Una semana ¡Una puta semana! Eso le costó mejorar. Varias visitas al doctor también fueron de gran ayuda y aunque sus sentidos supra desarrollados aún no regreban, volvió a la escuela para hacer la vida de sus amigos imposible.
—Tucker, Tucker, no puedo creer que en serio estés de nuevo aquí.
—¿Me querías muerto o algo así?.
—Yo sí.
—Tú pudrete Clyde. —Contestó junto con su clásica seña, el dedo medio.—
Pensándolo mejor, le habría encantado quedarse otro día más en su hogar y jugar con Stripe.
Podría no parecerlo, pero Clyde y Token enserio estaban felices de ver a su apático amigo con un rostro que decía jodeme y te rompo la cara. Era bueno en historia, un buen punto para quererlo de vuelta más aún hoy que tenían un examen.
No hubo mucho más que un par de pruebas en las primeras clases, todo fue lo suficiente tranquilo como para que ahora el pelinegro se encontrará almorzando junto a Token y Jimmy, pues el castaño no aparecía por ningún lugar y tampoco estaba tan interesado en su paradero pues bien podría estar con Bebé.
—Por cierto ¿Ya te ofreciste a lavar la ropa del que rompió la nariz de Eric?. —Preguntó el moreno.—
Eso de las reservas no hiba con el primogénito de los Tucker, apenas pensó en hacer eso y se lo comunico a sus amigos al día siguiente, estos solo se partieron de la risa al escuchar la idea del pelinegro.
—No lo he visto.
—Li-li-li-literal se sienta casi a tu lado.
—Distraido de mierda.
Bueno, no podían pedirle mucho, apenas y se daba cuenta de la existencia de ellos como para fijarse en esas cosas.
—El punto es que no me he ofrecido de lavandero y no lo haré… eso creo.
—Al final harás lo que quieras, así que no me meteré, suficiente es con las idioteces en las que Clyde se mete.
—Ti-ti-tiene un punto.
Siguieron la conversación con temas diferentes, por ejemplo joder al joven alfa que no tenía sentidos de nada, ni siquiera gusto, incluso su lobo seguía débil y no lo había escuchado por un buen tiempo. El chico maldecía eso.
Todo cool, todo normal, al menos lo fue hasta la siguiente clase pues el trío noto el lugar de Clyde vacío, el de Butters también lo estaba.
Así fue con la clase siguiente y la siguiente y la que seguía de esa, no era normal, sobre todo por Butters que era demasiado paranoico, si sus padres se enteraban de que no estuvo en la mayoría de las clases lo castigarían y Butters odiaba ser castigado.
Ante la ausencia del último, el pelinegro al fin pudo mirar con atención a su nuevo compañero, leves temblores, cabello rubio, una extraña combinación en el color de sus ojos, se le hizo familiar pero no le dió importancia.
La última clase fue cancelada ya que el señor Garrizon simplemente se fue del aula y todos los alumnos salieron, muchos fueron directo al patio para jugar y otros se retiraron hacía sus respectivos hogares, Craig habría hecho lo mismo de no ser porque tenía que esperar a Tricia y así regresar juntos a casa.
—¿El chico rubio? ¿En serio? No se ve como alguien tan agresivo.
—Dicen que fue el quien golpeó a Butters y a Clyde, ambos están en el hospital ahora.
No iba a meter se, enserio que no, pero vamos, estaban hablando de su amigo (uno que lo hacia enojar de manera constante), casi su familia así que no tardó en acercarse al par de chicas.
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El lobo del café. --Creek--//Omegaverse//
FanfictionTras una Maldición, los omegas dejaron de existir en todo el mundo lo que poco a poco está acabando con la raza cambia formas. Pero ¿Que pasa cuando un omega nace?. Una joya que todo mundo quiere tener. No se de dónde salieron la ganas para hacer es...