– La memoria de Bell fue modificada. Desde la raíz, parecía otra persona.
Se habia vuelto como el hielo. Sin un temperamento cálido. Miraba a todos como si no se tratara de nadie. Todo le parecía fastidioso. Incluso el estar con la misma Freya. Nada lo contentaba. Todo era tan molesto que se alejaba de las personas.
Recluido. Aburrido. Nada interesante. Un vacío completo lleno de tonos grises. Todo era tan insípido e insignificante. Sin embargo, encontró sentido en una sola cosa. Verse por encima de los demás. Lo único que lo distraía. Lo único que le daba una sensación diferente.
– Los sentimientos se habían enterrado tal cual se lo pidió a Freya. Sin embargo, ella hizo una cosa más. Incluso los sentimientos para con ella habían sido puestos en prisión. Bell era literalmente un muñeco hecho para la pelear. –
– Aunque a Freya le dolia verlo divagar, buscando algo que le rempiera el marco negro que ella le había colgado, no lo ayudo. Espero pacientemente, y miro como él, si lo quería, encontraría la forma de romperlo por él, mismo. –
– Pasaban los meses. Cada poco encontraba cosas que la emocionaban. –
– Mientras que Bell se buscaba así mismo, el tiempo lo llevo a hacer florecer nuevas habilidades. Con las apariciones de las habilidades, Freya se pregunta si esto quería decir que algún nuevo sentimiento había florecido en él, pero no. Le pareció increíble que solo sus deseos de superioridad le dieran tantas habilidades. Su cuerpo o su ser parecía querer producirlas para él. –
– Había perdido tantas veces con Hedin y Ogni en batalla de armas. Que le habían aparecido muchas habilidades con su arma principal. La espada era como una ventaja casi anormal. Su uso, sus movimientos, los repotencia dores, (como la sombra del golpe de espada), ya eran por mucho una ventaja indiscutible. Sin embargo, él sabía que seguiría perdiendo. Ya que Edin y Ogni eran usuarios mágicos. La magia era difícil de tratar. Así que su cuerpo le dio protección contra la magia. –
– Aún así. Bell seguía perdiendo debido a que la magia no era contenible del todo. Bell continuaba perdiendo contra ellos. Una y otra vez. Otra vez y otra vez. Eran tanto que su ser resplandecia. Aun que no tuviera ningún sentimiento. La semilla de otra habilidad se abria para él. Freya se preguntaba porque el deseo de ser más fuerte podía impulsarlo tanto. No era más que un deseo divago y sin motivo. Pero lo que no sabía que todo eso era por placer. Para sentirse vivo. Para Bell, él ser superior era lo único que hacía que él sintiera la orientación. –
– El cascaron no aguanto más. Dos años después de que Bell elimino sus sentimientos, él volvio a subir de nivel. Entonces de manera inesperada, una lista se abrió sobre su espalda. –
– Resistencia a la magia: Mayor cantidad de resistencia a la magia. –
– Poder abrumador: Aumentaba sus estadísticas de fuerza y resistencia. –
– Eran dos habilidades muy beneficiosas y Freya no podía entender como podían mostrarse de esa manera. No había manera en primer lugar. Y que se suponía que debía entender de las que seguían. –
– Asalto abrasador: Se activaba si este llegara a recibir demasiado daño. Literalmente, era como activar la versión alternativa del sharingan. –
– Maestro de las cadenas: entre mas ataques consecutivos diera su fuerza aumentaba. –
– Acero veloz: Aumentaba la habilidad del movimiento de la espada. –
– Todo empezó otra vez. Su llama de ardió más fuerte. Como cuando obtuvo la bendición de Freya. Se mostro así, mismo y rompió parte del sello que Freya le había puesto. Al romperse los sentimientos de Desesperación y rabia, fueron los que primero brotaron. Seguidos por la Tristeza y Satisfacción. –
– Cada uno de ellos lo convirtió en una persona con poca estabilidad emocional, y Freya no sabia como ayudarlo. Esperaba que su bondad también estuviera delante, pero no. La pasiencia fue lo único que le quedaba. –
– Al volver a verse con Edin y Hogni que estaban encargados de vigilarlo. La lucha fue monstruosa. Con coliciones y magia desbordando por todos lados. Tanto, así como para que Ottar tuviera que ponerse como muro para protección de Freya. –
– Con la casa de Freya siendo bombardeada de aura mágico, la estructura se quebraba, y Freya grito que se detuvieran, pero Edin y Hogni lanzaron una magia conjunta para derrotar a Bell de un solo ataque. Sin embargo, la combinación perfecta de [Speed Master], [estilo perfecto], convinado con [poder abrumador], que dio un impulso insano a su contraataque lograron que el contuviera el ataque entre su espada y sus báculos. Mientras el choque ocurria algo totalmente inusual ocurrió. Y era que, aunque no había recibido demasiado daño, [Alma valiente lo apoyo para superar el ataque entrante], y lo desvió. Sin embargo, sin querer, el ataque se dirigió hacia donde estaba Freya. –
– Cuando eso ocurrió, el sentimiento de miedo afloro. Combinado con un poco de la desesperación. El grito de Bell lleno el instante en que el ataque se diría a Freya. – Pero, Ottar detuvo el ataque rompiendo la magia entre sus brazos. Partículas de luz se disolvieron y brillaron. Entonces la envidia también se mostró. La envidia por el gran poder que portaba Ottar. Ese era el punto más alto, y aun con todo lo que ya tenía, se mostró el camino que aún le faltaba por recorrer. –
"Eso es demasiado injusto", pensó. Todo su sufrimiento totalmente opacado por fuerza pura. Tenia que superar esa barrera. Tenía... pero... ¿Por qué lo hacía? ¿Para sentir la vida? No entendía porque el pensamiento ahora parecía tan tonto. ¿Que faltaba? Se preguntaba. Habia algo dentro de él que luchaba por salir cuando vio a Freya en peligro, pero no lo logro.
¿Qué era? ¿Qué era lo que le faltaba en su vida?
