¡Joder Mina! ¡Eres una simp! - A MiChaeng Fanfic.

6.- Helado.

Chaeyoung había dejado la escuela temprano debido a un resfrío que tenía. Aunque no era tan grave, la enfermera le recomendó descansar pues ya iban a empezar los exámenes y es demasiado difícil pedir permiso en esas épocas.

Estaba caminando en unas rieles de tren mientras miraba al frente sin ningún punto fijo. Estaba aburrida y ni la música en sus auriculares le distraía.

Le gustaría estar con su grupo de amigos, con Mina.

La pequeña se detuvo en ese punto ¿Porqué excluia a Mina de ser su amiga? Es como si ella le gustará...

La pequeña comenzó a reír con fuerza. Eso era imposible pues ella tenía un fuerte crush por Yugyeom. Tal vez era su mente pero la pequeña tan solo podía pensar en Mina como un villano sexi, como en los animes.

No espero que una mano se cruzará en su boca, tapandosela y llevando a Chaeyoung a un callejón lejos de ahí.

Estaba muerta de miedo, solo quería llorar pero cuando vio los ojos de Mina se tranquilizó aunque seguía confundida y asustada.

- Tranquila cariño, solo quería preguntarte como estabas.- Mina apoyó el cuerpo de Chaeyoung dándole un abrazo.- Tu anchura es perfecta y tu peso también, la fiebre ha bajado un poco pero no sé nada de tu garganta...

- (Mina unnie, estoy bien).- Chaeyoung quiso hablar pero su voz no salía por lo inflamada de su garganta.- (¡No puedo hablar!)

- Tranquila tranquila, iremos a una farmacia y Mina unnie no se irá de tu lado.- Chaeyoung asintió y tomó la mano de la japonesa, como una pequeña niña.

Cuando entraron a la tienda, una mujer sonrió enternecida a Mina y la japonesa explicó la situación. Chaeyoung sólo se quería ir a su casa a dormir y pasar la noche abrigada.

- Listo, vámonos.- Chaeyoung vio como un carro las esperaba a las afueras de la farmacia y se subió. Mina se quitó el suéter y lo pasó por sus hombros, reconfortando a Chaeyoung que sintió los ojos pesados y volvió a dormir.

...

La pequeña no sabía donde estaba ni cuando sentía tanto calor cómodo. Cuando habría los ojos lentamente vio a Mina abrazándose a ella en el carro, la japonesa se aferraba a ella como si fuera algo irreal que se iría.

Chaeyoung sonrió levemente y se sonrojo, de alguna manera le encantaba la manera en la que Mina la cuidaba y eso la pensar muchas cosas.

- Mina... - La suave voz de Chaeyoung hizo despertar a la japonesa que acurruco aún más a la coreana. La pequeña no sé negó, incluso se pegó más para compartir calor.

Ambas llegaron a la casa Son, donde no había nadie que pudiera interrumpir los pensamientos ni el momento que disfrutaban ambas en su compañía.

- Chaeng, acuéstate y yo te cuidaré. Soy tu esposa y pienso dejarte como si no hubiera pasado esta enfermedad.- Esperame amor.

Chaeyoung mordió su labio y una suave risa salió de ahí.

- Ay Mina, eres tan linda conmigo...- Chaeyoung cerró los ojos y trato de descansar pero el aroma de la comida hizo que Chaeyoung se mantuviera despierta.

Un tiempo después, la japonesa apareció con sopa de pollo y la medicina junto con un vaso de agua.

Ambas rieron y contaron cosas, mientras Chaeyoung tomaba su comida y medicina.

La coreana dejó de lado la bandeja y abrazó con fuerza a la japonesa, sonrojada y feliz.

La japonesa se sonrojo completamente pero sólo acepto ese abrazo con mucho anhelo.

Pues Mina anhelaba a Chaeyoung y Chaeyoung comenzaba a anhelar a Mina.