Capitulo 5

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Annabeth y Thalia, que vino a pasar el rato con su amiga porque la rubia no tenía nada que hacer mientras Naruto estaba fuera, se encontraban hablando tranquilamente mientras tomaban algo de té en la sala de la mansión.

Pero fueron interrumpidas cuando la puerta de la casa fue tocada.

''Voy yo'' dijo Annabeth parándose y yendo a abrir la puerta.

''Thalia'' dijo la hija de Atenea mientras volvía a la sala con una sonrisa nerviosa.

''¿Si?'' Pregunto la pelinegra con una ceja levantada.

''Tengo mas visitas'' dijo la rubia mientras cierto grupo de doncellas vírgenes al mando de Artemisa entro a la sala mientras miraban por todos lados, como si buscaran algo.

''Mierda'' pensó Thalia.

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''Vamos, ¿eso es lo que pueden hacer los dioses sintoístas?'' Pregunto Naruto, la parte derecha de su cuerpo empapado de sangre roja, con burla.

Detrás del pelirrojo con mechones negros había cientos de cuerpos de dioses sintoístas, asesinados por cuellos rotos, decapitación, cráneo aplastado y/o atravesado, cortados por la mitad, pecho perforado, cuerpo aplastado, calcinado, cortado en pedazos, entre tantas otras formas de morir dolorosamente.

''Maldito'' dijo un Dios con odio antes de lanzarse junto con otros dioses.

Naruto solo sonrió antes de agarrar de la nuca al Dios con sus dos manos antes de arrancarle la cabeza y lanzar el cuerpo a los otros dioses que iban contra el, los cuales no esperaron eso y fueron abatidos cuando el cuerpo choco contra ellos.

''Mueran'' dijo Naruto con voz demoniaca antes de lanzarse contra los dioses caídos y empezar a arrancarles la cabeza, atravesar sus pechos y/o aplastar sus cráneos de manera rápida. 

Pero el rubio fue mandado a volar cuando Susanoo apareció atrás suyo y le dio una patada en la espalda.

''Muere maldito'' gruño Susanoo con rencor al ver a tantos de los que quería morir a manos del pelirrojo con mechones negros, el cual había chocado contra una gran montaña, causando que la misma colapsara sobre Naruto por la fuerza detrás de la patada del Dios sintoísta.

Pero los escombros de la montaña salieron volando cunado el hijo de Atenea aumento aun mas su poder, a tal nivel que estaba bastante cerca del nivel de Odin, el top 4. 

''Pero Susanoo, apenas empezamos, no puedo morir'' dijo Naruto antes de que sus pupilas obtuvieran una barra horizontal junto a una sombra de color anaranjado oscuro en sus parpados.

''Hmmm, me pregunto como se ven mis ojos, ¿una ajuga conectada a una barra que sigue hasta ser como la pupila de mi vulpino amigo? ¿O la ajuga desapareció y solo quedo una barra con la pupila rasgada?'' Pregunto Naruto con curiosidad antes de que un ojo apareciera delante de el y el pelirrojo con mechones negros sonriera.

''Oh, así que la primera opción, interesante'' dijo el hijo de Atenea antes de mirar a los dioses sintoístas.

''Bueno, es hora de ponerse un poco mas serios'' dijo Naruto antes de volver a su forma humana, pero aun teniendo el color de su iris rojo, la forma de sus pupilas y la equis en su frente.

''Técnica vudú: Muñeco vudú'' nombro Naruto mientras aparecían símbolos a su alrededor y una muñeco de paja delante de el, el cual baño en sangre, haciendo que el muñeco se parecía a Susanoo, el cual supo, junto a todos los demás, lo que pasaría.

El rubio agarro de la cabeza del muñeco con una mano y con la otra agarrar su torso antes de empezar a tirar, causando que el Dios sintoísta empezara a gritar de dolor.

Un amor extraño: Mi moza de ojos grisesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora