‡ ᗯᗩTᗩᔕᕼI ᑎ O GᗩIᗪO ‡ || FINALIZADO

②⑥

Yuna al ingresa a su casa , tiro su mochila en el sofá , muchas veces lo hacía cuando su padres no habitaban en esta , la mayoría de su tiempo es en el trabajo , así que no era un problema ahora , sólo debía quitarlo antes de que llegarán.

Cansada y aburrida de la escuela , se dirigió a las escaleras subiendo con pereza escalón por escalón.

Aún estaba preocupada por lo que su hermana le diría , nunca su Unnie le había pedido ayuda , a menos de que sea algo importante para ella.

Al pasar por su cuarto, que está pegado al de su hermana pudo escuchar risas saliendo de ahí.

Se asomó un poco , Ryujin estaba boca abajo , sosteniendo el celular con su mano pegado a la oreja.

Yuna no podía escuchar muy bien , ya que la mayor hablaba muy bajo.

—Lo sé , esto es grandioso , yo sé que querrá , no se puede negar , además necesito que consigas lo que te dije.

Yuna retrocedió un poco haciendo la puerta rechinara , la pelinegra volteo inmediatamente , es su expresión se notaba lo asustada.

—Qué haces aquí? — Ryujin colgó sin despedirse , molesta se levantó — que fué lo que escuchaste?

Yuna no decía palabra alguna , sólo miraba a la más baja con el semblante serio—Ya que estás aquí , te diré lo que harás para mí.

La menor asintió , y se sentó en la esquina de la cama—Hay un chico que quiero que conquistes.

—Conquist-té? — Ryujin asintió, y sonrió mostrando los dientes.

—si hermanita , luego te diré por qué , necesito que lo hagas , puedes?

No entendía , pero acepto , pero que ganaría ella ¿?.

...

Yeonjun estaba fastidiado de no poder ayudar a su pequeño , odiaba escuchar lo llorar por la impotencia de el estrés que ha acumulado.

A veces quería hablarle a su madre pero su miedo y orgullo no le dejaba.

Agradecía mucho a su cuñada , ya que ella ayudaba a su hermano a qué descansará  , y los dos se quedaban juntos.

Y uno de esos momentos eran lo que ahora está pasando.

—Es difícil pero pronto se acostumbrará— bahiyyih sonreía mientras arrullaba a su pequeña sobrina.

—Quisiera ayudarlo yyih, pero igual me desespera el no poder distinguir los ruidos.

Bahiyyih hizo un puchero triste, deseaba vivir con su hermano pero por ser menor de edad y su hermano igual , no se podía.

—Yo puedo cuidar de la niña, claro si me lo permiten.

Yeonjun sonrió , y trato de acercarse a la baja para brindarle un abrazo de gratitud.
—Gracias pequeña.

—No hay de que.

Y el timbre del hogar resonó en toda la sala — Seguro es Yuna.

—Yuna?