XI: ENREDADOS

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HOSEOK

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HOSEOK

Cuando me desperté y no vi a Taehyung en la cama tuve un mal presentimiento, luego vi su mensaje, lo cual si bien fue algo más tranquilizador no me quitaba del pecho esa sensación de que algo pasaba. Con cuidado de no despertar a mi pequeño tesorito, quien yacía dormido aún, contemple su bello rostro, su boquita estaba brevemente abierta y su rostro pacifico. Me llenaba el alma y devolvió mi paz con solo verlo.
Me di una ducha rápida y puse ropa limpia, una vez en la cocina decidí preparar algo delicioso. Pero lamentablemente mis dotes culinarios eran y seguirán siendo un asco.
Sin más busque el número de una pastelería cercana que hacía entregas por delivery, ordene pastelitos con fruta, algunos panqueuques. Y cuatro cup cake. Bueno, si dirán.. eso es mucho para el desayuno, y también concuerdo con eso, pero tengo hambre. Pareciese que todo aquello que no comí durante el tiempo wn que no estaba Namjoon, ahora lo quería consumir. Y punto, a lo más subiré unos kilitos. No por ello voy a dejar de comer.

Además quería consentir a mi bebé.

Todo estuvo listo temprano, Tae no había vuelto aún. Con Nam tomamos nuestros desayuno viendo una caricatura en el televisor.
Pero algo rondaba en mi sistema, mis instinto decía que esta calma traía algo consigo.

Llegó la hora del almuerzo y Tae aún no aparecía, comenzaba a preocuparme. Debe haber salido hace horas de la fiscalia.
Estaba por tomar mi teléfono cuando la puerta fue abierta dejando ver a mi guapo hombre, lucia algo cansado, y sus ojos parecían preocupados.

-¡¡Papá!!..-Namjoon corrió a los brazos de su padre, Tae abrió sus brazos para recibirlo sonriendo amorosamente. Beso su cabecita y lo presiono a su cuerpo.

-Ohjj, amo estos recibimientos, creo que me puedo acostumbrar.

-Hola mi amor,-espeté en voz más baja, mirándole preocupado.- ¿que tal todo? -Tae suspiro y beso nuevamente la cabeza de Nam para luego dejarlo de pie, Nam salió corriendo a la habitación a buscar juguetes.

-Cariño, tenemos que hablar, pero por ahora... solo puedo decir que debemos empacar nuestras cosas y las de Namjoon, nos vamos, ahora.

-¿Qué?

—Puedo explicarlo en el camino bebé, no te preocupes ¿si? Todo estará bien, lo prometo.

—¿Pero que paso?

-Mi Hobi- se acerco y acaricio mis brazo para luego besarme.- solo... es necesario, es por tu bien y el de nuestro hijo.

-Bien... voy a hacer lo que dices, pero necesito que me lo digas lo antes posible por que juro que me volveré loco, no comprendo nada y estoy asustado. Aunque me pidas que no lo esté, esto es demasiado extraño. Y repentino.

UN FLORISTA EN SEÚL II (VHOPE) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora