-PRÓLOGO-

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En la mansión Nóvikov se podía percibir una gran tensión en el gran salón

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En la mansión Nóvikov se podía percibir una gran tensión en el gran salón... Motivo el Ceo de la importante Corp. Nóvikok está desahuciado, repentinamente cayó en cama y nadie sabía los motivos, pero, el hombre que estaba postrado en esa cama tenía la autoridad de poder dar órdenes aun.

- Kakashi. – Con una voz ronca que aún se podía distinguir lo que decía. – Manda llamar a Sasuke.

La mirada suplicante de Alexander Nóvikov le dedico al platinado que estaba al pendiente de todo lo que le pasaba a su benefactor.

- No se esfuerce, mandare llamarle.

- Háblale por favor.

Al escuchar la súplica el platinado tomo su móvil deslizo rápido para buscar ese número de...

"Nóvikov Sasuke"

Al oprimir el tono empezó a sonar dos... tres y...

- Uchiha.

Dejo salir un suspiro agradeciendo que haya tomado la llamada.

- Joven Nóvikok, es importante su presencia en la mansión... su padre esta grave los médicos no encuentran que es lo que le pasa.

Sasuke estaba en Alemania corrigiendo algunos pendientes referentes a las empresas que Urashiki ha estado comprando y despedazando a su antojo una de ellas fue la de Sarutobi Hiruzen.

- Estoy por la noche en Rusia.

Al escuchar que el hijo prodigo regresaba por fin, Alexander suspiro, era preferible que Sasuke se encargara del negocio familiar ya que su esposa era una mujer frívola que no se interesaba nada más en ella y sus dos hijos.

- Ya viene para acá.

El viejo asentó con su cabeza, cerró sus ojos se sentía cansado con el simple hecho de hablar sus fuerzas menguaban.

Si ese escenario era deprimente en la Ciudad de San Petersburgo es ahí donde radicaba la familia poderosa de Rusia. Alexander Nóvikov un hombre que era dueño de la más prestigiada Corp. Nóvikov que distribuía toda clase referente al petróleo ya que también contaba con una plataforma petrolera.

La elegante mansión mostraba su gran elegancia Damiana Lebedev caminaba de un lado a otro con una copa de vino en su mano, dando órdenes de poner los foreros en las mesillas que señalaba.

Era alta con un cabello castaño sus ojos verdes se movían de un lado a otro, mientras que sus hijos estaban jugando en el cuarto de entretenimiento, eran unos parásitos como los llamaba Sasuke.

Ya que no eran nada productivos ahora que se quedaría viuda Damiana pensaba gastar los millones con viajes comprar joyas ropa, ¿Pero? Alexander tenía otros propósitos para ella y sus hijos.

-KITZUNE INDÓMITO-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora