what we are

02

Jungkook sabía que la vida no consistía en esperar que la lluvia se detenga, era al menos el intento de aprender a disfrutarla. El aroma a tierra mojada, día tranquilo, sin prisa, el detenerse a ver cada gotita cayendo, la escencia que desprende a eso que llamamos día gris, pero que no necesariamente tomemos ese concepto, y que aún podamos tener un día colorido mas allá del clima.

Pero con Taehyung... no es que se tratase de que el estar juntos genere el concepto de día gris. Pero aquello que quiere tomar positivo, se le tornaba difícil cuando el aroma no era a tierra mojada, olía decepción y las gotas no eran mas que esperanzas agotadas, un mal futuro, lo que quisiera que sea un día tranquilo, podía tenerlo hasta que su corazón corre apresuradamente cada vez que el chico del cual está enamorado, le da un sin fin de motivos para seguir estándolo, cada brisa húmeda era cada segundo pesado que él seguía en esa confusión, donde tiene todo lo suficiente como para ir y decirle todo a Taehyung, pero por miedo a perderlo se queda en la nada, mientras él solito queda bajo la lluvia mojándose, y no como se muestra en las películas donde el protagonista canta o baila en ella.

Pero no importa cuán mojado esté debido a la lluvia, ni cuántas nubes cubren por completo el cielo, él sigue esperando el sol, sigue esperando a Taehyung, porque cada sonrisa que dicho ser le entrega, es un rayito de luz que logra escaparse de las nubes, y que aunque sea finito, le da la delicadeza y la calidez que él desea sentir siempre.

Porque sí, mientras una parte de él amagaba dejar a Taehyung ir, en su no mas profundo querer sabía que tal cosa no era una opción, y dejaría todo por tenerlo. Pero al final de todo, siempre era una intención, unas ganas, un deseo, una idea hipotética, una ilusión... por mas real que se sintiera.

Hay gente que vive enamorada del cielo sin importar el clima. Algún día encontrarás a alguien que te ame de la misma manera.

Su día corría a un paso lento, se podría decir que este caminaba, aunque su cabeza misma se tratase de una carrera tras otra, donde pensamientos fuertes y rápidos se presentan para que luego sigan otros. Todo el día sintiendo esa adrenalina, que no era nada buena como suelen ser a veces, sino un malestar que se tardaba en despedirse, ni siquiera le daba un descanso.

Si en algo era capaz de canalizar tal energía, que no hacía mas que consumirlo anímicamente, era gastarla pero en un sentido físico. ¿Qué mejor lugar para distraerse como el gimnasio? Donde suele pasar largas horas diarias, que por más que sean sesenta minutos en cualquier lado, de algún modo allí el tiempo se volvía extenso, y sus músculos no se quedaban atrás. Pero lo mas importante, es que ahí también ampliaba sus pensamientos, aclaraba todo lo que lo perseguía, todo lo que lo preocupaba, trataba de dejar de repetir lo que le hacía mal, en simultáneo él hacia otra serie de repeticiones, pero de ejercicios con aparatos en ese lugar que tanto le gustaba.

Rumbo al lugar donde pasaba un buen tiempo por gusto propio, si no era el parque o la casa de Taehyung, vió una heladería. Donde inevitablemente se teletransportó a sus recuerdos, disfrutando de un helado con quién más suele amar dicha cosa. Y para su mala suerte, sonó su celular.

Temía por el nombre que podía aparecer en la llamada. Y así fue, como en cuestión de una aparición, sin necesidad de ser física, el chico de ojos dulces volvía a él, mejor dicho, sus pensamientos lo atraían. Fue tan solo leer de quién se trataba, y ver como todo de él se volvía de una persona la cual no tiene ni contacto por al menos veinticuatro horas.

Jungkook atendió.

Su voz temblaba, no solo no sabía como iniciar, sino también no sentía poder hacerlo. Algo que días atras lo hacía como si fuese otra actividad fija del día... desayunar, entrenar, trabajar, hablar con Taehyung.

— ¿Jungkookie?

Un apodo tan tierno y único si era expresado por el jóven que está del otro lado de la llamada, pero que si fuese por el pelinegro, ya le dolía no poder cambir su nombre, y evitar que gente que no desea lo nombrara.

Pero no podía. Quedarse callado frente a Taehyung, imposible. O sea, le podía. Kim podía lograrlo todo. Por sobre Jungkook era un hecho.

— ¿Hm? — Intenta sonar de lo mas natural, y solo logra que el mayor destaque su ternura al hacer ese sonidito.

— Yo... quiero verte, debemos vernos.

No. No quería. Se sentía débil.

Y es que su voz no se oía animada, ya imaginó algo no tan bueno.

— Tae... — El suspiro largo que desprendió, dejó al otro de forma contraria, atrapando sus suspiros, su respiración. — No digas nada...

Sigue Jungkook — Te desearía  lo mejor, pero ya lo tenes a... ¿Bogum? como sea, seguro sea bueno porque lo elegiste vos... así que, no necesitas una aprobación mía.

Taehyung solo se avergonzaba, que la persona que más amaba en el mundo después de sus padres, quién mas confianza y deseos le tenía, se enterara de su noviazgo oculto donde a medida que decía quererlo, su inseguridad crecía. Hasta a él le costaba aceptar la pareja, su propia pareja, aceptar a otro que no sea Jungkook, donde también se sentía mal de no poder conformarse con ese chico tan bonito que conoció, y desde esa vez no paró de decirle y hacerle cosas lindas.

— Jungkook.

El mencionado, de pelo oscuro y cortito, de la forma de una bolita de chocolate, se encontraba en blanco, aunque no fuese similar a una bolita de chocolate blanco. Pero igual así, se encontraba quieto, solo por fuera, por supuesto.

— Como explicárte... Bogum, si, él. Ya no somos nada. Porque... — Taehyung, Taehyung iba a decirlo. — Solo vos me gustas.

Y finalmente, aquella hoja que decía estar incompleta, comenzó a ser trazada en tinta. Como se trataba de Taehyung, tenía mucho que escribir y poco papel.

AL FIN SUBI OTRO CAP XD
perdon la demora
sentia q era una caca (sigo sintiendo)
YA SUBO EL SIGUIENTE CAP Q TMB LA TENGO ESCRITA Y CREO Q YA APTA PARA SUBIR
porfa denle amor y espero q les guste en serio
este cap fue unas 400 palabras promedio mas cortito ;(((((((((
BYE DEJO D INTERRUMPIR LA LECTURA