ELLOS

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En la pantalla se podía ver un sinfín de mundos, mundos como los que existían en mi cabeza y como niña estúpida imagine como se sentiría ser un teléfono móvil, fue una idea absurda, pero logro sacarme de la realidad por un instante y agradecí por eso, mientras deslizaba mi dedo entre el sinfín de iconos uno llamo mi atención, uno colorido con una burbuja roja en la esquina que indicaba que tenía mensajes sin leer.

En ese momento algo hizo clic en mi mente y recordé que ya habían pasado varios días desde la última vez que había ingresado, de todas las conversaciones sin contestar había una que destacaba sobre todas. No por la imagen que hacia juego con la mía, si no por el hecho que en el contestador había un numero bastante grande para decir que solo era un mensaje y lo acompañaba el característico "llamada rechazada" de mi parte.

Mi corazón se empezó a llenar de desesperación y sin siquiera pensarlo oprimí sobre él y me llevo al panel de texto donde se encontraba una conversación unilateral y sobre ella las distintas fechas en donde quiso comunicarse y yo solo decidí ignorarlo, el miedo recorrió todo mi ser cuando vi que el último mensaje había sido recibido hace dos días atrás.

Si hubiera sido otra persona hubiera leído y olvidado como lo hacía con cada cosa en mi vida, pero por alguna razón no quería dejar esto así, con mucha vergüenza y una inmensa tristeza me arme de valor y conteste.

-. Hola, vi que me escribiste hace unos días, olvidé contestar de nuevo... Lo siento. De seguro te has aburrido de mí. Perdóname. Espérame unos días mas por favor, te prometo que mañana volveré a ser yo y te llamare de nuevo. – No sabía de donde había salido eso, solo recordaba haber escrito la primera oración.

La espera me mataba a tal punto de pensar lo peor y como si hubiera leído mis pensamientos se marcó los dos círculos rojos que indicaban que el mensaje estaba siendo leído.

-. ¿Cómo estás?. -

Esa fue su simple respuesta, ni un "hola" o un "no te preocupes" rodeado de emoticones que tanto lo caracterizaba, y en dos segundos las lágrimas amenazaron con salir y la opresión en el pecho aumento, lo sabía, sabía que él se cansaría de mí. Pero dicen que la fe es más grande que la realidad. Así que decidí abrirme por primera vez. Y tal vez fue el miedo a dejarlo ir, pero le diría como me sentía. Por primera vez en 4 años soltaría mi tormentoso ser.

-¿yo? Yo por el momento estoy bien, con mis desórdenes mentales jaja, pero bien, hoy tuve dos exámenes, ayer tuve uno y mis notas son de 8, pero para hacerte sincera no lograría ni sacar 5 puntos sin la ayuda de un cuaderno o de un navegador, decadente ¿verdad?.- sin pensarlo presione el avión de papel y sentí que mi mente se abrumaba una vez más por la vergüenza de haber soltado lo primero que vino a mi mente. En modo de compensación para que se olvidara de tal error decidí cambiar de tema. Y volví a escribir. -. Ahora estoy viendo las clases grabadas de la próxima semana, porque el sábado no tengo tiempo jaja.-

Mientras escribía volví a ver esos círculos rojos y el miedo fue más sofocante que la última vez, no quería leer lo que el diría a continuación, no estaba lista para tal situación y como si de un robot se tratara mis dedos escribieron y escribieron hasta el punto de llegar a agotarme, sabía que esta era mi última oportunidad de demostrarle que él era especial en mi vida y no lo dejaría ir, no esta vez. Y como tonta una vez más escribí lo que vino a mi mente.

-. Sabes ya casi es diciembre. En los centros comerciales ya empezaron a decorar por la navidad y eso hace aumentar mi preocupación por que ya casi será 18 de diciembre (esa es la fecha aproximada del examen para ingresar a clínica) todavía me faltan aprender muchas cosas y siento que mi cabeza se quiebra-.

NOVIA POR CORREODonde viven las historias. Descúbrelo ahora