Life is better if you are accompanied ━━ 𝐇𝐚𝐢𝐭𝐚𝐧𝐢 𝐁𝐫𝐨𝐭𝐡𝐞𝐫𝐬

𝖡𝖾 𝖺 𝗀𝗈𝗈𝖽 𝖻𝗋𝗈𝗍𝗁𝖾𝗋

[...]

Ran lo admitía. Haber regresado a casa a pie no había sido la decisión más sabia. La maravillosa mente de Ran había formulado la idea de que no habría lluvia, a pesar de que la radio lo había anunciado o que el día estuviera casi completamente nublado.

Inclusive Rindou le había advertido.

━━ Ran. Por última vez, llévate un maldito paraguas. Lloverá hoy ━━

El de trenzas recordó las palabras de su hermano menor mientras era empapado por cientos de gotas que caían de las traicionera nubes.

Al llegar a casa cual gato mojado, observó como Rindou volteó a verlo dejando de lado la película que estaba reproduciendo en la televisión de la sala.

Ran podía escuchar claramente el te lo dije en su mirada.

No dispuesto a aceptar su derrota simplemente se marchó a su habitación mientras escuchaba los reclamos preocupados de su hermano menor.

Cómo era de esperarse, un par de horas después Ran comenzó a presentar síntomas de posiblemente gripa.

Rindou se había enfadado con su hermano. Él le había advertido, pero el muy necio no le hizo caso, y ahora Ran se encontraba enfermo acostado en la cama. Para colmo, Rindou tendría que encargarse de todo por un par de días, y la idea no le agradaba.

A pesar de su enojo, Rindou no dejaría a su hermano morir tan fácilmente (es decir, no es como si una simple gripe lo matara). Por esta razón, posterior a haber tratado a su hermano ,se dispuso a cocina algo con el fin de no dejarlo sin nada en el estómago. El Haitani menor se decidió por cocinar un clásico para la gente enferma, el caldo de pollo.

Rindou se levantó de su lugar al lado de la va de Ran, con la intención de ir a la cocina.

Pero antes de ir una mano tomó la manga de su sudadera.

- ¿A dónde vas?- Preguntó Ran con una clara voz agotada.

- Voy a cocinar algo, porque cierto imbécil se enfermó por no hacerme caso- Respondió Rindou

- Tan amoroso como siempre- Contesto burlonamente el mayor - Mejor quédate. No quiero quedarme solo sin poder hacer nada.

- Ay, no seas payaso- Rindou rodó los ojos - Es para que tú te alimentes, así que cállate y descansa.

Ran solo sonrió burlonamente. Rindou siempre había tenido una forma algo rara de demostrar afecto, pero igual lo quería. Así que Ran dejó ir a su hermano.

Rindou nunca fue el mejor cocinero, pero tampoco era el peor. Si bien podría fácilmente pedir comida a domicilio, esta vez Rindou decidió cocinar por su cuenta. Él quería ser quién cuidara de su hermano.

Era cierto, Ran podía ser bastante molesto a veces, pero él siempre cuidaba de Rindou. Sin importar la situación, Ran haría hasta lo imposible para que si hermano menor estuviera a salvo.

Rindou en ocasiones llegaba a Ran siempre ha sido un buen hermano, y está vez era el turno de Rindou de serlo.

Sin darse cuenta, Rindou ya había terminado la preparación. Tomó su tiempo pero lo consiguió.

Tomó un plato y sirvió el alimento en este mismo. Con cuidado lo llevó a la habitación donde se encontraba su hermano.

Al llegar vio que Ran no había dormido. Quizás se quedó pensando en la inmortalidad del cangrejo.

Rápidamente el mayor volteó la mirada hacia su hermano.

- Es lindo que te preocupes. A tú manera claramente- Dijo Ran, mientras se se sentaba en la misma cama.

- Si, si, si. Cállate y come. Más te vale que te guste - Habló Rindou, dándole el plato y cuchara al otro. Igualmente Rindou se sentó al lado de Ran para hacerle compañía.

Ran vió a su hermano con ternura. Él levanto si brazo hacia la cabeza de Rindou, posteriormente revolvió sus cabellos rubios, recibiendo un sonido de reclamo de parte del menor.

- Gracias de verdad. No sé que haría sin tí - Mencionó Ran con una gran sonrisa.

Rindou lo miró y le sonrió de vuelta, dejando a Ran finalmente comer.

[...]

Lo siento, bastante corto. Siento que me quedó algo extraño pero creo que funciona.

Lamento con mi vida no actualizar ಥ‿ಥ
Les juro que lo intento. Una disculpa por cualquier error.

Espero de todo corazón que les haya gustado el capítulo.