Capítulo 5

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Capítulo 5 ||

¡POP!

De repente, en el sendero de una carretera semi-suburbana en Staining, en la costa este de Gran Bretaña, dos personas aparecieron de la nada. Nadie más se dio cuenta. No es que hubiera nadie alrededor para darse cuenta.

Harry tenía un buen agarre alrededor de la cintura del coronel y, como Harry dijo que haría, el coronel se tambaleó hacia adelante medio paso. Sin embargo, no le costó mucho esfuerzo a Harry evitar que se cayera.

"Nos gustaría agradecerle por viajar con las Apariciones Mágicas de Harry hoy, y esperamos que su viaje con nosotros haya sido agradable", dijo Harry imitando al asistente de una aerolínea comercial. "Por favor, cuídense y esperamos volver a verlos pronto".

El coronel, inclinándose por la cintura y poniendo ambas manos en las rodillas, gimió: "¡Oh, Dios!"

Sabiendo que el coronel había recuperado el equilibrio, Harry lo soltó y se apartó un poco de él. No quería estar ... dentro del alcance ... si el coronel perdía repentinamente su última comida.

"Vamos, coronel," dijo Harry alegremente. "Labio superior rígido, y todo eso. ¡Por la reina y el país!"

Aún inclinado y respirando entrecortadamente, el coronel preguntó en voz baja: "¿Está tratando de ser gracioso, mi señor?"

"¡Por supuesto!" respondió Harry. "Esperaba que te ayudara a dejar de pensar en eso".

Sin molestarse en responder más, el coronel esperó unos momentos más antes de levantarse lentamente para incorporarse, cuadró los hombros y respiró hondo de nuevo para calmarse y dijo: "No fue así".

"Bueno, Coronel," dijo Harry. "Lo manejaste mucho mejor de lo que pensé. ¡Bien hecho!"

"Sí, milord", respondió el coronel con suavidad.

Luego, mirando a su alrededor, preguntó: "¿Y ahora qué?"

"Bueno, sé que no puedes verlo, pero estamos frente a las puertas de la mansión", dijo Harry.

No, el coronel no pudo verlo.

"Lo que quiero que hagas es tomar mi codo como lo haría una persona ciega y, si lo sientes necesario, cerrar los ojos. Luego caminaremos unos pasos hacia adelante", instruyó Harry.

"No se sentirá como ... eso ... lo hizo, ¿verdad?" preguntó el coronel.

"Deberías sentir un ligero cosquilleo en la piel cuando pasamos, pero eso es todo", respondió Harry.

El coronel luego asintió con la cabeza, tomó a Harry con fuerza en su codo izquierdo y cerró los ojos.

Harry esperó hasta que el coronel estuvo listo y luego simplemente caminó hacia adelante.

Mientras atravesaban las barreras, Harry sintió que el coronel apretaba rápidamente el codo como un estremecimiento. Luego los detuvo a ambos.

"Está bien, coronel", dijo Harry. "Ahora puedes abrir los ojos".

Al abrir los ojos, el coronel miró asombrado la hermosa casa que tenía ante él. Los jardines estaban impecables. Estaba asombrado de que todo esto le estuviera oculto a menos de dos metros detrás de él.

"Un par de puntos antes de que vayamos a la puerta, coronel", dijo Harry. "Los Longbottom probablemente tendrán al menos un elfo doméstico, y la puerta será atendida por uno de ellos. Son un poco más bajos y mucho más delgados que los goblins, tienen muy poco pelo, ojos grandes y brillantes y orejas caídas. Por favor, no lo hagas. t mirar ".

Harry Potter y los cuatro herederosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora