MALENTENDIDOS Y VENGANZA

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Lo primero que hice al llegar a mi destino fue lanzarme en el sofá, Minato me siguió y se recostó a mi lado, evitando mi mirada dijo

- lo lamento - 

Con la cabeza profundamente clavada en las almohadas farfullé

- te perdono - levanté mi rostro y le dije - pero no por eso te voy a dejar de decir idiota -

- bien, pero dime ¿que quieres hacer primero? -

-ah?- 

- ya sabes, es tu primer día como vampiresa...¿acaso no tienes sed? -

- si te refieres a un dolor abrazador en mi garganta que había olvidado hasta que tenías que decirlo, entonces sí -

- bien - dio un salto y se puso de pie - vamos a cazar -

- ¿que? soy una persona, una mujer, una dama, no voy a ir por ahí con un arma a matar lo que se cruce en mi camino...no soy una asesina -

Se le entristeció la mirada

- aún no, pero tendrás que serlo si quieres sobrevivir, además no necesitas un arma...de por sí ya eres una, no mataremos humanos para que evites a toda costa la adicción a su sangre, pero podemos ir al bosque más cercano y cazar algunos animales -

Arrugué la nariz, no me llamaba mucho la atención, tener que matar, ver el interior de un animal o tener que beber su sangre, pero ahora estaba en mi naturaleza...y esperaba que estuviese a mi favor

- bien - dije, me levanté del sofá y continué - ah y contestando tu pregunta....si -

- si ¿que? - 

- si...acepto ser tu novia -

Su cara reflejo una gran sonrisa y con lágrimas en los ojos me volvió a besar y esta vez tuve mucho cuidado de no romper nada con mi nueva fuerza

- nos vamos?-

- ya perdí la cuenta de cuantas veces me has dicho eso hoy....¿a donde? - dije agitada pero feliz, mis nuevas emociones me hacían un poquito vulnerable

- a cazar claro - 

- vale - 

Nuevamente me levanté (no recuerdo haberme sentado) pero su expresión preocupada me detuvo

- pasa algo? -

- no es nada, es sólo que para ser una neófita te controlas bastante bien, únicamente temo que pierdas ese control -

Me senté en sus piernas y lo besé de nuevo, perdiendo el control empezó a tocarme ofensivamente, ¿quien se creía? me levanté violentamente y marqué mi mano en su rostro

-IDIOTA!!! - 

Salí a la calle esperando que no se le ocurriera seguirme, intenté utilizar mi nueva velocidad y haciendo una especie de sprint corrí y en dirección a la facultad, cual fue mi sorpresa que allí en medio del vestíbulo estaban las responsables de mi sufrimiento, sonriendo como si nada fuera a pasar, me acerqué a ellas, ya no tenía por qué temerles.

Alexandra fue la primera en verme

- Tu no estabas por morir? ya estábamos celebrando que no tenía que lanzarte por las escaleras de nuevo...un auto se adelantó a mí, idiota - dijo ella 

- me llamaste idiota? - dije

- daag tonta...¿acaso estas sorda? - dijo Cate

- como vamos a ser felices si sigues existiendo - dijo Alexandra

- Te odiamos tanto que te vamos a regalar un boleto al sol para que te quemes y jamás vuelvas - dijo Cate

Probablemente eso sí me mataría, pero de risa...veamos cuanto tiempo pueden seguir hablando idioteces, miré a Mía, no había dicho nada, seguramente ya había notado algo distinto en mí

- te digo la diferencia entre una pizza y tu? La pizza sí la pedí - 

- ya vete, que si el agua y el aceite no se mezclan nosotras no tenemos porque mezclarnos contigo - 

Entrecerré los ojos y sonreí maliciosamente, en verdad se me antojaba arrancarles el cuello

- Alexa no creo que debas decirle nada - farfulló Mía

La mire sorprendida y una voz en mi mente dijo "Mía una vez estuvo a punto de morir por un vampiro desde eso aprendió a reconocerlos de entre la gente"

Sonreí nuevamente y dije

- si Alexandra porque no cierras el pico, Mía ya ha estado en esta situación antes y por eso te advierte ¿no crees? -

Mía me miro aterrada y nuevamente oí una voz en mi cabeza pero esta vez era diferente, porque era su voz.

- ay no...ya lo sabe...sabe que uno de los suyos casi acaba con mi vida -

Yo...yo... Acababa de leerle la mente a Mía?

Cate se había percatado del miedo de Mía y le dijo

- oye Mía estas bien?-

Ella se sobresaltó y ahogó un grito

- si tranquila no me pasa absolutamente nada....pero en serio...déjenla en paz - dijo Mía - no es seguro...ya se, que les parece si nos vamos y pasamos el resto del año en las montañas o una playa -

-pero que dices amiga....dejarla en paz? Te golpeaste la cabeza o que - dijo Alexandra

Avance lentamente hacia ellas, Mía se levanto de su sitio y se fue alejando con el respeto que se le debe dar a un no se.....un rey o algo así

-ey ey vuelve aqui cobarde!!! - grito Alexandra

- se los advertí - susurró Mía

Ambas voltearon a verme sorprendidas y con una ceja enarcada, no pude evitar soltar una carcajada sádica y disfrutar ver cómo sus cuerpos reaccionaban al peligro: se les puso la piel de gallina y se les acereleró el corazón. Tomé a Alexandra por la camisa y a Cate por el cabello y las empotré contra la pared....supuse que me excedí con la fuerza porque la pared se agrietó inmediatamente.

-SUÉLTAME PERRA- grito desesperada Alexandra

- que te hice yo para que hagas esto....SE SUPONE QUE LA QUE DEBERÍA ESTAR AQUÍ PEGADA CONTRA LA PARED ERES TÚ - grito Cate

- debieron escuchar a su amiga, ella sabía lo que se avecinaba- dije yo 

- ¿que?- dijo Cate

Me reí nuevamente

-oh, es que su amiguita no les dijo? por poco un vampiro casi la mata....donde quedo la confianza entre amigas - dije yo burlándome de ellas 

Nuevamente la voz en mi cabeza

- que demonios?- pensó Cate - esta perra está loca

- estúpida - pensó Alexandra - de donde diablos saca tanta fuerza....por qué ahora, si podía defenderse así, por qué no nos atacó antes....no...no es posible...o si? no puede estar diciendo la verdad, los vampiros no existen -

Drásticamente las golpeé contra la pared y las lancé al parque de modo que cayeron violentamente en la fuente

-AHHHHH- se les oyó decir al impactar contra el suelo de la fuente, la cual se fue tornando roja por su sangre

Me acerqué a ellas y dije

- no son tan valientes ahora no? -

- PERDONANOS!!! -

- NO LO VOLVEREMOS A HACER -

Nuevamente me reí, de eso no había duda, me encargué de asesinarlas lenta y dolorosamente, cuando terminé, escondí sus cuerpos descuartizados y sanguinolentos , nadie las encontraría, para mi asombro Mía aun seguía allí, aterrada dijo

- por favor no me mates, te daré mi sangre si eso es lo que quieres -

Le Sonreí sinceramente y le dije

- porque te mataría? Después de todo eres una buena chica que solo seguía ordenes de una tonta - mientras me iba continué - ahora ambas somos libres

Me alejé consciente de lo que había hecho...sin embargo, no sentía culpa alguna...pero sí mucha hambre, así me fui a cazar al bosque, si había podido asesinar a sangre fría a dos adolescentes...podría con un animal

El Diario de MokaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora