—¿Qué tal con tu novia? —Karina rodó los ojos.
—Giselle, sabes que no es mi novia de verdad.
—Pero te gusta pasar tiempo con ella —dijo recostándose sobre la cama de Karina.
—Que me gustara el detalle del mariposario no significa nada.
—Vamos Karina, sabes que no es solo eso... Lleváis toda esta semana haciendo cosas en pareja.
—Porque estoy obligada, aun queda una semana —concluyó terminando de maquillarse.
—¿Minjeong también te obligó ayer a montar el numerito de la cafetería? —un rubor bastante notorio empezó a subir por el rostro de Karina mientras recordaba.
*flashback*
Karina caminaba por los pasillos con los libros de su última clase, Ciencias políticas. Le sorprendía tener una asignatura como esa pero realmente lo agradecía para poder aprender un poco de cultura general. A estas alturas del siglo XXI era algo que todo el mundo necesitaba.
La morena llevaba dos días bastante extraños. Desde la cita en el mariposario las cosas habían cambiado para ella, ya no sentía que odiaba a Minjeong, de hecho, el sentimiento había cambiado completamente. Últimamente las emociones de Karina estaban a flor de piel, cualquier cosa la sentía demasiado, ya sea para bien o para mal, y el hecho de que Minjeong llevara dos días evitándola era una de ellas. ¿Qué había pasado? ¿No se supone que teníamos un trato?, pensaba Karina. Pero... ¿Desde cuándo le importaba eso a la morena? ¿Desde cuando pensaba tanto en Minjeong?
Karina era una persona cabezota, orgullosa, y aunque ella misma supiera a ciencia cierta que estaba empezando a sentir cosas por Minjeong, jamás lo admitiría, no si en su cerebro se había propuesto estar con Jiwon y según Karina... Ella siempre ganaba.
La morena llegó a la cafetería en busca de Giselle pero no había rastro de su amiga, sin embargo se encontró una situación un tanto sorprendente.
Minjeong, que llevaba días sin hablar con Karina, estaba sentada junto a una chica que a los ojos de la morena era guapísima. Jamás había visto a aquella chica, era una cara totalmente nueva y, sin saber muy buen por qué, a Karina le empezó a irritar ver a Minjeong reír y pasarlo bien con alguien que no fuera ella. ¿Se supone que era su novia, no? ¿Y qué estaba haciendo con ella? Karina no debería ser la ignorada.
Joder Karina, que no es tu novia de verdad, ¿recuerdas? Es un juego, pensó la morena intentando tranquilizarse a sí misma.
Aquella chica se acercó a Minjeong para susurrarle algo y la rubia empezó a reír. La mano de Minjeong se posó sobre su brazo y creo que aquello fue la guinda que colmó el vaso de Karina, que ya estaba más que rebosado.
Adiós paciencia.
Adiós tranquilidad.
—Será... —dijo en voz baja para sí misma.
Sin pensarlo dos veces, Karina fue directa hacia la mesa donde ambas estaban sentadas y se colocó justo en frente de las dos, dejando a Minjeong boquiabierta y a la otra chica un tanto confusa.
—¡Karina! ¿Qué haces aquí? No te esperaba —dijo Minjeong con sorpresa.
—Ya veo que no me esperabas —su sonrisa fue forzada—. ¿Y tú eres?
—Hyunjin, ¿y tú? —dijo amablemente.
—Karina, su novia —aclaró con una sonrisa en el rostro.
Minjeong, nada más escuchar aquella frase, empezó a toser porque se atragantó con su propia saliva. Hasta ese punto de sorpresa habíamos llegado.
ESTÁS LEYENDO
Deal | winrina
FanfictionKarina odiaba a su vecina Kim Minjeong. No la soportaba y no podía ni verla, pero por desgracia tenía un crush en Jiwon, la hermana de Minjeong, y las cosas empezaron a volverse un poco complicadas. ¿Qué pasaría si Minjeong le ofreciera hacer un tra...