Entregandote mi corazón.

El Inicio, (segunda parte).

Otro dia nuevo estaba comenzado, para la gente de Nome se sentia como algo muy normal para ellos, sin embargo no lo era para una cierta chica, pues hoy algo emocionante sucederia para ella, y la tenia bastante contenta, se habia enterado de que el chico de sus sueños iba a cumplir años, y no era para menos, para ella esta podria ser la oportunidad perfecta de acercarse mas a Balto.

Ella lo sentia muy bien, no sabia si Balto estaria tan feliz, o incluso mas feliz que ella, pues el dia especial era de ella, para ella deberia serlo, simplemente no lo seria capaz de comprender si no fuera asi para el, cuando Jenna supo que Balto iba a cumplir años, su emocio fue tal, que inmediatamente supo que era momento de preparar algo especial para su enamorado de toda la vida.

Ella lo conocia de años, y sentia que ese tiempo, era suficiente para qe ella sintiera que ya lo conocia de toda la vida, muy bien para ella, era el asunto de por fin demostrar su gran amor, a traves de un dia tan importante para Balto como lo seria su cumpleaños.

Ya lo habia planeado todo, y esto se debe a que Jenna sabia muy bien lo que su familia pensaria ante la idea, de que su hija fuera al encuentro de un mestizo callejero y sarnoso como lo era Balto, ademas de no dejarla ir, era mas que seguro que tambien estarian mas que preparados, para cuando volvieran a ver a Balto, una vez que lo hicieran, podrian hacer cosas muy horribles, como podria serlo la idea de una horrible golpiza no merecida a Balto, seguida de unos crueles insultos, se le dieran para que no volviera a acercarse a ella.

Es por eso, que ella ya habia determinado irse a espaldas de todos, en direccion a la casa de Balto, un viejo barco pesquero a las afueras de la ciudad donde el vivia junto a sus demas amigos marginados, y que incluso Balto consideraba su familia, "muy noble y calido el corazon de Balto" se decia Jenna asi misma, pues realmente parecia que Balto tan solo era capaz de compasion absoluta y bondad.

Jenna tenia muchos puntos a su favor, sabia con presicion lo que haria, esperaria a que llegara la noche, y una vez que estuviera oscuro, inmediatamente se escabulliria de su casa, en la que ella vivia solo en compañia de su dueña humana Rosie, no seria dificil, al menos eso no, era solo la primera fse del plan, la verdera parte dificil, seria escabullirse sin ser detectada por las casas vecinas, que eran justamente las casas de sus padres y de Steele, asi como tener que pasar por un callejon oscuro, en el que constantemente sabia que estarian posiblemente los lacayos del alaska malamute, siendo ellos los tres huskys conocidos como Nikki, Kaltag y Star, tres integrantes del equipo de perros de trineo junto con Steele, siendo este mismo, el lider del equipo, y ellos tres, aquellos en los que Steele se sentia mas superior que nunca, esto porque Steele siempre los ha visto, corriendo detras de el a lo largo de los años, y nunca se digno en hacerlos sentir bien, sino que incluso disfrutaba de hacerlos de menos, igual que con todos, pero a ellos los manipulaba haciendoles pensar que tenian que estar por el resto de sus dias al servicio de Steele para sentirse importantes.

Si salirse de su casa no habia sido un verdadero reto para Jenna, se las tendria que ingeniar para no la vieran irse, porque si lo hacia, se meteria a ella y a Balto en serios problemas, y Jenna no queria eso, sabia que no seria nada agradable, estar soportando los regaños de sus padres, que eran los mas insoportables de todas las familias, de todos los padres que han existido. Esa noche, Jenna habia esperado a que la noche se encontrara en su punto mas oscuro, durante el cual ella empezo a llevar a cabo su plan, deseando con toda su alma que no la descubrieran, sin problemas pudo salir de su casa, saltando sin problemas por la ventana del cuarto de Rosie, pero luego supo que era necesario evitar la casa de sus padres a toda costa, el primer problema dificil, a pesar de que ellos no eran perros tan ocupados durante el dia, tenian el habito de ser siempre veladores, mirando durante casi toda la noche, con direccion hacia la casa de Jenna, y apuntando hacia la ventana del cuarto de Rosie, asi que si no lograba alejarse tan solo de su casa, seria por culpa de sus estrictos padres, que de verdad se la pasaban casi todo el tiempo al pendiente de los movimientos de su hija.