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POV NARRADORA

Jimin estaba practicando el arte de la espada Kenjutsu, movia la espada con repides y precisión, desde muy pequeño le enseño, sus movimientos son... parece una combinación, el manejo de su espada es distinto, es como si estuviera bailando mientras pelea, son movimientos delicados pero precisos, movimientos que podrían engañar a cualquiera, eso es lo que puede apreciar Jungkook, además que las artes no son iguales, cada persona tiene su forma de enseñar y aparte que  el reino Park en el Norte son los que se encargan de las guerras y evitan que lleguen al reino Jeon y acabar con toda la dinastía, por eso es vital que Jimin sepa defenderse, su rostros al mover la espada cambia a uno totalmente serio, es como si fuera otro, de verdad que su arte es único y dicen que cada persona tiene su propio estilo, Jimin siente que lo observan y se da cuenta de que es Jungkook, por eso deja de hacer lo que estaba haciendo y envaina su espada porque tenerla desenvainada seria una falta de respeto a la realeza

-Príncipe Jeon-dice Jimin y hace una reverencia y no termina de concretar su reverencia porque Jungkook lo detuvo

-no lo hagas, muchos lo hacen y no me dejan hacerlo, no sumes a eso, por favor, se que debes hacerlo...¿qué te parece esto?, cuando estamos en frente de mi padre o mi madre, también frente a tus padres me haces una reverencia- propuso Jungkook, con su mirada de conejo tierno poniendo que acepte

-esta bien, no quiero que me vuelvan a castigar-dice negando con su rostro- ya me tengo que ir, nos vemos otro día, tengo que ir a hacer una cosa- de nuevo se fue corriendo

-nunca me deja terminar de hablar, eso no entiendo-dice con el ceño fruncido, Jimin se fue a traspasar el libro de etiqueta Jeon

-puedes empezar Jimin, cuando termines de pasar todo este libro puedes volver, cuando terminas me lo das... no quiero castigarte, pero es el hijo del emperador, por suerte que el emperador no lo sabe porque esto podría empeorar, aquí las cosas no son iguales que en nuestro reino, aquí tienes que cuidarte más y estar atento-le dijo Sueqi a su hijo que estaba con la cabeza baja y sus cachetitos inflados haciendo un puchero

-si mami, voy a cuidarme mejor-dice el pequeño y prosigue a sentarse para comenzar a escribir, la Duquesa sale, Jimin esta escribiendo y no escribe mal porque escribe bonito y sabe las técnicas de escritura, solo que no es como un adulto que puede escribir más rápido y todo el libro lo va a terminar de noche y al día siguiente... escribe tranquilo, bueno, no tan tranquilo- ¿por qué me castigan?, es algo que no logro entender, el príncipe quería jugar conmigo, no lo obligue, ¿entonces no puede jugar?...todos los niños merecemos jugar y yo quiero jugar, no puedo, solo estoy en este lugar... todo esto no es casualidad, solo son mis sentimientos- Jimin estaba cantando, algo que salio de la nada, solo quería cantar y alguien apareció

-el mundo entero es diferente al de ayer... solo por tu alegría- dijo Jungkook, algo que también le salio de la nada, lo primero que se les cruzo por la cabeza

-KOOKIE- dijo Jimin que estaba cantando primero y cuando escucho la voz tan suave de Jungkook le hizo sorprenderse, porque esa voz fue directo a su corazón, estilos distintos al cantar, lo que los une son los sentimientos

-cantas muy bonito-diji sin pensarlo Jungkook, eso hizo que las mejillas o cachetitos de Jimin se pinten de un bello color carmesí

-gracias Kookie, también me sorprendió verte cantar, justo lo que dijiste, lo iba a decir yo-dijo Jimin ahora mirando a Jungkook

-no es una coincidencia, tal vez el universo lo hizo- dijo Jungkook mirando fijamente a los ojos de Jimin que estab sentado con el pincel en el aire

-esto me hace pensar que estamos conectados...tú eres yo-dijo Jimin esperando que Jungkook diga algo

LA SUERTE DE AMARTE HASTA MI ÚLTIMO SUSPIRODonde viven las historias. Descúbrelo ahora