Relatos Eróticos

PARTE V

No hay nada mas intenso que usar juguetes sexuales a la hora del sexo. Y no solo esposas y cosas así, si no, (dildos, dilatadores, vibradores, latigos etc.).

Quise experimentar y compre todo lo que necesitaba pero aun no tenia con quien usar todo lo que había adquirido, bueno, en realidad tenia novio pero teníamos meses alejados así que no estoy segura que se pueda llamar novio.

Me encanta el morbo y decidí reconciliarme con el y le mostré un video enseñándole todo lo que tenia, desde un dildo color azul hasta un dilatador anal color negro, y aunque no podia ser su rostro se lo que pasaba por su mente porque esa misma noche paso a SALUDAR.

Estaba sentada en el balcón de mi apartamento escuchando música y tomando un poco de vino (JP. CHENET), lo vi llegar y servirse una copa de vino, hablamos unos minutos pero el ambiente se empezó a poner caliente cuando me empezó a tocar el muslo y a pasar su mano por mi cuello formando circulo con ella y el sabia que aquello me ponía cachonda y lo mucho que me buscaba cuando pasaba.

Me agarro de la mano y me llevo hasta la habitación tirandome en la cama, salió por la botella y de vino y dos copas, me pidió ponerme de pies y empezó a besarme mientras quitaba el sierre de mi pantalón, cuando mi pantalón llego a la parte de mis muslos dirigió su mano hasta mis bragas y toco mi vagina ya húmeda por su pequeño juego en la sala, se acerco a mi oído mientras seguía tocando mi vagina y me susurro (me encanta como te mojas mami), si le gustaba, aquello lo ponía loco y a mi aun mas escuchar lo gruesa que se tornaba su voz cada vez que eso pasaba. Quito mi blusa y mi sostén para luego llevarse mis pezones a su boca, me encantaba cuando le daba pequeños mordiscos y luego tiraba de ellos mientras los apretaba con sus labios, aquello me excitaba aun mas.

Me dejo parada a la cama de espaldas a el usando solo mis tangas , me incline porque sabia lo que el quería, saco el latigo de cuero negro 6 lazos que tenia en la mesita de noche junto a la cama, antes de azotarme con el lo paseo por mi espalda haciendo que me excitara con aquello.

Su juego duro unos minutos hasta que sin avisar me dio un azote en el culo que me hizo gemir y brincar a la vez, se acerco a mi y preguntándome con voz gruesa que si me gustaba lo que hacia y le pedí no parar, me dio varios latigazos hasta dejar mi culo rojo, aquello ardía pero me gustaba demasiado como para decirle que parara.

Bajo mi tanga y metió su duro pene en mi ya húmeda vagina y me cogió de una manera indescriptible, me gustaba la posición del perrito y a el le gustaba verme de espalda, me incline en la cama y tire mis brazos hacia tras para que el los sujetaras (era una invitación a darme mas duro), amaba cuando me penetraba con fuerza, sentía que mientras mas duro me cogía mas me gustaba.

Saco su pene de mi y me pidió subir hasta el espaldar de la cama, puso su cabeza en mi entre pierna y empezó a follarme con su lengua, me gustaba aquello y a el le gustaba lo húmeda que me ponía con cada cosa que hacia. Saco el dilatador anal de la mesita de noche, pero antes de ponérmelo bajo su boca hasta mi ano y lo empezó a besar, eso me gustaba, sentía como mi sangre ardía y como mi ano se relajaba, unto un poco de lubricante en mi mano y con su dedo empezó a frotar, luego unto en el dilatador y lo llevo hasta mi ano y lo fue introduciendo poco a poco, me dolió un poco pero cuando lo entro por completo me sentía tan llena, sentía mi cuerpo a punto explotar, el placer que aquello provocó en mi era único. Dejo el dilatador en mi culo y volvió a follarme pero estaba vez yo llevaba el control, estaba sentada arriba de el, mientras movía mis cadenas y de adelante hacia atrás el con su mano apretaba el dilatador, eso me hizo llegar a mi primer orgasmo.

Nos acostamos y descansamos unos minutos hasta que le pedí ponerse de pie, saque el dildo de la mesita y lo coloque en el piso (Eran de esos que se pegaban en la pared para mayor satisfacción), me puse de rodillas y metí el dildo en mi hinchada vagina y me lleve su pene a la boca, mientras subía y baja en el dildo tenia su pene hasta mi garganta, aquello me encanto (Fue una de las mejores cosas), mientras yo lo follaba con mi boca el dildo me follaba a mi.

De regreso a la cama me pidió hacer el famoso 69 y acepte, mientras le hacia una felación el metía y sacaba el dildo de mi vagina y con su lengua rosaba mi clitoris, aquello me tenia loca y no demore en tener otro orgasmo, mientras me corría el me decía (mami dame toda tu lechita).

Mis piernas quedaron temblando pero eso no le importo, me tumbo en la cama y me metió su pene DURO haciéndome gritar de placer y me follo de una manera DI VI NA que me provoco un nuevo orgasmo (todavía no me recuperaba del primero), siguió follandome duro pero a su vez suave (Aquello me volvía loca), le pedí abofetearme y lo hizo, lleve su mano a mi cuello y le dije que me follara duro, que no tuviera miedo a lastimarme y lo así lo hizo, arañe su espalda y lleve mi boca hacia la suya mientras el seguía follandome como me gustaba, como a el también le gustaba.

Esto duro unos pocos minutos mas, hasta que me susurro al oído que estaba a punto de correrse, me pare y saque su pene de mi vagina, lo lleve a mi boca y se la empecé a chupar, la metía mas y mas atrás hasta sentir que me ahogaba con ella, con mi mano libre empecé a tocar sus testículos y a chupar su pene y esto hizo que el se corriera en mi boca, saque mi lengua para mostrarle mi lengua llega de su esperma para luego tragarla.

Sin duda alguna fue la mejor reconciliación que tuvimos, creo que deberíamos pelearnos mas a menudo....