11.

43 4 0
                                    

Supongo que bloqueo todo lo que podría hacerme feliz, que rechazo lo que podría hacerme tener una sonrisa pintada en la cara durante todo el día.

Solamente soy una chica muy fría a la que le cuesta demasiado abrirse a la gente, que no expresa sus sentimientos por nada, y que tiene miedo de compartir sus pensamientos más profundos. Una chica que simplemente es insegura, por el dolor de haber caído una y otra vez por las diversas situaciones que vivió, la misma que sigue caminando por el sendero con la más pesada soledad.

Luego pienso, ¿Para qué seguir creyendo y escuchando más estúpidas palabras? Si al fin y al cabo se las lleva el viento. Mis palabras, las de los demás, todas son iguales: todas terminan perdidas en un lugar que nadie conoce y nadie recuerda, para luego borrar de la memoria el haberlas pronunciado. ¿Qué sentido tendría hablar con alguien? ¿Qué sentido tendría agregar a alguna persona en mi mundo si es que luego va a fallarme? Si, a veces deseo poder estar con alguien y compartir alguna cosa, pero luego me acuerdo de las veces que me he caído por los demás, las veces que me han fallado, y ese pequeño deseo causado por un engaño de mi mente se desvanece, haciendo que vuelva a mi solitaria realidad.

-Toc toc. -Esa dulce y ronca voz volvía a sonar como música en mis oídos. Era la voz de la única persona que en dos años había insistido tanto en hablar conmigo, en sacarme una sonrisa, por más leve que fuese. La misma persona que intentaba hacerme confiar, sin conseguirlo.- ¿Puedo pasar?

-Claro que puedes, Harry. -Me senté con las piernas cruzadas, y él a mi lado, ambos sobre mi cama.

-¿Por qué el llanto?

-No estuve llorando -respondí cabizbaja. No quería mirarle a la cara, no después de lo que había pasado ayer.

-Yo no hablaba del ahora. Tienes los ojos muy hinchados, lo que me dice que estuviste llorando ayer.  ¿Qué pasó?

-Harry... No. -contesté seca.

-Brooke, estuviste llorando, lo que dice que algo anda mal, y quiero ayudarte. Para hacerlo, necesito que me digas qué ha pasado. Por favor, Brooke.

¿Por qué tenía que contarle? ¿Por qué volvía a sentir ese impulso de decirle todo lo que guardaba dentro, sin dejarme nada? ¿Por qué sentía que Harry era diferente? ¿POR QUÉ QUIERE SABER TANTO?

Las lágrimas amenazaban con salir, y yo batallaba para dejarlas guardadas en su sitio. Harry me miró, esperando mi respuesta.

-Está bien, ¿Quieres saber qué es lo que me pasa? Te lo diré: TENGO MIEDO. Tengo miedo a confiar en tí, tengo miedo de caer en el juego de la felicidad y luego salir perdiendo, tengo miedo de volver a la típica tristeza de siempre luego de sonreír, tengo miedo de acostumbrarme a los bellos momentos que me ofrece la vida para luego caer en la depresión de cada vez que me pase algo malo, tengo miedo de quererte, tengo miedo de sentir algo tan fuerte por tí que hasta duela... -una a una, fueron cayendo las muy malditas lágrimas. Ya no podía controlarlas.- Tengo mucho miedo, Harry.

Él me miró seriamente, con un pequeño brillo semi apagado en los ojos. Quizás le había molestado que le diga tan así las cosas. Básicamente le tiré todo mi "vómito verbal" a él, cuando no tenía culpa alguna.

-Lo siento, harry... Estoy siendo muy dura contigo, cuando no tienes nada que ver en todo esto. -él tomó mis manos en las suyas, y volvió a observarme largamente.

-¿Tienes miedo a que te deje caer? -sonrío tristemente, se le notaba el dolor en la mirada.- Brooke, yo nunca te dejaría sola. ¿Por qué no puedes entenderlo? Quiero cuidarte cada segundo, quiero levantarte si te tropiezas, quiero sostenerte si te caes, quiero abrazarte cuando lo necesites, quiero secar tus lágrimas cada vez que llores, quiero estar contigo en cada momento así sean buenos o malos. Es muy pronto para decirte que siento algo por tí, pero no para decirte que sé que te he tomado cariño, y que eres lo único que me queda en mi vida además de mi hermana, y lo único que tengo en este lugar. No está en mis planes fallarte, ni muchísimo menos perderte. ¿Por qué no puedes verlo, Brooke?

Mis lágrimas cayeron más constantes, y Harry juntó nuestros labios otra vez.

HO-HOLA! SOY GERMÁN Y.... No, esperen; Yo no soy hombre, ni me llamo Germán :o

Bueno, lectores, lectoras, niños, niñas, chicos, chicas, hombres, mujeres, damas, caballeros, unicornios y suripantas, espero que les haya gustado muchísimo el capítulo :))

Lamento haberlos hecho esperar tanto. Ya saben que cada uno tiene sus propias obligaciones y situaciones, por lo que no puedo subir mucho ni muy seguido. a más a mitad de año (cerca de octubre) van a dejar de exigirme tanto en la escuela, y voy a dejar de exigirme tanto yo misma, je (:

Gracias por los votos, que aunque son poquitos, siempre suman más :3

Los amodoro con mi ser de panda morado ❤

-Vicky-

Paradise || Harry Styles.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora