Ayano está cansada de seguir a Sempai y que él la ignore y la llame rara. Por una vez, quiere hacerse notar y ser amada. Ella consigue su deseo después de caminar a la escuela una mañana. Las chicas que una vez odió por sempai son hombres ... en cam...
Mire hacia arriba para ver a un chico con el pelo azul desgreñado. Sus ojos se veían tan apagados.
"¿Te piensas mover?" le pregunte con un poco de dolor.
"Oh, lo siento" contesto el extraño muchacho.
Poco a poco se bajó de mí.
"¿Quién eres tú?" Preguntó mientras me ayudaba a levantarme.
"Ayano Aishi ¿Y tú cómo te llamas?" Pregunto
"Oko Ruto." Respondió con nerviosismo.
"¿Eres el líder del club de ocultismo?" le pregunte.
Él asiente en respuesta.
"¿Te gustaría unirte? Siempre tratamos de convocar demonios. Sin embargo, nunca funciona". Sus ojos se dirigieron al suelo.
Me vinieron a la mente imágenes de las manos de demonio que solía usar.
Miré a él a los ojos.
"Si, porque suena divertido". Mi voz monótona habló.
"¿En serio?" Pareció sorprendido y asentí.
De repente, me sentí mareada. Debí haberme golpeado la cabeza con bastante fuerza.
"Oye, ¿estás bien?" Tomó mi mano.
Iba a responder pero me desmayé.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Traté de abrir los ojos pero dolía. Dolía moverse.
"¡Oh, querida! ¡Estás despierta! ¡No te muevas!" Dijo el enfermero.
Solo pude gemir de dolor y escuché un fuerte estruendo.
"¡Maldita sea! ¡Soy tan torpe! ¿Cómo me gradué de la escuela de medicina?" El peli rosa se regañaba a sí mismo.
Abrí los ojos lentamente para ver qué sucedió, pero el adulto estaba exagerando de mí, me tenía puesto un trapo en la cabeza y un termómetro en mi axila.
Él mira hacia mi rostro y veo cómo se enrojece.
"Soy el enfermero Kina, ¿cómo te llamas?" Pregunta el ojimorado
"A-Ayano Aishi" tartamude al decírselo.
"¿E-estás bien?" Me preguntó.
"Todavía me duele un poco la cabeza". Le conteste mirándolo.
"Oh, querida. Eso no es bueno. Sin embargo, revisé tu lesión. No tienes una conmoción cerebral, gracias a Dios, pero te golpeaste la cabeza con bastante fuerza". Me quitó el trapo y se dirigió a su botiquín.
"¿Qué pastillas para el dolor tienes?" Le pregunte.
"Se supone que no debo hacer eso, pero..." Camina hacia mí y me tiende la mano.
Fueron dos pastillas de... Se alejó para traerme un vaso de agua para beber. Tomé las pastillas y él sonrió.
"Gracias." Le conteste con una sonrisa.
"No me des las gracias, agradece al joven peli azul que te trajo." Él sonrió dulcemente. "Ese chico parece que apenas puede coger una ramita, pero te trajo aquí al estilo nupcial y demostró que estaba equivocado". Él rio.
"¿Y ahora qué hago, Kina-sempai?" le pregunte.
"Puedes pedirle a un amigo que te ayude porque no creo que puedas caminar sola durante una hora más. A menos que quieras que te ayude". Él sonrió.
"Eso no será necesario. Solo pregunta por Osano Najimi". Le conteste.
"¿Él es tu novio?" Preguntó con tristeza.
"No. Lejos de eso. Solo somos amigos." Respondo sin emoción.
"Oh, bueno, te lo traeré." Él se marchó.
Aproximadamente 10 minutos después, Osano irrumpió y se acercó a mí.
"¿Qué demonios?" Me toco la frente con fuerza.
Volvió de regreso el dolor. Me dolía mucho. Me enojé mucho.
"¡Osano! ¿Qué diablos te pasa? ¿No sabes por qué estoy aquí? ¡Me duele la cabeza! ¡¿Qué diablos haces?!" Le grite
"¡Oh! Lo siento. No lo sabía." Parecía herido y muy avergonzado.
"¡Señorito Najimi! Ayano tiene un dolor de cabeza muy fuerte. ¡Tenemos suerte de que no haya sufrido una conmoción cerebral!" El peli rosa que parece calmado, también gritó.
"De todos modos, ayúdame porque necesito alguien que me cargue para caminar". Le dije un poco molesta.
Osano asiente. Me ayuda a levantarme de la cama y me toma de la mano para acompañarme a la salida.