Pasando por el centro de la ciudad una chica caminaba algo apurada y estresada a un local de mascotas que se encontraban a más o menos 15 minutos caminando.
Nerviosa por hacer la "travesura" mas grande de su vida que a hecho hasta ahora.
¿Robar? Solo útiles escolares de sus compañero, ¿Tomar? Se le hace asqueroso, ¿Fumar? No aguanta el humo, ¿Drogarse? Si ni aguanta una aguja como va a aguantar inyectarse eso . A pesar de estar en su etapa de florecimiento realmente no ha disfrutado mucho la vida.
Con pocos amigos, calificaciones que son aceptables, apariencia aceptable y familia normal, necesitaba sentir esa adrenalina que los jóvenes de su edad sienten al menos 1 vez a la semana.
Caminando hacia el refugio de animales recordó lo que su familia le dijo cuando "bromeo" que adoptaría un perrito.
Su hermano mayor pauso su videojuego y se empezo a reir para decir - Tu? Cuidando a un animal, si ni siquiera te acuerdas a ti misma y ya quieres cuidar a un animal. No, no quiero ver el sufrimiento de un animalito por tu culpa- Terminando de decir para volver con su videojuego ignorando las palabras hirientes que le hizo a su hermana que el lo hizo de broma.
Su padre?, pues se lo comento llegando del trabajo y no mejor respuesta que la de su hermano, pero fue menos hiriente y mas racional- ¿Una mascota? Y quien lo va cuidar ¿Tu madre, yo? No, cuando seas grande adelante, pero aquí no, no quiero llegar y lo primero que vea es a un perro todo orinado- Para después ir a saludar a los demás de la familia.
Para después a la jefa de la familia, el jefe final, el mas temido, su madre, se lo comento en un momento donde ella siempre baja la guardia, cuando ve por 3 vez "Betty la Fea", cuando Armando se viste de Drag Queen un momento lleno de risas, se sentó a su lado y cundo escucho lo que su hija le comento sus risas desaparecieron para voltearla a ver con su mirada que todos conocemos y todos odiamos - Que??!!?!? Un perro, para que? para que limpie sus miados, lo bañe, escuche sus ladridos a las 3 de la mañana y mucho mas? NOOOO, no en mi casa y ya vete que me hiciste enojar -.
Para terminar con su viaje astral se dio cuenta que ya había llegado a la tienda de mascotas, la verdad al recordar lo que le dijo su familia ya no tenia tantas ganas de tener un perro. Pero ya esta aquí no le hara daño ver a los perritos verdad?
Verdad?
Entrando al local se encontró con la recepcionista, volteandola a ver solo sonrió y se dirigió a mi - Buenos días ¿Viene a adoptar un perrito? - me lo dijo como si fuera una chica de 7 años.
- Si - conteste a secas aun indignada por su forma de hablarme, se que mi apariencia no es muy madura, pero tampoco parezco una niña de 7 años, 8 si, pero de 7 en serio?
La seguí por un cuarto donde aparecían los perros en un mini cuarto por separado, cada quien con su respectiva agua y croquetas. Realmente me sorprendí ya que los perros están bien cuidados con buen alimento, agua limpia y sus cuartos bien limpios, sin correas y hasta los perros se notaban felices ya que estaban ladrando y moviendo la colita, lastima que no me intereso ninguno.
Caminábamos por un camino donde estaban todos los perritos para entrar a mas salas y ver a mas perritos, cada vez que me interesaba en uno la recepcionista se esperaba y me hablaba del perro, como lo encontraban, su raza, etc.
Terminando el primer pasillo íbamos a entrar a el segundo pasillo si no fuera por que escuche un quejido y un lloriqueo. Volteo hacia donde estaban los lloriqueos y estaba en un cuartito, las luces apagadas, pero igual de limpio, me agacho para tener una mejor vista del perro que estaba ahí gracias a la oscuridad tuve que forzar mas mi vista para después ver la figura de una bola de pelo. -¿Un extraterrestre?- Dije sin pensarlo para después la recepcionista reir y decir -Es una raza de perro que tiene mucho pelo, conocido como pomeranian, es un perro de estatura menor y con mucho pelo, son provenientes del norte del mundo, un ejemplo es Alaska- solo me quede callada escuchando su explicación para después acercar mi mano poco a poco.
Me esperaba pacientemente como poco a poco la bola de pelos se acercaba hacia mi mano e intentaba olerla, fue lo mas hermoso que he visto en mi vida. ¿Quien dijo que el amor a primera vista no existe?, ver como una naricita color negro resaltaba de su pelo negro, para después una pequeña lengua color rosa se asomaba mientras trataba dar lamidas en mi mano. Para después de 1 minuta voltearme a ver y si, definitivamente me e enamorado, unos ojos enormes color azul claro, con pequeñas lagrimas saliendo de esos ojos haciendo que los ojos se vean mas grandes, para finalizar con un pequeño sonrojo que a pesar de que tenia pelo se podia ver claramente.
- Lo quiero - Lo dije sin pensar en las consecuencias de mis palabras, pero en este momento me encantaría ser egoísta y tener al pequeño perro que casi del tamaño de mi mano estirada - excelente!!!! - dijo la muchacha que me atendía - Es un macho, tiene tan solo 3 meses, pero tranquila viene con todas las vacunas, así que ya puede salir sin ningún problema a la calle, aun que le recomiendo que por ahora no lo saque mucho a la calle por su tamaño, aparte de que el perro es muy tímido - mientras decía eso sacaba las llaves para poder sacar a perro del cuarto que estaba y cuando lo saco, efectivamente, es del tamaño de una mano adulta, para después ir a la recepción.
La verdad yo no escuchaba nada, solo estaba pensando en la regañiza que tendré en casa y el desperdicio de dinero que acabo de hacer, ya que hasta donde yo lo se, los Pomerania son caros, cuando me di cuenta ya estaba pagando, ¿Cuanto? no se, solo me devolvieron el cambio, ¿Cuato di?, ni idea, mi cuerpo salio del trance cuando ya estaba fuera con mi nuevo "hijo", ¿Debería devolverlo?, si tal vez sea lo mejor.
Cuando iba a volver a la tienda de mascotas escucho un pequeño ladrido volteo y apenas veo que llevo una cobija color azul con estampado de la raza de mi perro, para después en la misma mano una bolsa, donde no podía ver que esta dentro de la bolsa de tela con el logo de la tienda, ¿Lo habrá pagado? ni idea y en la otra mano llevo un tipo de cama transporte de color negro con morado y adentro estaba el perrito. Me resigne y camine a el parque mas cercano, para sentarme en frente de los juegos de los niños, donde por cierto había muchos niños, pero ignoré eso.
Se senté en una de las bancas y dejé la pequeña cobija del lado izquierdo y la cama, trasporte del lado derecho, para poder ver con mas comodidad que habia dentro de la bolsa. En la bolsa se encontraba un shampoo especial para el perro, ya que este contenía mucho pelo, tambien esta un cepillo para perro, un no se que para quitar el pelo y un pequeño moño color azul especial para no lastimar al perrito. Lo volví a guardar para abrir el pequeño trasporte y sacar el perrito, mirándolo mejor es mas bello que recordaba, tal vez era por la oscuridad del cuarto donde se encontraba.
Lo saque con cuidado y con una sola mano lo pude cargar, pero decidí agarrarlo con las dos manos por sus axilas, para conformas, si era macho, lo volte a ver y sus ojos me ganaron, los ojos mas puros de mi vida, como un ángel que te protegerá del mal del mundo, sus ojos se veía lo inteligente que era y lo cariñoso que seria, su nariz se movía desesperadamente por olerme y movía su colita como nunca, aparte de la movida de sus orejas lo hacía ver mas adorable, inconscientemente me rei para acercarlo a mi cachete y que el me pudiera oler mejor, lo que no me esperaba es que con su pequeña lengua lamiera mi oreja, tal vez no sea tan malo.
- De ahora en adelante te llamaras Takemichi, Takemichi Hanagaki, ya que como yo me llamo ______ Hanagaki, tu también te llamaras así. Bienvenido a casa Takemichi-.
Ok, realmente no sé si voy a continuar con esta historia, ya que solo se me ocurrió de paso, no tiene un desarrollo o un final o mi flojera para continuar la historia.
De hecho la escribí como un calmante por lo que está pasando en el manga, como un tipo de descanso, pero repito tal vez lo dejo inconcluso.
Que les parece??
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mi mascota
Humor_____ cansada de la vida, decide hacer uno de las travesuras más grandes de su vida, adoptar un perrito. Por qué si, su vida era tan aburrida que lo más extremo que ha hecho es adoptar un perrito. Lo llamo Takemichi, un pomerania negro con ojos azul...