Capítulo Nueve.

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—El segundo es Gaara — habló Kabuto — es un novato de la aldea de la arena. ¡Miren! — señaló la tarjeta — Tiene una misión en nivel B y ocho en nivel C. No hay mucha información acerca de él. También hay ésto — todos prestamos más atención — ha salido ileso de todas sus misiones.

—¿Ese muchacho realizó misiones B como genin y jamás salió herido? — preguntó Shikamaru.

Nanami avanzó hacía su hermano — por favor, un genin sin ningún rasguño, esa es una total mentira, ¿No crees hermano? Sasuke no respondió y siguió escuchando a Kabuto. 

Kabuto sacó una nueva tarjeta y volvió a mostrar un mapa de las grandes naciones. Él, nos iba explicando la cantidad de ninjas de cada aldea que estaban presentes en ese momento para presentar el examen —y bien, ahí lo tienen. A como yo lo veo, este año, la competencia se ve demasiado prometedora; yo diría que más bien esta vez, sí son de tener cuidado. En especial, esos tipos del sonido, pues aún no se sabe muchos de ellos.

Hinta dió un paso hacía atrás — yo diría que, fue lo suficiente como para perder la confianza .

—¡Que buen momento para decir esas cosas! — le respondió Ino.

— Tranquilízate Ino. Los doce acá, solo somos un montón de novatos sin experiencia que acaban de graduarse hace no un par de meses de la academia. Es lógico que Hinata tenga miedo, yo igual lo tengo — hablé mientras le colocaba una mano en el hombro a Ino.

— ¿Entonces crees que este año será demasiado rudo? — preguntó Sakura un tanto preocupada.

— Oh sí. Nunca había visto genin así en mis cuatro años de experiencia.

— De igual forma — manifestó Kenji — estoy más que seguro que todos tenemos algunos que otros haz bajo la manga. ¿No es así, chicas? — Kenji nos miró con complicidad, nosotras asentimos y sonreímos.

—¿Se refieren a comida? —  preguntó con curiosidad Chouji mientras se metía una papa a la boca.

— ¡Ay Chouji! —  respondimos los tres.

Me acerqué con cautela a Nanami — Nanami. No creo estar segura de mí. Digo, a ti y a Kenji les va mejor en el jutsu médico de lo que me va a mí.

—Myoko, escucha... 

— ¿Te refieres al..., ninjusu médico? — interrumpió Kabuto a Nanami.

— Así es, ¿Por qué?, ¿A caso lo conoces? — respondió ella en tono brusco.

—Digamos que... —  se ajustó sus gafas —  soy el hijo del jefe del cuerpo médico de Konoha, así que lo conozco a la perfección. Con gusto, podría enseñarte, niña —  Kabuto me volteó a ver.

— No, lo siento. Eso es algo que solo con mi sensei podría aprender.

— Myoko, ¿De qué estás hablando? — me preguntó Kenji con molestia — , él es el hijo del jefe de jefes. No puedes darte el lujo de rechazar una enseñanza como esa así como así.

Kabuto rio — No te preocupes, amigo, lo entiendo. Después de todo, para ella soy  un completo extraño — Kabuto me miró y pude notar una ligera molestia su mirada.

— ¡Ah! — exclamó Naruto —  mi nombre es Naruto Uzumaki, y voy a patearles el trasero a todos ustedes. ¡Dattebayo!.

— Oye Naruto, ¿Podrías repetir eso un poco más fuerte?, no pude escuchar muy bien — dijo Kiba burlezco.

Shikamaru suspiró —  idiota, ¿A caso intentas hacer que todos acá nos odien?

Sakura y yo corrimos hacía Naruto, para jalarle las orejas. Mientras lo regañábamos, Sakura pidió disculpas sobre el comportamiento de Naruto, diciendo que se trataba de algo psicológico y que él debía de estar en tratamiento, y por primera vez le seguí su juego a Sakura. Mientras regañábamos a Naruto, me di cuenta que unos ninjas venían hacía nosotros, y por lo visto, los Uchihas también se dieron cuenta de eso, pues inmediatamente se pusieron en alerta.

Myoko UzumakiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora