Capítulo 5.

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POV Pansy. 

-Aquí tienes lo que me pediste.- Draco dejó caer una carpeta roja en la mesa frente a mí, haciéndome levantar la vista de mi laptop.- ¿Qué sucede, Pansy?

-¿Perdón?- Pregunté distraída mientras tomaba la carpeta y comenzaba a leer las impresiones que contenía. 

-Esta chica. Hermione. Nunca me habías encargado investigar a ninguna de tus amantes. Lo hacía para saber que no te estabas metiendo con ninguna especie de policía encubierta, por supuesto, pero siempre fue a tus espaldas. 

-Espera, ¿Investigas a mis amantes? 

Draco bufó. 

-No es eso de lo que te estoy hablando. 

-Sí que lo es. Draco, creo que soy lo suficientemente inteligente como para elegir a mis amantes, no necesito que las investigues. 

-Yo y Cedric debemos encargarnos no solo de algunos negocios, sino también de tu seguridad, Pansy.- Draco golpeó el suelo con un pie, claramente impaciente.- Pero estamos hablando de otra cosa. ¿Qué tiene Hermione Granger que no tengan tus otras amantes? 

-Primero que nada, Hermione no es mi amante.- Draco frunció el ceño. 

-Pero se queda en tu casa. 

-Secuestrada. 

-¿Y? 

-No me acosté con ella. 

Ahora me tocó a mí fruncir el ceño cuando Draco soltó una carcajada. 

-Es decir, que vive en tu casa, está aquí todo el día, pero no te acostaste con ella.- Volvió a reír.- No creí que eso fuera a ser posible. 

-Ayer intentó escapar. Me detesta. 

-¿Entonces para qué me hiciste investigarla?

Me encogí de hombros. 

No le diría que era porque estaba obsesionada con aquella castaña, por supuesto que no. 

-Quiero saber quién es. 

Draco soltó un suspiro, y se enderezó. 

-Cumplirá veintitrés años en dos semanas. Asiste a la universidad, está en el último año de literatura. Tiene una compañera de piso llamada Luna. No tiene mascotas, adora bailar y la música clásica, le gusta leer y pasa el 90 por ciento de su tiempo libre metida dentro de una biblioteca a dos bloques de su departamento. 

-¿Novios? ¿Novias?

-Actualmente, ninguno. Terminó con su único novio, Ron, luego de dos años de relación hace un mes y medio. El chico la engañaba con su mejor amiga. 

Asentí, pensativa, ignorando la mirada penetrante que me dirigía mi amigo. 

-Gracias, Draco. 

-De nada. 

-¿Harry está aquí?- Pregunté mientras me levantaba del sofá y caminaba hacia la puerta de la biblioteca. 

-Sí. Está aquí, y muy enfadado, debo decir. 

Rodé lo ojos. ¿Qué sería esta vez? 

-Harry, buenos días.- Mi hermano se giró hacia mí para dedicarme una de sus miradas fulminantes. 

-¿¡Secuestro!? ¿¡En serio!? ¡Pansy, por el amor de Dios! ¡Nunca pensé que llegarías a algo como esto!- Sus gritos me hicieron fruncir el ceño. 

-Harry, sabe que no soy ninguna santa. No entiendo cuál es tu problema. 

-¡Mi problema es que vengo a visitar a mi hermana, para enterarme de que mantiene secuestrada a una chica en su casa! ¡Sé que no eres ninguna maldita santa, idiota, eres todo lo contrario! Pero esto, esto...- Harry cerró los ojos, como si no pudiera siquiera pensar en ello.- ¿La violaste? 

Suya (Pansmione)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora