"Demostraré a través de mi forma de vivir, si las cualidades de un rey residen en la sangre de una persona o en su carácter". -
El valiente y simpático cuarto príncipe cae bien a casi todo el mundo. La gente lo admira y su sonrisa confiada resulta c...
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MC: "Pero estoy sorprendida, sabes".
Leon: "¿Hmm? ¿Sobre qué?
MC: "Creí que sólo te estabas divirtiendo bebiendo con esos hombres, y que eso era todo".
Leon: "Sólo me estaba divirtiendo bebiendo con ellos".
MC: "¿Lo hacías? Pero entonces--"
Leon: "Quería beber con ellos, así que lo hice. Mientras bebíamos, me contaron sus problemas. Y me ocupé de ello. Eso es todo".
Lo hizo sonar tan simple, y al encontrarme con su mirada, recordé lo genuinamente feliz que se había mostrado en el festival.
(Creo que ahora lo entiendo).
Durante toda la noche había tenido la sensación de que algo no encajaba, y por fin supe lo que era.
MC: "Hablas con la gente del pueblo al mismo nivel, ¿no? Como si fueras uno de ellos. Aunque está claro que no lo eres".
Leon: "Creo que nuestra posición aquí es importante: estamos aquí para proteger el reino, y guiarlo en la dirección correcta".
Leon: "Pero ya sea que seamos de sangre real o común, todos somos humanos. No hay nada que nos haga diferentes, aparte de la suerte".
Su voz era tan clara y segura como su mirada, y mi corazón dio un vuelco en respuesta.
Leon: "Además, son las personas las que hacen de este reino lo que es. Sé que parece obvio, pero Rhodolite existe gracias a su gente".
Leon: "Y es por eso que me importa cada uno de los rhodolitianos. Quiero escuchar lo que todos ellos tienen que decir. Bueno, a tantos como sea posible".
Esas últimas palabras tenían un tono irónico, como si reconociera la imposibilidad de la tarea que se había impuesto.
Pero la convicción en su voz y en su mirada nunca vaciló, lo miré fijamente, cautivada por lo majestuoso que parecía.
(Sin embargo, si pudieras, hablarías con todos ellos. Y puedo ver lo decidido que estás a hacer lo correcto por ellos, sea como sea).
Su determinación e idealismo estaban impregnados de realismo, y en ese momento, me parecieron hermosos.
(Esto es lo que te define como cuarto príncipe de Rhodolite. Esto es el núcleo de lo que eres, ¿no?)
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