↷✦ 𝟬𝟬𝟭

1.1K 111 39
                                    

-Vuelvo al rato, no me esperes despierto -avisó TaeHyun antes de salir por la puerta principal

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

-Vuelvo al rato, no me esperes despierto -avisó TaeHyun antes de salir por la puerta principal.

Sin poder contestar, BeomGyu soltó un suspiro agotador por vivir la misma secuencia de todas las mañanas. TaeHyun siempre se saltaba el desayuno por irse al trabajo con prisas. Llevaban así ya unas semanas, desde su aniversario fueron cambiando las cosas en su relación, las palabras dulces ya no eran dichas, el placer de hacer el amor ya no existía, y la fidelidad junto con la confianza, ya se había esfumado como espuma de mar.

BeomGyu no era tonto, sabía que todas esas noches donde TaeHyun llegaba tardé eran por irse a tomar con sus amigos a algún bar, estaba cansado. Cansado de esperarlo todas las noches, porque su preocupación era más que su enojo, y sabía que siempre terminaría perdonando a TaeHyun, porque lo amaba.

Pero TaeHyun parecía que no sentía lo mismo.

El timbre de su departamento sonó. Pausando lo que estaba haciendo fue atender la puerta, encontrándose con su vecino; Choi SooBin.

-SooBin... ¿Necesitas algo? -dijo BeomGyu, observando a su vecino parado en el marco de su puerta.

-Buenos días para ti también, BeomGyu -dijo burlón-. Vine a invitarte a la fiesta de YooA, ¿podrás asistir? -preguntó.

BeomGyu dudo. No estaba cien por ciento seguro de poder ir junto con TaeHyun, sabía bien que le diría el mayor 'No puedo, estaré ocupado'. Iba a rechazar esa invitación en aquel momento, al no ser de haber visto a una pequeña niña que apareció detrás de SooBin.

-¿Si podrás ir, verdad? -preguntó la pequeña, jugando con sus manitas y su mirada de cachorro triste.

Y BeomGyu se rindió ante eso-. Si iré, solo para lucir y darte tu regalo.

La pequeña hija del australiano mayor sonrió, mientras se devolvía a su departamento dando saltitos. SooBin, quien observaba y esperaba ansioso una respuesta del contrario, sonrió.

-Te veo en ese día, ponte más guapo de lo normal -guiño un ojo para después despedirse y ir a con su hija.

BeomGyu cerró la puerta cuando término de despedirse, al ver a la pequeña YooA, no pudo evitar deprimirse. Siempre había soñado tener una hija o hijo con TaeHyun, tenían los papeles ya listos para una adopción, lo habían planeado juntos... Pero ahora, solo BeomGyu deseaba aquello.

♡ ›ׅ 𖦹 !
...

La puerta se volvió a escuchar pero esta vez junto con el sonido de unas llaves, indicándole a un cansado BeomGyu que TaeHyun había llegado. Mirando el reloj observo la hora '10:49', la misma hora de siempre.

-Al fin llegas ¿Has estado bien el trabajo, no? -preguntó, entrando a la sala, donde daba la entrada a todo el lugar.

Con decepción miro a su pareja, su ropa estaba desarreglada al igual que su cabello, que estaba despeinado. Sus ojos estaban cansados, y sus labios hinchados.

-Ah, si, todo bien, cariño -dijo cortante y desinteresado.

-Supongo que si a estado genial, hueles a alcohol y estas hecho un lío -cruzándose de brazos, se acercó a su novio- ¿Con quién demonios has estado, eh? -habló enojado al darse cuenta del lápiz labial que había en la zona del cuello.

-Bueno, ¿Y a ti que te importa, BeomGyu? -alzó su tono de voz de manera enojada- Solo estuve en el trabajo ¡joder! Obtuvimos buenas ventas, y decidimos celebrarlo, y ya.

-Ajá si, ¿Qué me explicas del labial? De aseguró un compañero tuyo que tiende a usar labial rojo te beso -dijo BeomGyu con burla en sus palabras.

-Son ideas tuyas, es solo pintura de esta tarde, tenía la tinta de mis bolígrafos por todos lados -se quitó el saco que llevaba puesto, dejando ver su camisa con manchas rojas.

BeomGyu se sintió culpable y un tonto.

-Perdón Hyunnie, es solo que... ya no pasamos tanto tiempo juntos, ya no me tratas tan amorosamente -se abrazo a sí mismo-, y eso me hace pensar cosas que no son, perdón ¿si?

TaeHyun bufó, abrazando a BeomGyu por la espalda, depósito un casto beso en su mejilla-: Está bien pequeño, te perdono. Sabes bien que el trabajo me quita el tiempo de estar contigo.

-Lo sé, perdón -se disculpó, sintiéndose culpable.

-Ya, ya. Olvidemos esto, y vayamos a cenar eso que huele tan rico -dejando un último beso pero esta vez en sus labios, se separó para ir a la cocina junto con BeomGyu.

 Olvidemos esto, y vayamos a cenar eso que huele tan rico -dejando un último beso pero esta vez en sus labios, se separó para ir a la cocina junto con BeomGyu

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
two happy, one sad [pausada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora