Dualidad

Capítulo 6: Acosador

Capítulo 6:

Dualidad

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"Hueles a humo otra vez," resopló Hermione en su oído; podía sentir su mirada severa perforando un lado de su cara.

Harry no la miró.

Dumbledore no le estaba enseñando mucho de nada y era frustrante. Destellos de la vida de Tom Riddle pasaron rápidamente ante sus ojos. Lo que Dumbledore le mostró fue bastante perturbador - Tom Riddle era un tipo perturbador - posiblemente fue útil, pero era demasiado pronto para ver su propósito. ¿Había algún propósito o Dumbledore solo quería que conociera mejor al enemigo?

"Así que lo hago", respondió Harry sin comprender el comentario de Hermione.

¿Cómo iba a derrotar a Voldemort viajando a unos pocos recuerdos que Dumbledore podía reunir? Parecía bastante inútil. Voldemort era poderoso, debería aprender algún tipo de magia avanzada, al menos. Le recordó a Lupin en tercer año, enseñándole el encantamiento Patronus. El profesor Lupin era más ayuda para él entonces que Dumbledore era actualmente .

"Has estado fumando." Hermione era solo una voz débil en la distancia de sus pensamientos.

Harry siguió mirando las llamas en la chimenea de la sala común. ¿Qué ganaría perfilar psicológicamente a Voldemort? "Sí", dijo, distante, exhalando un largo suspiro.

Bueno, por el lado positivo, de esta manera podría entender la forma en que pensaba Voldemort, pero eso era todo un misterio para él incluso después de lo que vio. Dumbledore tampoco le diría lo que le pasó a su mano, pero Harry tenía la sensación de que todo estaba conectado de alguna manera. Ese anillo...

"¡Es un hábito desagradable , Harry! Adictivo ... ¿ quieres matarte? ¡Hay demasiado en juego para eso!" Hermione exclamó tan silenciosamente como pudo en su oído. Harry no estaba prestando mucha atención, pero podía sentir la frustración saliendo de ella en espesas oleadas.

Lo ignoró.

No era como si tuviera la oportunidad de derrotar a Voldemort. Probablemente moriría al final. ¿De qué manera podría evitar eso? ¡Voldemort llevaba cincuenta y tantos años! Y la habilidad mágica de Harry, en su opinión, estaba por debajo de la media en el mejor de los casos.

No, no había forma de que Harry pudiera vencerlo.

El poder que el Señor Oscuro no conoce ...

Bueno, Harry tampoco sabía qué poder tenía.

¿Amor? ¿Se estaba engañando Dumbledore con eso? ¿Cómo podía el amor destruir a Voldemort?

Entonces, ¿por qué no hacer que Snape le prepare una poción de amor para el Señor Oscuro? Ponlo en su bebida, ponlo sobre Malfoy. Pero ¡oh! Gran accidente: Snape metió accidentalmente su grasiento ADN en la infusión y Voldemort se enamora del imbécil. La obsesión de Voldemort se vuelve hacia Snape. ¡El mundo está salvado! Snape y Voldemort viven felices, o miserables , para siempre.

La esquina del labio de Harry se torció en una leve sonrisa y negó con la cabeza. Daphne debió de estar pegándose a él.

"¿Harry? ¿Puedes oírme?" Hermione agitó una mano frente a su rostro y él parpadeó, volviéndose hacia ella.

"¿Hm?"

"¡Honestamente!" Hermione se puso de pie y puso sus manos en sus caderas. "¡Ustedes chicos son todos iguales!"

Frunció el ceño mientras la veía alejarse, subiendo pisando fuerte las escaleras hacia su dormitorio. Pensó que la había escuchado ... Algo acerca de que fumar era malo para él. Sí, tenía razón, lo era.

Harry se encogió de hombros y se retiró a su dormitorio, solo para ser atacado por Seamus. ¿Cesó alguna vez el acoso ?

"Entonces, Daphne Greengrass, ¿eh?"

Harry puso los ojos en blanco y comenzó a desabotonarse la camisa. El resto de los chicos estaban abajo en la sala común, afortunadamente. Ya era bastante malo que Ron y Seamus supieran sobre Daphne. "Siempre y cuando no le digas eso a nadie."

Seamus le dirigió una mirada calculadora y entrecerró los ojos. Entonces, de repente, asintió con la cabeza, una sonrisa suave se extendió por su rostro. "¿Lo estás manteniendo en secreto?"

"Slytherin, Gryffindor ... Probablemente sea una buena idea", respondió Harry, quitándose la camisa. Sin mencionar las posibles ramificaciones que resultarían si algo así se convirtiera en un conocimiento generalizado , agregó en su cabeza.

"Sí ..." Seamus se calló, pero se animó con una sonrisa. "Cuéntamelo".

Con un suspiro, Harry se desnudó hasta quedar en bóxers después de quitarse los zapatos. El se encogió de hombros. "No hay mucho que decir."

Gimiendo, Seamus se dejó caer en su cama dramáticamente. "Me estás matando."

"No beso y digo", le dijo Harry, con una sonrisa descarada, antes de deslizarse debajo de sus mantas.

"Odio ese dicho."

Sonriendo con satisfacción, Harry se acercó a su mesita de noche para tomar su texto de Pociones, listo para asentarse en las notas del Príncipe Mestizo.

"Merlín, ¿tienes una de las chicas más aptas de nuestro año y no vas a presumir de ello?"

"No es necesario", respondió Harry, desinteresadamente, abriendo el libro por su página de orejas de perro. Hermione siempre odiaba que le echara un vistazo a las páginas. Él sonrió y miró hacia la mesa de pociones en el capítulo de pociones para dormir, que contiene los ingredientes para el sueño sin sueños y sus propiedades.

"No eres divertido, tan malo como Dean. Ni siquiera me hablará de Ginny."

Suspirando una vez más, Harry dejó el libro en su regazo. "Está bien, te lo diré", cedió.

Seamus se enderezó de golpe, sentándose en el borde de la cama con una amplia sonrisa. "Sabía que vendrías, amigo."

"Daphne es genial." Lo dejó así.

Seamus se mantuvo firme en sus palabras, obviamente esperando más.

Su rostro decayó después de unos segundos de silencio. "¿Eso es todo?"

Harry no respondió; sus ojos estaban fijos en la página, apenas registrando lo que estaba leyendo en ese momento.

"¡Ya nadie me da ningún material de pajas decente! ¿Qué les pasó a ustedes?"

Harry frunció el ceño y miró por el rabillo del ojo al chico irlandés. "Tal vez porque se utiliza nuestros 'historias' como  "material"

"No lo sabías - ¡Solo te lo acabo de decir!"

"Tus hechizos silenciadores no son tan buenos, ¿sabes?"

Una mirada de horror cruzó el rostro de Seamus y se apoyó en la cabecera, desinflado. Satisfecho de haber callado las acoso de Seamus por un tiempo, Harry tomó el libro del Príncipe y lo leyó.