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¿Cuántos problemas puede haber?

Era 1879, ¿Qué se puede decir?, ¿De quien se hablara?, ¿Sobre que?, pues está es la historia de Amelia, una joven chica de 21 años, vivía en Latinoamérica, en unos años finalizaría la universidad, tenía padres increíbles, amigas perfectas e inseparables, y... ¿un novio perfecto?.

Los inicios de su relación fueron maravillosos pero al pasar dos años el chico se volvió violento y controlador, Amelia ya estaba cansada de ese trato, así mejor decidió acabar esa relación, claro que este no se lo tomo para nada bien pero tuvo que aceptarlo, así Amelia fue libre de un problema que la consumí, pero sus amigas se alejaron de ella, ¿porque? simple, ya no salía con el chico más popular de la universidad, así que la dejaron de lado ya que no sería nunca más popular, en ese momento Amelia se destrozo, por tanto tiempo que fueron sus amigas, todo lo que pasaron solo fue por unos momentos de popularidad e interés, pero sabía que aún tenía a sus padres, ellos jamás le fallarían ¿verdad?

Pues si lo hicieron, luego de ese largo día de dolor en la universidad llegó a casa y sus padres le comentaron sobre su separación, y ahí fue cuando Amelia supo que su mundo se venia abajo poco a poco, pero tenía que afrontarlo, ¿no?,  pues no, discutió con sus padres ese día, les dijo que eran unos inhumanos que como no podían pensar en ella, así que escapo.

Corrió y Corrió, no supo por donde ni como llego, sus ojos estaban tan llorosos que ni noto por donde iba, llego a un punto donde se había cansando, justo en ese lugar había un lago, se sentó en la orilla y lloro demasiado, quiso que nadie lo escuchara para que pudiera llorar mucho y sacar todo lo que tenía...

X: ¿te encuentras bien?

Amelia: !ah!, !¿quien eres?!

X: tranquila... no grites, puedes asustar a los animales

Amelia: ¿Quién eres?, ¿desde hace cuanto tiempo estás por aquí?

X: lo suficiente para escucharte llorar, y soy Sophia, mucho  gusto...

Amelia: soy Amelia

Sophia: hola Amelia, ¿me dirás porque estabas llorando?

Amelia: no es de tu incumbencia, será mejor que te vayas quiero llorar a gusto...

Sophia: yo pienso que es mejor que te desahogues con alguien, ¿no crees?

Amelia: no lo se, apenas te conozco, ¿Cómo se que esto no es una trampa?

Sophia: te aseguro que no soy nadie que quiera hacerte daño, soy una simple chica que estaba acá y quiere escucharte

Amelia: suena bastante raro en realidad... ¿Por qué me quieres escuchar? 

Sophia: se como se siente estar así...