HARU La Chica Mitad Demonio

CAPITULO 12 Misión Otorgada

- Me mandó llamar maestro? - mencionó Samura entrando a la oficina del mayor.

- Si, por favor pasa - le indicó - como veras, te hice llamar porque tu serás el próximo en realizar una misión - se levantó de su escritorio dirigiéndose a un estante con pergaminos antiguos, buscando uno en específico.

- En serio!?... - dijo emocionado pero fue interrumpido por el mayor.

-No te emociones - giro hacia el muchacho con un pergamino en la mano, por fin lo había encontrado - Por lo que me a contado Scott, tu no has cumplido con ninguna de tus tareas asignadas, y sin mencionar que son de Rango C.

Al escuchar el nombre de su "compañero" cambio sus facciones, sin duda no le agravaba escuchar eso del maestro - *Esa escoria de Scott* - pensó.

- Eso no es cier...- fue interrumpido.

- No me interesa tus excusas - le extendió el pergamino que sostenía, el chico miro atento el pedazo de papel enrollado, éste lo abrió con cuidando dejando ver un dibujo de un frasco con un liquido de color amarillo y una pequeña descripción a lado - El objeto que traerás tu, o mas bien el elemento, sera "El ápice Viveza" - el chico lo miro algo confundido - O como nosotros le llamamos,"Gota de la vida".

- Comprendo - Comentó Samura.

-Te dirigirás - le entrego un mapa - al Este, entrarás al bosque coníferas, territorio de los Hechiceros, partirás mañana, será un viaje de 3 días, ve y tráeme esa valiosa sustancia - lo miro sin expresión alguna.

El chico apreciaba con mucha atención el mapa, una misión de clase A, no, de clase S, por que le asignaría esta labor a él, si acababa de decir que no a cumplido ni con tareas de rango C - Disculpe por la interrupción pero... porqué usted me a asignado algo de suma importancia a mi?, sin mencionar que usted escucho esos comentarios de parte de Scott- pregunto confundido.

El mayor ladeo una sonrisa casi imperceptible para el muchacho ahí presente - Veras... - se giró para caminar de nuevo a su escritorio - Tanto tu como yo sabemos que no eres un estúpido - el chico frunció su sello - Fuiste uno de los mejores en los juegos de magia en el año pasado, pero Scott te venció en la batalla final - el maestro fingió pensar, mirando hacia arriba - eso definitiva daño tu orgullo, cierto? - lo miro divertido -  simplemente te dejo en vergüenza frente a miles... puede que tenga razón Scott, talvez no seas apto para esto.

- NO! - gritó - Déjeme realizar esta misión, esto es lo que en verdad deseaba - sonrió algo arrogante - tener un poco de acción era lo que necesitaba - apretó el papel en mano - Le juro que regresaré con su elemento maestro.

El mayor solo se dedico a mirarle - Muy bien... ahora largo de mi oficina - el chico estaba a punto de salir, pero un comentario lo dejo helado - Pero recuerda Samura... si fallas - se rió - ya sabes lo que pasara. 

El chico sin mas salió de la oficina - *Mas me vale traer eso en mis manos, si no... estaré muerto*

(...)

- Te asignó la tarea, interesante - mencionó la chica pelirroja cruzándose de brazos.

- Si, Saldré mañana a primera hora, ya necesitaba un poco de jodida acción, sin duda será pan comido - se cruzo de brazos orgulloso.

- Más te vale traer eso, si no te enviaran a la zona oscura - dijo preocupada.

- No te preocupes, esas mierdas no podrán hacerme nada.

- No lo se... - se paso una mano detras de su cuello algo nerviosa - será mejor que te acompañe, será mas fac... - fue interrumpida por un terciario que estaba sentado en un sofá del cuarto donde siempre los tres solían pasar el tiempo.

- No te entrometas Alicee - dijo Scott - esa es una misión para él solamente - siguió leyendo un libro que tenia en manos - aquí se decidirá si realmente es capaz de hacer algo útil.

- Que quieres decir maldita escoria!? - se giró a verle, podrían llevarse mal eso dos, podrían tener diferencias entre ellos incluso llegar a competir, pero han sido amigos desde pequeños, Samura sabia que necesitaba de ese trabajo para hacerle saber a Scott que podría hacerle frente otra vez después de la humillación que paso durante la batalla que tuvieron anteriormente la cual quedaron en empate, pero se notaba la gran diferencia de fuerza entre los dos, haciendo que el público aporaya más a Scott dejando de lado a Samura, ambos sabían lo peligroso que podría ser entrar al territorio de los hechiceros, al fin y acabó ellos también usaban magia y eso específicamente le preocupo a la joven de cabello rojo.

- Quiero decir, si no llegas a conseguirlo... - hizo una pausa y dos pares de ojos lo miraron - es mejor que no regreses - soltó sin más el joven. 

- Jodete!  - se giró para ir a su habitación - no necesito de tus malditos consejos, yo se muy bien lo que hago - caminó hasta que su silueta ya no era visibles para la pelirroja.

Alicee suspiró y se dirigió al chico que se encontraba leyendo calmado -  Enserio lo dejaras ir así sin más? - dijo preocupada.

- No puedo hacer nada Alicee, es el camino que el escogió, no puedo entrometerme, él siempre a sido tan testarudo pero... - suspiró - lo que le dije al ultimo espero y lo tome en cuenta.

(...)

El chico azotó la puerta al momento de ingresar a su habitación.

- Quién se creé para decirme que hacer, pedazo de mierda - se acostó en su cama, y entre tanto pensar en lo que haría mañana se quedó completamente dormido.

Horas habían pasado y con él el momento de salir a su tarea concedida por el maestro, el chico preparó todo lo necesario en una mochila, una no tan grande para no estorbarle, ya con todo en la mano, agarró su barita y salió de su habitación, todos se encontraban dormidos pues eran las 6:00 de la mañana, claro, su salida era a primera hora, pero su obsesión de salir una hora antes era grande, tanta que su dos compañeros lo sabían perfectamente, haciendo que se levantaran igual de temprano y esperarlo en la salida para despedirlo adecuadamente, pues podia ya no regresar jamás.

El chico caminó tranquilo hacia las afueras, acercándose a las murallas de pierda donde saldría del escondite de los Brujos dando paso a su misión, a lo lejos pudo visualizar a dos personas paradas en la pura entrada de éste.

Samura en cambio no dijo nada pues ya se lo esperaba y siguió avanzando hasta detenerse justo frente de ellos.

- Éstas seguro que no quieres que te acompañe ? - preguntó Alicee.

- No... esto lo tengo que hacer sólo - caminó y se detuvo justo a lado de la chica, éste le posó su mano sobre su cabello rojo azabache - tranquila estaré bien - le dedicó una tenue sonrisa, la chica en cambio no pudo evitar sonrojarse ante tal acción de su compañero. 

Samura miró a su rival y amigo de la infancia para no decir nada e irse del lugar.

-Samura - le llamo Scott, el joven detuvo su andar para escuchar lo que tenia que decir - recuerda lo que dije - Scott solo lo miró sin expresión alguna.

- Tsk - chasqueo la lengua con desagrado para macharse de ahí.

Samura sabia muy bien que podía morir tanto allá como llegar sin el objeto en sus manos, la furia del maestro lo acabaría por completo, y por eso mismo culmpliria ésta tarea como diece lugar.

- Ese idiota... - miró con preocupación hacia el camino donde desapareció Samura - cuídate...- termino susurrando Alicee.

- Tranquila... no es débil - empezó a retirarse de ahí.

-*Serás un idiota si decides regresas sin el, Samura* - pensó Scott.