El ocaso en el Tamesis

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Sabiamos que nos arrestarian por lo que estabamos haciendo pero fue un favor especial, el señor McLaren nos pidio personalmente que le hicieramos el favor, una " chispa para encender el barril de polvora", todos los altos mandos estallaran de rabia, pondríamos en ridículo a la corona y hendiriamos la daga en el punto debil de la moral Inglesa, ¿Vale la pena ser arrestado para ver a Londres arder?, al parecer si, no es dificil robar un barco más o menos grande, lo suficientemente grande para que nuestro golpe se accionara.

Bajando del Royal Albert Hall para cruzar la avenida Cromwell me encuentro a el "Honorable" Aaron Burton, lo conozco desde que tenia seis, recuerdo cuando ibamos a ver el despegue de los aviones cerca a la pista del Heathrow, Aaron me dijo que debiamos conocer el mundo, hace más de quince años no sabiamos que robariamos un barco para demostrar nuestra escencia, para rebelarnos a el mundo entero.

- Mira quién está ahí, el sucio James Wilson -

- No intentes joderme, no hay tiempo que perder -

- ¿Quíen lo dice?¿ Acaso McLaren pidio una hora específica? -

- Me dijo que era vital que el barco estuviera rumbo al parlamento antes de las 5:30 de la tarde -

- ¡Está loco!, es poco antes de la procesión de su mounstrosidad la reina -

- Lo se, el viejo gordo ese se está tramando algo grande, espero ser parte de esto -

Aaron me mira con cara de duda, ya me es tan normal de que el mundo me mire así, desde que estos chicos fueron a Hillingdon y me hice su seguidor todo el mundo me mira así, como un insecto, si fuera por ellos me dejarian en la Alemania Oriental, donde los comunistas se encarguen de desaparecerme y librarse de la basura social como nosotros...

- Malditos burócratas, quieren que los chivos expiatorios se encarguen del trabajo sucio, era cuestión de tiempo para que los Pistols firmaran con Virgin y contragieran delirios de fama que nunca tendran -

- Cuando lleguemos al lugar vas tener que tragarte tus palabras -

- ¿Acaso me amenazas Wilson? -

- No, solo te digo que me lo agradeceras -

Aaron me empuja y camina más hacia el sur, debemos llegar a un pequeño astillero ubicado a la orilla norte del Tamesis, más precisamente en el cruce del Battersea Boulevard y la avenida Grosvenour, habian tres barcas mercantes que tenian que ir hasta Calais al día siguiente con una embarcación de sombreros, pero los franceses tendrán que esperar. Al llegar vemos a un vigilante sentado en el bote del centro, nos miro de forma sospechosa y cabeceó hacia adelante como si nos estuviera saludando, Aaron levanto la mano en señal de respuesta y este se bajo del barco y avanzó hacia nosotros, Aaron siemprte andaba con un abrigo de corte militar a medio coser, realmente en Londres hacia frio pero esa no era la razón de que Aaron vistiera ese largo abrigo, debajo de el escondia algo y no lo pensaba dos veces para utilizarlo

- ¿Perdidos señores? - Dijo el tipo mientras se iba acercando a nosotros, Aaron me empujo hacia el

- Claro, gracias, estamos buscando el Parque de Battersea -

- Sí claro, deben caminar por la Grosvenour hasta llegar al cruce con el Chelsea Boulevard, cruzar el rio hacia el sur y ahí esta el parque - Aaron se metio la mano al abrigo mientras se iba acercando al tipo

- Muchas gracias señor, ¿Sabia usted que es un imbecil? - El vigilante se sobresalto y dio un paso atrás

- ¡Le exijó respeto! -

- Esta gentuza se cree lo máximo porque vive en le centro de Londres y no son más que idiotas -

- ¿Que ha dicho? -

Dios salve a La ReinaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora