Capitulo 13

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–¿segura que regresas tú sola?– Hayeong mira a su padre y abuela

–sí iré a caminar al parque que está cerca– Joan mira a su nieta, analiza sus facciones y no había nada, estaba en blanco, una cara seria que normalmente pone para ocultar sus sentimientos, pero cuando bajo la mirada a sus manos pudo ver que estaba nerviosa, estaban temblando; lo único que lo hacía poco notorio era el hecho de que las estuviera apretando.

–¿estarás bien?– Hayeong sonríe por segunda vez en todo el tiempo que estuvieron frente a la tumba de su bisabuela

–si, trataré de no tardar, guarden pastel para mi— ellos asiente y su padre gira la silla con su abuela

–te vemos en casa cariño, con cuidado– ella asiente y los ve salir del cementerio, cuando ya están en el auto ella gira a ver las flores que puso

–ah... espero que te gusten Verónica...– toco un poco aquella lápida y se levantó para regresar a la de Taehyung, ahí estaba otra vez, y las lágrimas no tardaron en llegar, el dolor que tuvo que aguantar al leer cada parte de la carta que ahora permanecía en su abrigo volvió, un pequeño sollozo salió de su boca mientras se hincaba

–eres un maldito suertudo– Hayeong cubrió su cara mientras decía esto, unos segundos después sintió que alguien pasó sus brazos por sus hombros y puso su peso sobre su espalda logrando que se asustara y mirara hacia arriba rápidamente tranquilizándose de una forma inexplicable cuando vio aquellos ojos mirando hacia la tumba de Kim Taehyung

–los tiempos han cambiado mucho sabes... pero creo que el hecho de tener respeto a los muertos sigue, entonces si otra persona te hubiera escuchado decir eso, posiblemente te hubiera sacado a patadas del cementerio– dice riendo y recargando su cabeza en la de Hayeong la cual sonríe con melancolía sintiendo el calor de Minsook recorrer su cuerpo

–se lo merece, por ser un idiota como el que fue en su momento– Minsook se levanta ya que la posición estaba haciendo que sus brazos dolieran Hayeong levanta la mirada asustada hasta que ve que la castaña se pone a su lado

–Kim Taehyung... ¿que fue lo que hiciste para que mi pequeña Hayeong te diga idiota?– Hayeong abre sus ojos al escuchar eso

–¿tu pequeña?– ambas chicas comienzan a sentir el calor en sus mejillas, Minsook evita mirarla

–¿creando apodos también? – Hayeong mira con ternura como Minsook muerde su labio

–tal vez– la rubia se acerca como puede y recarga su cabeza en el hombro de la castaña

–estoy soñando ¿verdad?, como podrías aparecer ahora, llamándome mi pequeña Hayeong, es demasiado bueno para ser verdad– Minsook gira su cabeza para posar su mirada en Hayeong viendo como tenía cerrados su ojos y su respiración estaba más calmada, aún tenía el rastro por el que hace pocos minutos habían corrido sus lágrimas.

–si fuera un sueño podrías sentir esto– Minsook besos su mejilla justo donde se veía un poco las lágrimas ya secándose

–acabo de confirmarlo, estoy en un sueño, no quiero que me despier... ¡ay!– Hayeong abre sus ojos de golpe al sentir un pellizco en su mano escuchando la risa de Minsook como fondo

–no estás en un sueño–

–de acuerdo no estoy en un sueño, entonces como tuve la suerte de encontrarte aquí cariño– ambas se levantan

–vine a vistar a mi madre, hace unos minutos vi a tu padre entonces supe que estaban aquí, y pues vi que te quedaste sola entonces le dije a mi papá y hermano que me quedaba– Hayeong sonríe y acaricia la mejilla de Minsook

–por cierto, tú padre mencionó algo de almorzar y que tú madre aún no comía... entonces te compre esto por si tú tampoco habías comido nada– Minsook levanta la bolsa que tuvo que dejar en el piso para poder abrazar a Hayeong

–recuerdo que te gustan las fresas entonces pedí uno que las tuviera– Hayeong mira con ternura a la castaña, si tan solo pudiera besarla ya lo hubiera hecho

–creo que ya podremos ir a Francia– Minsook se ríe y niega

–gracias bonita, ¿vas a hacer algo ahorita?– Hayeong toma la caja con el pastel y sonríe de nuevo

–no, no tenía ningún plan después de venir, ya hice el proyecto que me pidieron y no tenía planes con mis amigos, ¿por qué?—

–porque ahora tienes un plan conmigo, vamos al parque un rato ángel– Hayeong extendió su mano y Minsook la tomo sonriendo por el nuevo nombre; aquel cosquilleo llegó tan pronto con tan solo el primer roce, cuando sus manos estaban entrelazadas se sentía tan correcto; como si estuvieran hechas para que encajaran a la perfección

–¿Entonces estabas visitando a tus bisabuelos?– ambas chicas caminaban por la calle, apenas se acercaba la tarde mostrando unos cuantos rayos de sol

–sí, fue algo repentino–

–sigo teniendo la duda ¿por qué Kim Taehyung es un maldito suertudo?– Hayeong sonríe

–Minsook, ¿quieres ir a mi casa para leer las cartas de la maleta?– Minsook mira el perfil de la rubia, esta iba observando la calle y sonriendo, sus largas pestañas lograban golpear sus pómulos cuando pestañeó

–tu padre pensará que me tome muy enserio lo de ir cuando quiera– Minsook ríe y ahora la mirada de Hayeong va hacia la castaña, sobre sus suaves mejillas con un leve color rojo, sus labios curveados con una sonrisa dejando ver sus dientes, sus ojos mostrando la expresión de felicidad y brillando de forma fascinante haciendo que los busque y no quiera dejar de verlos

–ese no será un problema bebé– Minsook la ve haciendo que sus miradas se crucen, un sentimiento extraño y acogedor que solo ellas sienten apartándolas de lo qué hay a su alrededor

–bien vamos, ¿pero me responderás lo que pregunte?– Minsook se sentía ansiosa quería saber esa respuesta y cuando Hayeong bajo la mirada a sus labios no pudo evitar sentir el rápido latir de su corazón

–claro ángel, tal vez no tenga tanto sentido ahora pero con lo que te voy a explicar en mi casa lo tendrá–

–Kim Taehyung es un maldito suertudo por que él amo hasta el día de su muerte y a él lo amaron hasta después de ella—

Love Of My Life (Taekook) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora