Te amo, pero la vida es injusta

Capítulo 19

Disfruten el capítulo 💜💜💜

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Liam, después de haber ido a dejar a Emily y a las dos niñas a su propia casa, se quedó pensando en aquel beso que se dieron en la noria y del beso que le había dado después de dejarla en la mansión. Podía confirmar que ella aún lo amaba, tanto como él a ella. Obviamente que después de aquello, no se dirigieron ninguna palabra, porque la miraba desde el espejo retrovisor que estaba nerviosa.

También le había dicho sobre encontrarse nuevamente para que él pudiera estar cerca de las niñas. Obteniendo una respuesta de...

Flashback

- Emily espera un momento - la castaña se paró al momento que el azabache había articulado aquellas palabras.

- Niñas, sigan. Yo hablaré un momento con él, ¿Esta bien? - las niñas asintieron y fueron por última vez abrazar al azabache y despedir del pequeño Emilio, pero sorprendiéndose que ya se había quedado dormido.

La castaña al ver a las niñas ya dentro de la mansión, giro a ver al azabache.

- Dime.

- Quiero pasar más tiempo con ellas, por favor Emily.

- Te das cuenta del peligro que expones a mis hijas. ¿Qué pasaría cuando tu esposa se entere que las estás viendo? Dime. O peor aún, que se entere que Chelsea es tu hija.

- Ella es mi hija biológica Emily, al igual que Molly. Solo te pido que me dejes verlas. Corny no tiene por qué enterarse de lo que yo haga.

- Chelsea aún no sabe que eres su padre.

- Aún no es momento que lo sepa. Ya llegará ese momento, pero, antes que pase, quiero estar cerca de ella.

- Liam, no...

- Por favor Emily, no las he visto durante cinco años. Y ahora que las tengo aquí, al frente mío, no quiero separarme de ustedes. Por favor.

La castaña suspiro de rendición, porque el azabache tenía razón. También tenía el derecho de conocer a su hija, a pasar tiempo con ella, al igual que la pequeña Molly. No podía decirle que no, cuando sabía que él era su padre. Pero el miedo aún seguía, aunque hubiera promesas, podía ver desde lejos las malas intenciones de muchas personas, si se enteraban que el azabache y la castaña habían concebido una niña.

- Está bien - el azabache al escuchar aquella respuesta, la abrazo, asustando un poco de la impresión a la castaña.

- Disculpame - se separó el azabache, al caer en cuenta que lo había hecho sin su consentimiento.

- No te preocupes. Solo te quiero decir que por favor, nadie sepa que Chelsea es tu hija. Si las personas que no separaron se enteran, harán lo posible para que ella desaparezca. Llegue aquí, intentado no toparme contigo, por esta razón.

- El destino lo quiso así Emily. Aquello quería que te volviera a encontrar a ti y a nuestras hijas. Ellas son nuestras niñas, nuestras hijas, y eso nadie lo cambiarán. Al igual que Emilio, ellas tendrán todo de mi, aunque Chelsea no sepa que es mi hija, haré lo posible para cuidarlas.

- Solo espero no arrepentirme de esta decisión. Adiós.

La castaña estaba por voltear, hasta que una mano hizo que volteara nuevamente. Sin nisiquiera poder reaccionar, el azabache ya le había robado un beso. Se separó y le dio una pequeña sonrisa. Y antes de que la castaña dijera algo, el azabache subió al carro y se dispuso a manejar, dejando a una castaña sorprendida.