Para empezar, voy a describir a Chio :(asi le llamábamos) tenia una cara medianamente linda, pelo largo cafe claro,un busto y un trasero de tamaño común, hasta ahora, nada impresionante. Pero Rocío tenía 2 cosas que me volvian loco: la primera era que tenía unos labios gruesos y hermosos, con los que fantaseaba a menudo, y lo segundo era que ella era algo putilla, es decir, era la unica de mi clase que había confesado que se masturbaba, y que lo hacía seguido. Yo tenía la suerte de sentarme a su lado en clase, por lo cual la conocía muy bien, asi que me enteré que ella iba a unas clases de natación en el centro de df y que ella era la unica alumna que iba a esa hora, debido a esto tuve la fantástica, ingeniosa y estupenda idea de ir a esa misma hora a clases de natación
Hora de poner en marcha el plan: Ingresé a las clases, a la misma hora que Rocío y esperé unas semanas para que ella se acostumbrase a mi presencia en su clase de natación, el plan era que iba a "equivocarme" de vestidor y que ella como era algo puta en el sentido más literal posible, iba a proceder a tener sexo conmigo. Pero ocurrio algo que hizo que el plan fuera por otro camino: Corría la tercera semana desde que entre a las clases de natación y Chio y yo estabamos practicando clavados, por lo cual entrabamos y salíamos de la piscina constantemente, y por esas cosas de la vida, al salir de la piscina, se me paró, si, tuve una fuerte erección que era muy dificil de ocultar, pues el traje de baño no era mas grande que un calzoncillo tipo boxer, y se notaba el bulto en mi entrepierna, no tenía forma de evitarla, asi que la ignoré. Un rato despues Roció se acerca a mi y me dice: -Vaya manguera que llevas ahí. No supe que responder , justo antes de que dejara escapar un sonido de indiferencia, Chio me dijo: -Me excita mucho. Sorprendido, noté como sus pezones estaban sobresaliendo en su traje de baño, sin que yo dijera nada, Chio me dijo que le siguiera la corriente, fue donde la instructora y le dijo que tenía dolor de estomago al igual que yo. La instructora nos dijo que fueramos a cambiarnos porque quizá el agua estaba sucia; la verdad es que me pareció un argumento muy pobre de parte de una profesional. Pero desconcertado, obedeci a la señora.
Chio me dijo que la siguiera y en ese momento llegamos a las duchas de damas, entramos en la ducha y me bajo el traje de baño, dejando expuesto mi pene ante sus ojos, Chio se agachó y con sus sexys, hermosos, rosados y gruesos labios, comenzo a chupar con cuidado mi miembro, mientras al mismo tiempo se quitaba el suyo, dejandome ver que sus pezones eran pequeños, pero estaban duros como roca.
Luego de su increíblemente placentera mamada, Rocío se paró y se puso de espalda contra la pared, y me pidió que la penetrara duro contra el muro, acto seguido, comencé a meter y sacar, mientras ella sacudía placenteramente su culo, seguimos durante unos 13 o 14 minutos cuando me corri en ella, ella me dijo que le habia encantado y que quería repetirlo algun día, luego me dio un largo beso en los labios, en esos deliciosos labios que me provocaban tanto, esos actos de preciosidad que me hacían fantasear cada día. Hasta ahora era lo más excitante que había vivido.
Rocío no quedó embarazada debido a que tomaba pastillas anticonceptivas
