⊹ ˚˖ 𐀔 Librarian B𔘓y ִֶָ𓂅 ItaSaso ₍ᐢ•ﻌ•ᐢ₎

ᬊ⃝ Capítulo Único ◦.⊹

Y ahí estaba yo, intentando hundir mis penas en alcohol en un club de strippers masculinos, pensando únicamente en sus ojos, su sonrisa, su todo sin prestar atención a nada, me tenía enfermo...

"¿De quién hablas, Itachi?" Preguntarás... pues, del mejor y más bello chico que mis ojos han alcanzado a ver, mis oídos a escuchar y mi mera existencia a disfrutar.

Un ángel de biblioteca, estando siempre hundido en esos simples libros de romance mientras sonreía por lo que él contenía... esa sonrisa...

Cada gesto, cada risa, cada palabra, cada sonrojo... ¿Por qué todo de él era tan malditamente tan lindo, tan inocente, tan encantador...?

Memoricé cada horario en el que él iba a la biblioteca a leer o sus horas de clase para saber si podría verlo entre ellas, ¿obsesión? Quizá, pero cómo no tenerla por sus ojos miel, su cabello carmesí y cada pequeña cosa de él.

Intentaba acercarme, pero siempre me ignoraba, y quizás era por mi entrometimiento, ya que sabía cuánto él se concentraba en su rutinaria lectura, y ¿qué atención debía darme a mí? El Uchiha más "popular"... cómo odié ese título al saber que impedía nuestra interacción...

Nunca llegué a saber su nombre, cuando quería saberlo me sacaron de su aula por entrar sin permiso, qué imbéciles.

Buscando desesperadamente una forma de hablarle o una donde me dedique una simple mirada, lo que fuera me tendría más que feliz.

A veces mi subconsciente me ganaba en las noches, y los sueños lascivos eran tan constantes que me sentía enfermo pero... lo disfruté...

El día que encontré el valor para ir con él estaba detrás de un árbol sentado con un chico rubio mientras él estaba acostado en su regazo y el rubio leía en voz alta el libro que él antes sostenía en la biblioteca con ilusión... maldito...

Mi sangre hervía y mi pecho dolía, pero comprendí que mucho no podría hacer al final del día, un simple golpe o palabra que le diera a ese rubio desgraciado arruinaría mi reputación, así que no hice nada.

Al finalizar las clases continuaba enojado pero más triste y decepcionado de mí mismo, quería tanto vivir esa escena yo, tener el lugar que ese chico, pero no... no era así... ¿Qué podía hacer? Nada.

Entonces en necesidad de alcohol fui a aquel bar lleno de chicos extremadamente hermosos bailando en esos largos tubos de metal... eso me distraería por una noche.

O eso supuse... jaja...

"¡¡Y ahora!, lo que todos esperaban, el escorpión domador del escenario! ¡Nuestro favorito! ¡¡Sasori de la arena roja!!"

Dijo un hombre por el micrófono, cosa que llamó mucho mi atención... ¿Sasori? Es un nombre lindo y peculiar, entonces me dirigí cerca de la tarima aún con mi copa en mano.

Era un experto en mover cada parte de su cuerpo, era magnífico, era exótico, era delicado y era tan sexy...

Dio ciertas vueltas en el tubo aquel y al finalizar aplausos resonaban por todo el lugar, incluidos algunos de mi parte, al ir al borde de la tarima a agradecer...

Sus ojos... no podía ser él... la copa se me cayó de las manos causando un estruendo... pero... él era... él.