Bathtime [Paperlizard +18]

Capítulo único

En lo profundo de la noche, el silencio se deslizaba alrededor de cada vista en sombras, incluso las luces fluorescentes brillando hacia el doctor con sus manos inmovilizando a la enloquecida chica lagarto en el suelo. Actualmente estaba tratando de hacer que ella se bañara, sus ojos la miraban fijamente. Su respiración era irregular después de perseguirla durante horas por toda la mansión. Este había sido un juego entre ellos en este momento. Todas las semanas, Demencia se deslizaba por la mansión como un lagarto de verdad, como si se estuviera alejando de su depredador. Flug, por otro lado, tenía que desempeñar el papel de depredador de este juego, y todas las semanas tenía que recurrir a la violencia física. Él suspiró y le puso las manos en las esposas mientras la agarraba del brazo con fuerza, sabiendo que ella usaría su truco ácido y derretiría las esposas. Él era más inteligente que eso y de hecho hizo estas esposas 'a prueba de Demencia' como solía decir.

La arrastró hasta el baño y le dijo que se desnudara. Por supuesto, a Flug no le gustaba mirarla desnuda, así que se dio la vuelta. Demencia, por otro lado, estaba planeando trucos bajo la manga, como lo había hecho él.

—Flug, ¿por qué no te quedas conmigo en el baño esta vez en lugar de vigilarlo? —Dijo simplemente—. No es como si mi cuerpo derritiera tus ojos.

Flug, luego dio un fuerte suspiro, se cruzó de brazos, —Dem, no va a funcionar, métete en la ducha.

Ella soltó un pequeño gemido y finalmente se quitó las mallas rasgadas, se soltó el cabello, casi instantáneamente se fue a todas partes en un desastre salvaje alrededor de su cuerpo. Ella no pudo evitar gemir de frustración y mirarlo.

—Siempre eres así —murmuró al sentarse en el inodoro, con los ojos fijos en el suelo mientras esperaba que Flug simplemente abriera el grifo.

Ella envolvió ambas piernas alrededor de su pierna y él suspiró. Esto era parte de la canción y el baile, ella siempre estaba tratando de tentarlo. Sentía que su rostro se ponía rojo cada vez, pero su ego no le dejaba caer en tentaciones de algo como Demencia. En cambio, se lo tragó y aprendió a enfrentar su orgullo en lugar de dejar que ella ganara. Sintió que ella lo acercaba, a lo que gimió suavemente.

—Fluggy, ayúdame, es difícil lavar mi cabello —ronroneó en voz baja hacia él.

Demencia siempre fue impredecible, pero incluso en momentos como este, Flug podía leerla como un libro. Era lo suficientemente inteligente como para conocer muy bien sus trucos. Se estiró y miró hacia abajo con una pequeña risa.

Demencia miró hacia arriba con vívida confusión mientras sus lentes se reflejaban en la luz. Su ego ronroneó al ver el miedo en sus ojos, como si ella se hubiera equivocado en alguna parte. El miedo fue reemplazado por una obstinada ira casi de inmediato. Demencia nunca tuvo miedo, a menos que fuera el lado de Flug del que fue testigo solo cuando las puertas de su laboratorio se abrieron. Era un grandísimo tonto, pero había una parte de él que era extremadamente peligrosa. Era manipulador, atrevido e inteligente. Se arregló las gafas y le dio unas palmaditas en la cabeza.

—No seas puerca, Demencia, báñate, ¿o tengo que llamarte niñita de ahora en adelante?

Las palabras cortaron profundamente, pero Demencia le siseó y apretó aún más su pierna, —Eres demasiado marica para tocar a una chica.

Abrió la boca para decir algo y sintió una rabia hirviente dentro de él. Estuvo atrapado dentro de esta maldita mansión durante años, por supuesto que no estaba acostumbrado a ver a una chica desnuda a menos que fuera este miserable ser. Suspiró y la agarró por las muñecas. Se estaba cansando de pelear con esta chica. Todos los días era así con ella, ya sea robando sus inventos o llamándolo por apodos, siempre era algo. Quería retirarse a su laboratorio y trabajar en sus cosas, pero no, esta escuincla malcriada tiene que...