ʙᴀᴅ ᴀɴɢᴇʟ (ᴍɪɴꜱᴜɴɢ)

XXX - 30

Cuando la puerta del despacho del director se abrió finalmente, Jisung se levantó de su asiento de un salto vigoroso y se acercó a paso apresurado a la figura que salía de este.

No tenía ni la menor idea que es aquella cosa tan importante que el director tenía que decirle con urgencia a Minho para llamarlo en mitad de la tarde tan de improvisto, pero la cara que puro shock que su novio tenía cuando lo vió salir de aquella sala le decía que no eran buenas noticias. Más bien lo contrario.

Jisung se acercó a su novio, dispuesto a abrazarlo y consolarlo por lo que fuera que le hubieran dicho que le había dejado con una cara que demostraba puro terror. Pero Minho no le dejó abrazarlo, apartándose bruscamente dando un paso hacia atrás y bajando la mirada para que sus ojos no se encontrasen.

Entonces Jisung comprendió que fuese lo que fuese era peor de lo que imaginaba. Y se atemorizó de inmediato.

"¿Que ha pasado?" Una pregunta simple y directa, no vamos a andarnos con líos extraños cuando la reacción de Minho indicaba que algo malo sucedía.

Pero el de cabello oscuro no contestó. Es más, decidió apartar al menor y salir del lugar prácticamente corriendo.

Mierda... Maldito gato orgulloso y su tendencia a encerrarse en si mismo cuando algo va mal.

Jisung entró en pánico, y pese a que tratase de seguirle sabía que Minho era mucho más rápido que él. Así que antes de darse cuenta ya lo había perdido de vista.

Pero Han no era el mismo que al principio de curso, y decidió no rendirse y dejar que su novio sufriera solo. Inmediatamente salió corriendo en dirección a la habitación de Hyunjin y Felix, sabiendo que si alguien conocía a Minho mejor que nadie sería su mejor amigo. Le hubiese gustado poder llamarlos por teléfono para encontrarlos más rápido, pero se lo había dejado en la habitación unas horas antes cuando se fue a estudiar a la biblioteca. Caminó por los largos pasillos a paso apresurado, bajando las escaleras de dos en dos, mordiéndose las uñas por los nervios. Parecía en serio que los problemas nunca terminaban...

En serio esperaba que Hyunjin estuviera en su habitación y no en otro sitio, porque si no era así, era posible que el nerviosismo no le dejase ni acordarse del número de la habitación de Chan como para ir a esta y buscar a los demás. Cuando llegó frente a la puerta de la habitación, abrió esta de par en par de golpe sin llamar previamente. Y bueno, digamos que la escena era sorprendente... Ya que Hyunjin y Felix estaban besándose apasionadamente en la cama que probablemente pertenecía al australiano. Embobados el uno en el otro, a punto de pasar a mayores, ambos se separaron por la sorpresa al oír el ruido ensordecedor que la puerta hizo al golpear la pared.

"¡¿Jisung que mierda?!" Exclamó Hyunjin con voz molesta mientras se levantaba de encima del australiano y buscaba su camiseta para ponérsela "¡¿Es que es algo tuyo y de tu novio no llamar y destrozar nuestra puerta siempre que nos liamos?!" Vale Hyunjin estaba enfadado... Pero es que gente era ya la segunda vez que le hacían aquello y no creo que a nadie le guste que le interrumpan en esos momentos.

"¡Hyunjin gracias a dios que te encuentro!" Jisung ignoró todos los gritos que el rubio le propició y simplemente sintió un alivio enorme al encontrar al rubio "¡Te necesito en serio! No sé que ha pasado pero han llamado a Minho a la oficina del director y cuando ha salido un rato después tenía una cara horrible que nunca antes había visto y cuando he querido preguntarle qué pasaba a bajado la mirada sin dejarme abrazarle y ha salido corriendo y no sé dónde está y-" Jisung había hablado a toda prisa sin siquiera respirar en medio, bueno cosas de saber rapear ya sabéis, pero Hyunjin le interrumpió.

"¡¿Han llamado a Minho al despacho del director y luego ha salido corriendo sin decir nada?! Mierda sea lo que sea es malo. Sobre todo si ha bajado la mirada, ese gato orgulloso de mierda odia que le vean llorar, seguro que por eso ha salido corriendo." Hyunjin ya a este paso pensaba en voz alta "Joder hay que encontrarlo y rápido. Pero no creo que le haga gracia que cualquiera lo encuentre y le vea llorar, así que o voy yo o vas tú." Propuso el rubio.