Cap 3: Dama de hierro

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Entro al auto, un coche de esos de la vieja escuela. Me sorprende que esta chica tenga un clásico, un Ford Mustang Shelby azul marino

Al entrar mi sangre mancha la tapicería

-Tendrás que limpiar luego. dice ella mientras conduce -¿Cómo te sientes?

Inhalo aire, limpiando la sangre que cubre mi boca -pues he estado peor, pero valió cada maldito moretón en mi

-Ustedes los hombres y su orgullo, ¿y por qué haces eso? Dice esta al no apartar la mirada del camino

-Mi mamá murió de cancer cuando yo estaba pequeño, mi papá hizo lo posible por sacarme adelante, el solo se partía la espalda conjunto a sus huesos para poder darme de comer. Ahora yo literalmente le devuelvo el favor

-Perdona haber oído eso...

-No te preocupes, mamá está en un lugar mejor. Ahora, ¿quieres decirme por qué todas esas armas allá atrás?

Volteando a mirarme viéndome fijamente, el labial rojizo me deslumbra con su brillo, cogiendo una sonrisa sarcástica pronunciando -Huí de casa desde muy niña. Volviendo a fijar su vista al camino

-Mi padrastro abusaba de mi madre, y yo un día teniendo 4 años, veía como el lo iba a volver a hacer, espero no vayas a delatarme o ir a corriendo a la policía por lo que diré después

-Pues, si vos no decís el estado en el que me encontraste, lo prometo. Respondo mientras me acomodo en el asiento, el dolor que sentía era bastante molesto

-Un día lluvioso, yo estaba en mi cuarto jugando con mis muñecas y toda la cosa. Empecé a oír gritos desde la alcoba de mi mamá, fui para allá como niña curiosa, estaba el intentando abusarla... haciendo una pausa, suspiró para continuar a contar su historia

-Apenas me vió se enfureció, queriendo venir a atacarme para que mi madre supuestamente sufriera más. Cuando el estaba a punto de tocarme, tiré unas canicas que estaban en mis manos, el piso estaba húmedo por las goteras de la casa. El rodó y cayó dando vueltas por las escaleras, al llegar al piso su cuello se quebró, muriendo de manera instantánea... luego de eso, mi madre no volvió a hablarme, diciendo que maté al amor de su vida.

-es gracioso, ¿sabes? Al llegar la policía y mi madre contar lo ocurrido, ella pidió que me metieran presa porque maté a su marido, mi propia madre... me acusó de asesinato, ella lo hizo. Ella había generado una especia de dependencia hacía el maltrato tanto que aceptaba esas migajas de amor solo para no quedarse sola

-ok pero, ¿que dijeron los policías? Le pregunto

-los policías solamente se rieron, alegando que era una niña, y no tenía ni la capacidad de saber lo que estaba pasando. Se lo merecía ese hijo de perra. Dice esta mientras acelera a fondo -o el cree que aún no he olvidado las veces que entró a mi habitación con el permiso de mi mamá, nunca le permití tocarme, lograba esconderme o ingeniármelas para que no me viera

-Empecé a crecer, ella solo hacía reprocharme eso, dejó de hablarme, dejó de tratarme, yo tuve que aguantarme sus desprecios, solamente porque la muy perra quería que yo me dejara tocar por el imbecil de su marido, ¿que clase de madre haría eso?

-Increíble las cosas que hacen las personas por amor, incluso si en eso entra la posibilidad de dañar la integridad e inocencia de otra persona, cuando amas solamente le das la oportunidad a la otra persona de lastimarte a cambio de momentos felices que tienen expiración

-Un día simplemente me harté, tuve que madurar rápidamente. Agarré un bolso y solo me fui con lo necesario terminé con mi tío paterno, mi padre era un policía que cayó en su trabajo, pues lo más cercano que tenía como laso familiar es mi tío

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