¡Fuera de mi casa!; ʸᵒᵒⁿˢᵉᵒᵏ

02 → 'Vecinos'

—¿Acaso llevas a un elefante en cada caja?

—Son cosas necesarias, Jungkook.

El aludido bufó antes de colocar la última caja sobre el suelo.

—Hyung, eran como cuarenta cajas—Colocó sus manos sobre su cintura—Y eso que los de la mudanza trajeron las demás hace tres días.

—No exageres

Jungkook negó riendo antes de tomar asiento en el sofá, Hoseok suspiró de cansancio al dar por terminado la mudanza. Jungkook, su amigo, había aceptado en traer las últimas cajas que quedó en su antigua casa en Gwangju, fue una buena oportunidad al saber que vendría aquí.

—¿Qué tal tu vecino? creí que vivirias solo.

El menor tomó entre sus manos el vaso de agua que el pelirojo le ofrecía e hizo una mueca de satisfacción al beberla por completo.

—También lo pensé—Resopló —La señora Min nunca mencionó que la casa era habitada por su amargado hijo. Ese chico es un idiota, cada que me ve lo aprovecha para decir que me largue.

Hoseok tomó asiento a su lado. El reconfortable sofá verde era tan cómodo y agradeció inmensamente a su madre por el.

—¿Crees qué este bien el cuadro ahí?

Ambos se encontraban mirando al frente, tratando se buscar el mejor ángulo posible para el retrato de gatitos blancos.

—Mm, creó que lo mejor es que lo coloques sobre la esquina de la puerta principal.

—Tienes razón—Concordó

El silencio cómodo llegó. Hoseok se mantenía con la atención sobre su telefono, SeokJin le había preguntado por Jungkook a través de un mensaje de texto. Al parecer no supo que él venía a Seúl.

—¿Por qué no le llevas un pastel en honra de paz?—Jungkook habló de repente. Hoseok aparto la vista del aparato y lo miró.

—¿Uh? ¿A qué te refieres?

—A tu vecino. Nadie se resiste a los pasteles, compra uno y se lo das — Propuso 

—¿Crees qué funcionará?

—Por supuesto que si, quizás hasta te invite a su casa— Sonrió con picardía.

Hoseok le dio un golpe con el cojín del sofá.

—¿No tenías que pasar por Jin hyung a su trabajo? Ha preguntado por ti, esta molesto.

—Es verdad, no le dije que vendría a Seúl—Le tendió el vaso con rapidez—Me avisas que tal te va, solo no compres chocomenta, a nadie le gusta ese sabor—Hizo una mueca de desagrado.

—A mi me gusta—Lo miró frunciendo el ceño

—Por eso mismo—Sonrió tomando su mochila.

Se despidieron y el menor se fue dejándolo pensativo.

¿Sería una buena idea?

El timbre sonó, lo había tocado.

Ahora sus manos temblaban, no sabía si darle un pastel al enemigo podría solucionar el problema y después ser el vecino cool y buena onda. 

"¿Y si no funciona?"

La puerta fue abierta. Hoseok entre abrió los ojos, no espero que abriera así de rápido. Su vecino lucía algo irritado al observar su presencia y su aspecto lucía muy somnoliento. Reincorporó su postura y le dedicó la mejor de sus sonrisas.

No pudo esperar más al resibir un gesto de desagrado por su parte.

—¡Hola! traje un poco de pastel de chocolate como honra de paz y se que no nos conocimos de buena ma..-

Un estruendo provocó que soltara un brinco desde su lugar por la agresión. Abrió ligeramente sus labios en busca de palabras para que escuche su severa indignación.

¡El idiota le cerro la puerta en la cara!

—¡No vengas aquí si no es a decirme que te iras!—Grito el piel blanca desde el otro lado de la puerta—Llévate tu pastel a otro lado.

—¡¿Cómo te atreves a cerrarme la puerta de esa manera? ¡¿Acaso no conoces el respeto?!

—Fíjate que contigo no lo vengo aplicando

—Eres un antipático —Expulsó con molestia—También un amargado, por eso vives solo ¿Quién querría estar a tu lado?

Todo fue silencioso. Hoseok respiro lentamente y torno una mueca de arrepentimiento.

"¿Qué hice?"

—¡Fuera de mi casa!—Su respuesta no fue la que esperaba—¿Crees qué eso me importa, Zanahoria andante? Pff, mejor ve empacando tus cosas que yo aquí no te quiero.

—¿Y si no lo hago qué?

—Te demandaría

—Tú madre no lucirá contenta si eso pasa

Yoongi apretó los puños, el idiota tenía razón.

—Buscare la forma de que te vayas, es un hecho.

Hoseok trago grueso.

Sin dudar esto era el principio de la guerra.

¡Gracias por leer!