente cargado de rabia el dejar a mi madre con semejante imbécil me causaba una enorme impotencia ya que si él era capaz de golpearme no quería ni imaginar lo que le haría a ella. Sacudí mi ropa con saña y abandoné la sala con un mohín para encerrarme en mi habitación.
Tome el móvil en mis manos para buscar algo que pudiera distraerme, la habitación estaba a oscuras con nada más que el brillo tenue de la pantalla; eso y las luces del exterior que se colaban por la brecha de las cortinas. En la cama de al lado dormía mi hermano, al cual el imbécil llamo retrasado, no me percate de que ya estaba despierto y muy probablemente se debía a la pelea de hace poco.
⸻ ¿George? ⸻ Me senté en el borde la cama junto a él, estaba asustado. ⸻ ¿Estas bien? ⸻ Pese a tener ocho años no era capaz de hablar, no con claridad y el entender también se le complicaba un poco; usábamos señas las cuales el reconocía.
Asintió con su cabeza mientras me miraba y con su índice señalo su propio labio, demonios ¿Tan obvio era acaso? Quería saber si yo estaba bien.
⸻ No es nada, cuando venía a casa me encontré con unos alienígenas y tuve que molerlos a golpes porque se querían llevar todo el cereal de la tierra. ⸻ Él amaba el cereal, sería bueno distraerlo del ruido que aún se escuchaba fuera de la habitación.
Reía con suma inocencia debido a mis gestos y muecas, tocó su pecho un par de veces y señalo la puerta preguntando si él podía salir. Ladee mi cabeza de lado a lado y le señale la hora en reloj, revolví su cabello un poco y le sonreí. ⸻ Debes dormir, mañana vamos a desayunar cereal he iremos al parque.
Como un rayo me devolvió una gran sonrisa y se acostó en la cama abrazándome antes, me acosté sobre la mía y un poco más calmado decidí ahogar todo el ruido externo con mis auriculares, la música era una de las pocas cosas aparte de la marihuana las cuales eran capaces calmarme. El viaje hace mucho que había acabado y mientras la música reproducía esa pregunta volvió a mí, ¿A eso llamamos amor? Mis padres eran un modelo a seguir para una relación, pero de un momento a otro aquel sentimiento que los envolvía y hacía que se amaran fuel mismo trago amargo que provoco que se odiaran, algo que claramente iba a repercutir en nosotros... Sus hijos, entonces ¿Eso es amor? Para mí no es más un sentimiento efímero.
