✴️XIV✴️

1.7K 179 18
                                    

✴️✴️✴️✴️✴️✴️
Hospital
✴️✴️✴️✴️✴️✴️

Pov Sorano

Aún ame dolía todo el cuerpo, seguía en el hospital, mamá junto con Ino me estaban haciendo unos chequeos, llevaba aquí dos días, días en los que  Sasuke  siquiera mando una carta mucho menos apareció.

-Te traje dangos- hablo Sai con una sonrisa, el junto a mamá fueron los únicos que han estado aquí, mis amigos y hermana aún no podían pasar.

-Muchas gracias, No era necesario Sai-Sensei-

-Al contrario, por cierto, Inojin te mando esta carta- respondió mientras empezaba a mezclar las cartas para jugar una partida.

Mientras tanto yo Empeze a abrir la carta.

"¿Cómo estás?, Supongo que mal si no podemos verte aún, papá dice que estás mejor y me alegra oír eso, e escuchado a tu padre hablando con el séptimo, sobre una marca en Boruto, parece peligroso, es diferente a la marca de tu madre o la de Sumire, hablando de ella es algo sabido que aún vive en la base de AMBU, me comunico que Mi padre y el tuyo se han estado viendo a escondidas, hablando del clan Uchiha y de Danzó, además de entrar a una habitación con pasadizos ocultos, además de eso no hay nada nuevo, supongo que querías estar informada de lo que sucede a tu alrededor.

‹Las rosas negrass caen ante el rojo de tus ojos›

Te quiere la mente más abierta de Konoha"

El estúpido viejo no tenía tiempo para hablar con si hija internada pero si con mi sensei, me decepcionó bastante que el Sai no me haya dicho nada, aunque ahora eso es lo de menos.

Las rosas Negras caen ante el rojo de tus ojos... Hace meses que no escucho esa frase, supongo que las cosas se estan poniendo complicadas alla afuera, Inojin y Sumire eran los únicos que conocieran el plan completo, aquel plan que traeria la verdadera paz y estaban de acuerdo con el, era por esa razón que ellos eran mis ojos y oidos cuando yo no estaba, tengo una fe casi ciega en que ellos no me traicionaran.

-lista para jugar- hablo sai a lo que yo solo asentir.

no me gustaba quedarme con la palabra en la boca, eso era mas que obvio, no me gustaba que me dijeron si y luego hicieran lo que les daba la gana.

-Sai, tu jamás me engañarás ¿Verdad?- no era tonta, para mí fue fácil ver cómo empezaba a tensarse.

-¿Porque lo preguntas?-

-Porque realmente me alegra saber que tengo alguien en quien confíar, Sasuke jamás a estado para mí, y creo que mi madre ya tiene demaciado conmigo, realmente me siento bien cuando estoy con usted, que tengo alguien en quien confiar- las lágrimas empezaron a salir, lágrimas de cocodrilo, no por nada practique actuación dos años junto a Namae-san.

-Jamas haría algo como eso- luego de hablar me abrazo como si eso fuera lo último que haría, pero parecía forzado, arrepentido, eso confiaba lo dicho por su hijo, habían hablado de algo que me concierne.

...

Luego de seis largos días en el hospital por fin pude salir y estar de vuelta en casa, cuando llegue lo primero que ví fue a Sasuke el cual estaba saliendo para volver a entrenar a Boruto una vez más, a tal punto que la única palabra mutua que nos dijimos fue un simple "hola".

Por otro lado Mamá realmente se estaba esforzando para que puedo estar lo mejor posible, al igual que Sarada, la cual intento hacer una carne asada para mí, por suerte mamá termino por ayudarla, ahora era el momento más esperado del día, dormir.

No tarde mucho en caer en brazos de Morfeo, o al menos eso creía, me encontraba en un bosque pero no uno cualquiera, los troncos de los árboles era de color blanco, un blanco perlado, las hojas eran doradas cual la joya más brillante, parecía de día, o eso creo, todo el cielo estaba en tonos dorado u plateados, algo tan hermoso que estoy segura nadie más a visto    Empezaron a escucharse ruidos de metales chocando y tal vez me allá dado tanta curiosidad como para acercarme.

Había varias personas en el lugar, dos de ellos eran los únicos que no estaban de espaldas, uno de ellos era de cabello por debajo de sus caderas, muy alborotado, uno de sus ojos era tapado por este mismo, piel clara y armadura roja, el otro tenía el cabello atado en una coletas, piel igual de clara y unas enorme ojeras; como no reconocerlo si hay una enorme estatua de el, como no saber de ellos cuando uno masacro a todo nuestro clan, no conocer a Madara e Itachi Uchiha era bastante difícil cuando estaban en los libros de historia de mi clan, Los Uchiha.






























Teorías aquí=

Perdón si no actualice, lastime mi mano y no pude escribir bien

Sangre Uchiha | la hija de Sasuke |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora