Gayko

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Francisco se despertó en su sucio colchón con los resortes sueltos (su cama se había roto mientras dormía).

Se dirigió a la cocina, abrió la nevera y busco su mayonesa (su pasta dental). Mientras destapada la mayonesa el rancio olor añejado le llegaba hasta los pulmones, le encantaba ese olor.

Se dirigió como todos los días a hacía la iglesia para agradecerle a Dios por su vida, obviamente.

Transcurrió la misa con normalidad, y fue a tomar la hostia.

Ese padre no lo conozco creo que debe ser nuevo...

El se formó en la larga fila hasta llegar a ser el primero, al inclinarse para recibir la hostia percibió un olor agrio, desagradable, fantástico.

¡¡¡MAYONESA RANCIA!!!. gritó asustando a la papa. Tropezó con sus pies, y cayó al suelo desplomado.

El padre le cedió su mano para ayudarlo a levantarse.

Quiero cagar aguanta.

Pruuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuu (se echó un gas) se sonrojo visiblemente y salió corriendo pero terminó dejando a la papa confundido, aturdido y miserablemente sin sentido del olfato.

Una niña frunció el seño.

Porque la nueva papa se fue de trás del pobre chichero del pueblo...

Una abuelita dijo en voz alta "Yo que tenía tantas hambre y ganas de comerme esa puta hostia"

Una mujer del puesto de atrás dijo: "Señora María Lupita Herrera Sánchez de la Santísima Trinidad tercera de la cuarta esquina de Don Juan. ¡Cuidé su vocabulario, que la pueden escuchar los niños pequeños!

Un joven se levanta y dijo "Me tiro un peo y me limpio el culo con los cinco dedos, voy pa' la calle y me tiro un peo la gente cree que es un tiroteo"

Un señor mayor se levantó y le dijo "¿Joven podría respetar la casa de Dios?"

¡Soy hombre y no me critiques por serlo!

¡Soy hombre y no me critiques por serlo!

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                           ∆∆∆

Narrador inexistente.

Mientras la gente se peleaba por estupideces y por saber dónde puñados estaban los dos individuos...

La papa seguía al vendedor de chicha descontroladamente

Espérate que se me sale la modorrea (se vomitaba) dijo entre jadeos la papa Donald.

¡DÉJAME EN PAZ INFELIZ DE MIERDA! Gritó el humilde chichero.

P-pe-per-pero...

Y-yo-yo solo...

¿Que?

Tan solo quería ayudar a un pobre cordero descarrilado...

¡Estás enfermo déjame en paz!
                             ...

¿Porque mierdas una papa de iglesia se va corriendo de tras de un chichero? Preguntó.

Amm, porque pfff esté...

¿Será que este hijo de puta está enamorado de mi?

¿Te das cuenta de que dejaste a una comunidad de los creyentes, rayos!

¡YO LES LLAMO A LAS PERSONAS COMO ME DA LA PUTA GANA!

El religioso estaba comenzando a perder la paciencia.

¡Hazme el favor y respetas!

El vendedor de chicha hizo un gesto obsceno (saco el dedo del medio)

El sacerdote ya iba a comenzar a sermonearló hasta que... volvió esa maldita pregunta...

¿Porque maldita razón te viniste atrás de mi?

¡Responde azufrero!

Es-es que...

¡Escupeló ridículo!

M-me pr-preo-preocupo por ti.

El vendedor quedó boquiabierto.

Narrador inexistente

¿Será que la papa está enamorado de él pobre vendedor de chicha?

¿Que pasará con las personas de la iglesia?

¿Seguirán los aleluyos peleándose porque un hombre dijo que es hombre?

¿O cambiarán de tema y averiguaran donde están los individuos?

Lo descubriremos en el siguente capitulo de el amor tercermundista del shipp más grande de la historia.

La papa y el vendedor de chichaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora