"El deber de una reina" (02) (NTR)

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Naofumi

Raphtalia seguía dormida en su cama, ahora que la veo bien ya tiene algunas partes de su cuerpo muy bien desarrolladas, además que su piel es muy suave y tersa... ahora que recuerdo no trae ropa interior, debo ponerle algo para que no tenga frío. (Naofumi se levanta de la silla y busca en las cosas de Raphtalia alguna prenda que esté limpia para ponérsela, al encontrarla regresa a su lugar y retira la cobija que cubre el cuerpo de su compañera) Vaya, sus piernas realmente son hermosas, a pesar de que hemos combatido en varias ocasiones cuida su piel muy bien... bueno habrá que hacer esto rápido, cerraré los ojos y le pondré esto... rayos así es muy difícil de hacer... tendré que mirar aunque lo hago por ella... no porque realmente quiera hacerle algo. (El chico abre un poco las piernas de Raphtalia y levanta ligeramente para meter su pierna en su ropa interior) Hagámoslo despacio para que no se despier... ¡Maldición acabo de ver su parte baja! A pesar de que siempre he pensado que todavía es una niña ya parece toda una adolecente... ya tiene algo de vello en su vagina... se ve muy bien desde aquí... tiene un apetitoso color rosadito y sus labios denotan que todavía es vir... ¿Qué estás pensando Naofumi? ¡Es tu compañera! Pero está dormida... no creo que se dé cuenta que estoy admirando sus partes íntimas además, ella siempre dice que haría cualquier cosa que le pidiera y tiene sentimientos por mi aunque por bien de ella y del equipo debo fingir que no lo sé.

Después de haber estado follado con la reina no había quedado satisfecho del todo y quería sacar esas ganas que todavía tenía de follar, creo que era la primera vez que lo había hecho desde que había llegado a este mundo... y creo que también la primera vez que lo hacía en toda mi vida, es algo patético pero con todo lo sucedido no se me pasaba por la mente el hacerlo con alguna chica de acá; mandé todo al carajo y aprovechando que Raphtalia estaba en buena posición me acerqué a sus piernas y comencé a frotar un poco sus muslos, ¡Joder son muy suaves y blanditos, hacen que quiera meter mi pene sobre ellos, seguí un poco hasta subir a sus ingles y al llegar a sus labios con mi dedo humedecido por mi saliva comencé a frotarlos ligeramente... poco a poco hasta que no aguanté más y metí mi dedo en su vagina, lo hice muy suavemente y despacio para que no la despertara por un movimiento brusco.

Quise saber que tan profundo llegaba mi dedo para ver si era conveniente follarla o no, todavía me hacía a la idea que no todo su cuerpo estaba desarrollado de tal forma que algunas partes todavía tuvieran la apariencia de niña; pero a final de cuentas decidí mejor no hacerlo por seguridad, en vez de eso descubrí sus pechos para admirarlos... se veían hermosos tan de cerca, eran tan redondos, cabía perfectamente en mi mano y al presionarlos la sensación era muy adictiva, además que sus pezones también eran de un hermoso color rosa claro... no pude aguantar más y comencé a lamerlos bruscamente una y otra vez, primero el izquierdo, luego el derecho y al final tomando ambos y metiéndolos a mi boca al mismo tiempo; Mi pene estaba que estallaba de la excitación pero no podía follarla, así que tome su mano y la puse en mi pene a modo de usarla como masturbador mientras seguía chupando sus pezones.

Estaba a punto de correrme pero no sabía en dónde hacerlo, no quería mancharla o dejar restos en su cama ni en sus sabanas, así que cuando estaba a punto de hacerlo apunté hacia el piso para después limpiarlo. ¡Cielos! ¡Esta ha sido la mejor paja de mi vida! Pero aun así no había sido suficiente para mi pene que seguía tan duro como mi escudo de tungsteno así que lo metí entre los pechos de Raphtalia para volverme a hacer otra paja con ellos. Tome sus pezones que ya estaban erectos y comencé a sacudirlos hacia adelante y atrás para que pudieran masturbar mi pene que con los restos de semen que habían quedado resbalaba un poco mejor entre ellos, la sensación era tan placentera que no duré mucho al hacerlo provocando que la siguiente carga de semen rociara la cara de Raphtalia.

Quería seguir haciéndolo pero escuché que Filo se había levantado de su cama y venía en dirección a nosotros. Use mi escudo de succión para limpiar el rostro de Raphtalia y los restos que estaban en el suelo, le puse su ropa interior y la tape de nuevo para que pareciera que no había sucedido nada.

Tate no Yuusa "El deber de una reina" (NTR)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora