O6

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—¿Cómo vas con Mina?—Jisung preguntó a Chaeyoung.

—Lo arruine...—soltó un suspiro de frustración.

—Ni siquiera le permitió hablar a Mina—contó Tzuyu—La pobrecita no pudo decir ni pío.

—Ahora no sé que hacer... Mina me evade y hoy solo cruzamos apenas unas palabras.

—Solo dale un poco de tiempo, Mina se ha de sentir avergonzada, así que no te preocupes tanto y dale su espacio.

—¿Cómo es que sabes repentinamente sobre el amor?

—Tengo novio—respondió Jisung.

—¿Desde cuándo?—preguntó completamente asombrada Chaeyoung.

—Como desde hace un año.

—¿Y por qué no lo conocemos?

—No estudia aquí—respondió.

—Ahí viene la oxigenada—dijo Jeongyeon quien en toda la conversación se había dedicado a comer su puré de papa.

—Hola chicos—saludó, pero nadie respondió—¿Les comió la lengua el ratón?—rió, pero los demás sólo la miraron como bicho raro.

—¿Qué necesitas?—Tzuyu preguntó con notable fastidio en su voz.

—Busco a Changbin, ¿Lo vieron por aquí?

—Es tu pareja. ¿No deberías saber dónde está?, Después de todo...es tu novio—Chaeyoung dijo lo último con ironía.

—Sí, pero yo...

—¿Eso era todo?—Jisung la interrumpido.

—¿Por qué tan descortés?—ChaeRin sonrió, pero solo recibió un mirada de indiferencia por parte de Jisung.

—No me agradas.

—No, nos agradas—corrigió Chaeyoung.

—¿Que hice para no agradarles?—los de la mesa rodaron los ojos al notar el tono falso de tristeza de la rubia.

—Sabes muy bien lo que hiciste—Jisung dijo con recelo.

—¿Qué hizo?—Jeongyeon preguntó confundida.

—Habló mal de Chan con el entrenador para hacer que Changbin sea el capitán del equipo.

Y no es que Changbin sea malo jugando, en cambio era uno de los mejores del equipo de Lacrosse. Pero sin duda alguna, Chan se destacaba. Sumando que era un magnífico líder y capitán.

—Yo no...

—No intentes negarlo. Yo lo escuché con mis propios oídos—Jisung le advirtió.

—Es mejor que te vayas con tu carita de "Yo no mato a ni una mosca", Changbin podrá pensar que eres muy santa, pero nosotros no. Sabemos tu verdadera cara—Chaeyoung le dijo retándola con la mirada.

ChaeRin simplemente sonrió de lado, para luego darse media vuelta e irse.

ChaeRin simplemente sonrió de lado, para luego darse media vuelta e irse

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Felix sonreía contento, pues Mark se comportaba de maravilla con él. Solo esperaban la hora de la función para proceder a pasar a la sala de cine.

—Muchas gracias por traerme al cine—Felix agradeció nuevamente.
—Te notabas muy feliz al contarme lo mucho que querías ver esta película, así que no hay nada mejor que cumplir el deseo de mi pequeño dulce.

Felix se sonrojó, puesto que aún no se acostumbraba a los apodos tiernos y muestras de cariño por parte de Mark.

—Gracias...—murmuró avergonzado.

Felix sonrió y decidió mirar hacia otro lado para que su Hyung no notará su ya notable sonrojo. Pero en cuanto alzó la mirada reconoció aquella cabellera gris que tanto le hacía suspirar.

—¿Changbin hyung? ¿Qué hace aquí?—Changbin no venía solo, pero Felix decidió no enfocarse en la rubia que venía prácticamente colgando del brazo de Changbin.

—Yo... Bueno...

—Dulzura—Mark tomó por la cintura a Felix, acto que no pasó desapercibido por el peligris—Changbin—saludó Mark—Iré por las palomitas ¿Quieres algo en específico?

—No Hyung... Con las palomitas está bien.

—Está bien, dulzura—dijo Mark para luego dirigirse al área de dulcería.

—Changbin amor, yo también quiero palomitas ¿Irías a comprarlas por mi?—dijo ChaeRin.

Changbin simplemente asintió, sin dejar de mirar a Felix. Se fue dejando a Felix y a ChaeRin solos.

Felix miraba a la nada, completamente incómodo por las presencia de la rubia.

—¿Te gusta Changbin?—la chica soltó sin rodeos.

—¿Pe-perdón?—pregunta sorprendido.

¿Tan notorio era?

—Creo que fui muy clara. ¿Te gusta mi novio?—lo último más que una pregunta fue una afirmación.

—Y-yo...

—Mira niño, me costó bastante lograr que Changbin aceptará salir conmigo y tú niño no vas a arruinarlo. Tú más que nadie sabe lo que sucedería si los padres de Changbin se enterasen de que su hijo sale con otro hombre... Aléjate de Changbin si no sabrás hasta donde puedo llegar.

—¿E-es una amenaza?—sus ojos comenzaron a picar.

—Claro que lo es.

Felix se quedó enmudecido, sus ojos picaban y sabía que sí no se se calmaba pronto terminaría llorando.

«Torpe corazón de pollo» pensó Felix.

—Dulzura, ¿Todo está bien?—Mark preguntó al notar la tensión en el ambiente y los ojitos acuosos que el rubio tenía.

Felix solo asintió ocultándose en el pecho del pelinaranja, bajo la atenta mirada de Changbin.

—¿Po-podemos irnos?

—¿Ya no quieres ver la película?—preguntó confundido pues el rubio se mostraba muy feliz con el simple hecho de nombrar el título de la película.

—No...

—Lixie...¿Te encuentras bien?—pregunto Changbin al notar tristeza en la mirada de Felix.

—Sí...

—¿Estás seguro?—intentó tomar la mano del rubio, pero este la alejó de manera brusca.

—Sí, ¿Nos vamos Hyung?—se dirigió al pelinaranja.

—Claro—Mark tomó su mano para así ambos darse media vuelta en irse, siendo seguidos por la atenta mirada de Changbin.

Felix odiaba ser un cobarde.

Felix odiaba ser un cobarde

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¡El Changlix es real! |ChanglixDonde viven las historias. Descúbrelo ahora