Capítulo 15: "Si los sentimientos fluyen, todo es más fácil"

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[¿Cómo se supone que debo amarte, cuando no amo ni la mitad de lo que soy?]

Narrador omnisciente

Cinco trato de controlarse lo más que pudo, todo le cayó como un balde de agua fría, genial pensó acababa de aclarar sus sentimientos para toparse con eso en las narices, intento con todas sus fuerzas no ponerle nombre a la sensación amarga que se instaló en su pecho...no en definitiva no tenía que ser lo que su traicionera conciencia estaba pensando. Que estúpido. Solo se habían besado una vez eso no significaba nada ¿O sí?

Significo todo para ti.

Le reprendió una vocecilla en algún lugar de su cabeza. Giro su vista hacia Vanya.

Ella se veía tan inocente ajena a la tensión e incomodidad del asunto. Tan ella. Por un breve instante su mirada y la de ella se conectaron, no pudo descifrar la mirada de la castaña, tomo fuerzas y desvió la mirada.

Todo quedo en silencio, por primera vez sus demás hermanos no dijeron ningún comentario, particularmente ninguno entendía ¿No se suponía que la odiaba? ¿No fue el primero en aceptar su papel, llamándola ordinaria cada vez que podía?

Ciertamente tenía demasiadas dudas y pocas respuestas.

Antes de que pudiera pronunciar una palabra escucho la fuerte y molesta alarma de emergencia, Cinco no lo pensó dos veces y salió de ahí corriendo junto con sus demás hermanos que corrían a sus respectivos cuartos, más tarde hablare con ella, pensó antes de salir por las puertas de la academia, venciendo el mal una vez más.

[...]

Para ser sinceros su misión no fue tan fácil, algunos ladrones habían logrado entrar a una bóveda importante en el banco, a Cinco vagamente le recordó a la primera vez que fueron a una misión el día en el que el mundo conoció a la que años más tarde sería la reconocida Academia Umbrella salvando al día cuando los necesiten, Cinco tomo una bocada de aire antes de salir del auto seguido de sus hermanos, había demasiada gente y bullicio cosa que detestaba, algunos fans traían diversos carteles, revistas, vestidos como ellos con uniformes, o alguna figura de colección de ellos, en la mayoría niños o niñas alabándolos.

Cinco camino tranquilamente, volteo lentamente al observar a un peculiar chico tratando de saltar la barricada con un maletín, logrando su cometido jalando del brazo de su hermana Allison, detuvo la caminata de Klaus quien pasaba tranquilamente.

-Lo siento, soy tu mayor admirador-. Pronuncio aquel chico le calculaba unos trece al igual que ellos.

-No deberías estar aquí-. Intervino Luther soltando a Allison a quien rápidamente tomaron de la muñeca, entraron rápidamente a la academia apoyándose en las puertas, esperaban la señal de su padre, tomar la foto y entrar.

-¡Vuelve atrás de la barricada!-. Cinco frunció el ceño disgustadamente, ya veía venir el discurso que su padre armaría para dejar a ese chico en su lugar.

-Nací el mismo día que los niños de la academia-. Comenzó a decir aquel chico.

-Creo que soy como ellos debo serlo.

Cruzo sus brazos apoyándose en la puerta, sus demás hermanos veían la escena algunos con muecas de fastidio y pena, otros con diversión, la suya particularmente en arrogancia y diversión. Técnicamente no era el primero niño que llegaba alegando ser como ellos.

-Aún no he descifrado cual es mi poder pero con su ayuda, podremos saberlo-. Compartió una mirada un poco disgustada con Allison, ya sabían para donde iba la cosa.

❣︎𝐋𝐚 𝐏𝐞𝐫𝐬𝐨𝐧𝐚 𝐂𝐨𝐫𝐫𝐞𝐜𝐭𝐚❣︎ (𝐅𝐢𝐯𝐞𝐲𝐚)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora