El Otro Lado del Espejo Roto

Reflejo del otro lado

...

La cálida luz del sol entrando poco a poco por la ventana, chocando ligeramente en la mejilla del muchacho que se hallaba dormido.

Refunfuñando , abrió ligeramente los ojos, viendo que efectivamente ya había amanecido.

–Aaaagh... Ya que, ya me desperte...– murmuró por lo bajo, frotando sus ojos y dejando escapar un gran bostezo que demostraba cuán somnoliento estaba – Genial, anoche no pude dormir tampoco...

Siempre es la misma cosa.

Suspiro para luego levantarse e ir a cepillar sus dientes, se echo un poco de agua en la cara ,pero eso no hizo que desapareciera su pereza.

Al terminar, bajo a la cocina sin cambiarse el pijama, simplemente dejo que su estomago lo guiara primero que su apariencia, de verdad tenía hambre.

–¡Buenos dias, madre!– restregando sus  ojos, saludo a la mujer en la cocina, quien pego un sobresalto por la voz de hijo, la tomo por sorpresa.

–¡C-cariño!, me asustaste, hehe...– dijo apenada la madre mirando de reojo a su hijo, quien puso su mano en el pecho para pasar el susto–... Como amaneciste?

–Eehh... Lo mismo de siempre, tu sabes... Pesadillas, recuerdos, cháchara cháchara...– dijo mientras iba por un vaso con agua de la nevera, para despertarse un poco.

–Mmm, ya veo, ummm...–dijo la mujer quien siguió cortando los vegetales para la comida que preparaba, pero paro por un segundo para preguntarle a su hijo :–...Yo, me preguntaba ¿Cuando crees que terminara tu-?...

–No se, y no me lo recuerdes...– interrumpió el chico con algo de firmeza, bueno, mas bien con rudeza. No quería recordar lo que había pasado hace tiempo atras, estaba de buen humor hoy, no quería arruinarlo, de verdad no quería...

–Hijo, sabes que no puedes cambiar el pasado. Y lo que tienes ahora. Pero si tratas de afrontarlo tal vez-...

–Ya te dije: NO me lo recuerdes, no puedes cambiar la culpa que tengo... Y aquel chico, si tan solo yo... Yo... AAGH– apretó sus puños al recordar aquella escena, estaba molesto consigo mismo, frustrado y molesto. Pero no podía cambiar nada, ya no podía evitar que apareciera en sus pesadillas– Me voy... Me voy a mi cuarto... No quiero hablar mas de esto.

Dijo para dirigirse a su cuarto y dejar así madre sola, se le había quitado el apetito...

¿Porque es tan dificil el afrontar los problemas?...

– Cariño ¡espera!...– la madre se seco las manos con rapidez y fue tras el muchacho. Le tomo del  izquierdo hombro, pero instintivamente quitó su mano para no... Lastimarlo–... Hoy... Hoy es el cumpleaños de tu hermano menor...

El chico freno en seco. Vaya, eso si lo había despertado... No se había acordado de ello, y no podía evitarse.

Pero... ¿Porque la culpa lo carcomia tanto?

– Se... Que es dificil, ¡p-pero iremos juntos! Podemos llevarle flores y-...

–Ya basta...– dijo el chico– ...¿Por eso me has estado recordando esas cosas que quiero olvidar? ¿Por que quieres que vaya al lugar donde están los recuerdos dolorosos? ¿aunque sabes que siento culpa, aún me quieres llevar a tumba? ¿¡PORQUE!? ¿¡ NO DEBERIAS ODIARME Y DECIRME QUE MEREZCO ESTAR AQUI!? ¿O ES MI CASTIGO POR LA MUERTE DE MI HERMANO MENOR?...– gritó el muchacho, dandole una mirada fulminante a su madre, sintió como si le apuñalaran por detrás...

...Otra vez...

La mujer se echo para atras, agachando su cabeza, tenía razón.

No debía sugerirle que fuera al funeral, pero es su hermano, así que al menos deberia visitarlo. Y claro que no lo culpaba a él por la muerte de su hijo difunto, eso era solo una excusa para auto lastimarse, para culparse a si mismo.