Ahora una razón de peso para irme...una bruja ha entrado a mi casa, una vieja que mi mamá trajo a casa para " protegernos" de una amante de mi papá que nos había echado brujería ( según la bruja).
Era domingo en la mañana yo estaba en misa luego fui al grupo de oración mi abuela fue por mí a Galilea y me dijo que mi mamá me está esperando, yo no estaba muy convencida de ir a casa sabía lo que me estaba esperando, pero de todas formas no tenía otra salida,tenía que ir .
Cuando llegué a la casa estaba llena de incienso (no hay nada que yo odie más que el olor a incienso) me tapé la nariz y la boca con mis manos y mi mamá me dijo qué fuera al patio, cuando llegué al patio vi a una señora de edad, al parecer tuerta (no veía bien o estaba ciega de un ojo) me dijo q me sentara y yo hice caso. Empezó a fumar tabaco y luego de cada inhalada lo miraba y decía algo de mi vida que resultaba ser verdad. Yo tenía mis dudas: ¿y si alguien le dijo todo eso y ella solo lo repite?
Decía cosas como, vas a ser médico y seguirás los pasos de tu madre.. Pero yo pensaba.. No quiero seguir esos pasos, yo quiero ser mi propia jefe. Me dijo q había alguien que me tenía envidia pero no podía imaginar quien. Que habrían tres hombres en mi vida: un blanco, otro moreno y el otro trigueño. Que uno me quería más que los otros pero todo estaba en mis manos.
Si como lo están pensando no decía nada del otro mundo, decía cosas en las q era practicamente imposible equivocarse. Luego nos dio a beber un vino y nos dijo q nos bañaramos con un agua de color café que creo que era de tabaco. Yaledis , una muchacha que vivía con nosotras me decía que eso fue un gran error, que estábamos prácticamente pactadas y eso no me dejaba conciliar el sueño, vivía pensando en que alguna aterradora sombra me perseguía. No podía dormir tranquila, no podía salir de mi cuarto en la noche ( así que me aguantaba para ir al baño o tomar algo hasta la mañana siguiente). Era una tortura para mi mente. Rezaba todos los días para que mi mente estuviera tranquila, para poder dormir, para dejar de sentir miedo, pero nada funcionaba.
Quería escapar de ese infierno que jugaba con mi mente y mi tranquilidad, sentía que si me iba de ese lugar, todo volvería a la normalidad.

ESTÁS LEYENDO
Un buen cambio
Non-FictionRegreso a el pueblo que me vio crecer. Extraño la ciudad y la gente tan amigable de la costa. La mayoría de recuerdos que tengo de este pueblo son malos. Dejé a mi familia, a mis amigos y a "mi primer amor", por centrarme en mi " futuro", prepararme...