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- Kristen soy yo, lucrecia ¡Despierta! Abreme la puerta.
- ella tiraba pequeñas piedras hacia la ventana, ¿Me preguntó si habrá usado las escaleras? ya que la ventana está muy alta.

- ¡Ya voy! Pero deja de tirarle piedras a la pobre ventana, ¡La vas a romper!
-me senté en la cama y me talle los ojos, zaylo al parecer dormía cómodo en su pequeña cama.
- me alegra que tú si puedas dormir pequeño amigo - acaricio levemente su pelage y salgo de la habitación, Lu seguía tocando la puerta. - ¡Lu te dije que ya voy!
¿Por qué vienes a esta hora? - le pregunté en cuanto abrí la puerta.

- Son las once de la mañana, estoy aqui desde hace 30 minutos.
- ¿En serio dormí tanto?

- y ¿Que es lo que pasa?, Porque parece que viniste con urgencia.

- hoy me levanté muy preocupada por ti, y por eso vine a ver si estabas bien, y Ahora que te veo en persona, veo que si estás bien - me miró con una sonrisa de alivio.

- ¿De verdad te levantaste preocupada por mi? - hablé con una sonrisa de complicidad.
Aún me acordaba con quién se había hido ayer.

- si... ¿Por qué lo dices? - se estaba poniendo nerviosa.

- Christopher y tú fueron a tu casa ¿o el te llevo a la de el? - su cara de sorpresa había hecho que soltará una carcajada.

- Creí que se te había olvidado - dijo apretando los dientes.

- mi ciela yo no tome mucho ayer, de milagro la conciencia me funciona perfectamente.

— camine hacia la cocina, necesitaba un café urgente.

– ¿Y tú?– sonrio maliciosa – sabes me acordé de algo

– ¿De que te acordaste? – pregunté mientras preparaba la cafetera.

– si yo me fui con Christopher, que creo que así se llama... Tu no quedaste sola, pimentel estaba ahí. Entonces significa ¡Que tú te fuiste con el! – empezó a dar brincos.

– si. Me fui con el, pero no hicimos nada de lo que tú y tú amigo hicieron. Nada más tomamos unos tragos en su casa y después me llevo a la mia... ¿Satisfecha?

— un bufido salió de sus labios.

– No puedo decir que estás mintiendo, siempre me dices la verdad.

– así es y siempre lo haré. ¿Quieres un café?

——

– señor castillo, puede dejar de molestar a su compañera lucrecia.

– ¿Por qué no lo saca del salón? ¡Es un fastidio!

– ahora ¿Por qué tan grosera conmigo? Solo te estoy preguntando que hicieron tu y ese tipo....

– ¡Cállate idiota! – le gritó – ¡Eso no es de tu incumbencia!

– ¡Ya basta fuera del salón los dos!

— ¿No podíamos tener una clase de inglés normal?, Era la única clase que compartía con Guillermo y Lucrecia.

Estaba afuera de la dirección esperando a Lu, al parecer ella y Guillermo empezaron a discutir en los pasillos, logrando llamar la atención de todos los profesores e incluso a la directora.

– ¡Ves lo que hiciste! ¡Casi nos suspenden por tu culpa imbécil!

– ¡Quería hablar contigo tranquilamente! Pero tú empezaste a gritar como loca.

– Guillermo lo que haga no es de tu incumbencia, ¡Y tampoco deberías de reclamarme! Te Vi ayer besandote con una zorra. Así que estamos iguales bebe, solo que yo pude disfrutar más... Vamos Kristen.

𝐄𝐧𝐭𝐫𝐞𝐯𝐢𝐬𝐭𝐚 𝐜𝐨𝐧 𝐞𝐥 𝐯𝐚𝐦𝐩𝐢𝐫𝐨 « 𝐉.𝐏🧛🏻‍♂»                  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora