Primera Semblanza .- Mil Hijos

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Los mil hijos llegando al pueblo de Stoner… y esta es su historia…

En el mes tercero del año en que las maquinas del vapor hacían su debut en Inglaterra…

Los barrios bajos de Londres habían sido devastados por anteriores gobiernos… provocando así que estos se convirtieran solo en tierra seca transformándose en un botadero de basura tanta humana como de chatarra de fierros retorcidos. A estas tierras llegaron los Mil Hijos, una aldea nómada del continente sudamericano… nadie les había visto movilizarse cuando abandonaban un lugar, pero tras de ellos dejaban un paraíso en agradecimiento por la hospitalidad de aquella tierra. Pero alrededor de ellos rondaba una leyenda… se decía que eran hijos de una diosa y un semi-dios, los cuales se conocieron en tierras ajenas, y el amor entre ellos floreció… dando paso a la fertilidad entre estos, la diosa le pidió mil hijos al afortunado mitad dios, pero él lo tomaba como una broma, pues nadie había tenido tantos hijos, ni dioses, ni humanos, ni conejos, nada… sin embargo… él creyó en sus palabras y se entregó a la diosa, se escondieron en las tierras donde ningún ser humano se atrevía a entrar por el miedo a la muerte… pasaron once meses… y la diosa necesitaba manos para su parto, pero el semi-dios no era suficiente, así que llamó a su madre y está se encargó de todo, mientras que el pobre semi-dios en su impaciencia se despedazaba las uñas.

Al final del parto, salieron los mil hijos en el mes de la fertilidad… entre el año del dragón y el del tigre… eran tan diminutos y frágiles, que el semi-dios se puso guantes para no contaminar a vidas tan puras… Pasó el tiempo… y cuando estos lograron edad suficiente, fueron esparcidos por el planeta tierra y sus padres desaparecieron. Algunos de estos hijos muy diferentes entre ellos, dejaron su marca en la historia como: héroes, asesinos, aventureros, libertadores, opresores, monjes… entre otras muchas profesiones del oficio de la vida.

Cien años después de los Mil Hijos solo quedaron diez… pues estos no eran inmortales, ni eternos… pero si tenían una gran resistencia y longevidad. Los diez se encontraron, no se sabe dónde y desde entonces la aldea de los Mil Hijos, comenzó a recorrer la tierra en busca de los descendientes de sus hermanos fallecidos… algunos ya estaban realizados en la vida, pero tenían el sentir en sus almas de ir junto a ellos. Así se formó la aldea de los Mil Hijos.

Al llegar a Stoner, estos fueron señalados como herejes de la pureza de los ingleses… sin embargo nadie se arriesgaba a tocarles, siempre desde lejos les miraban pasar… les observaban como si fueran una especie en vía de extinción. Ellos siempre con una sonrisa cálida para sus visitantes, muchas veces venían a ellos para que ser sanados de sus letales enfermedades… en cierta ocasión la nieta del más longevo de los Mil Hijos, fue secuestrada por habitantes de Stoner, personas que solo se habían dejado llevar por sus miedos y en busca de respuestas cometieron un grave error. El abuelo de la chica, tomó con mucha calma la noticia… siguió comiendo en silencio, pero… el pretendiente de su nieta, un joven inglés, dio un grito de desesperación: “¿Acaso no iras a buscarla? ¡Es tu nieta a la que han raptado!”… el anciano sonrió y siguió comiendo.

El joven en su frustración escapó de la aldea rumbo a Londres en busca de ella… al llegar al pórtico limitador, la chica estaba sonriendo con sus ojos grises por el resplandor de la luna… lo miró y le dijo: “Me alegro que hayas venido”… detrás de ella… no había nada ni nadie, sus ojos grises resplandecientes, poco a poco se atenuaron a su color natural, negros. Ambos se encaminaron a la aldea, sin embargo el joven ingles sentía un mal sabor de boca, pues al tomar a la chica de la mano, la sentía cada vez más pesada, esto se debía a la maldición de los Mil Hijos… mil almas en cada uno de ellos.

Sus predecesores cayeron por la misma causa, sus cuerpos y mentes no pudieron aguantar el peso de esa colosal cantidad de almas, ahogándose lentamente en la desesperación… Pero con el pasar de los cien años, la nieta del más anciano de los Mil hijos, obtuvo la capacidad de controlar a las Mil Almas que ella poseía, pero cuando su cuerpo estaba en peligro por algún daño del exterior, un alma se apoderaba de la chica… y está siempre estaba con el fetiche mismo de ver sangre.

El joven ingles decidió ignorar aquello y no mencionó nada al respecto del peso inexplicable. El anciano miraba a su nieta crecer y mejorar… el joven ingles desapareció totalmente de la aldea y del pueblo de Stoner. Al parecer entre los susurros se decía que él había visto un monstruo frente a frente y entre lamentos desapareció en la extensa llanura de las afueras del pueblo, sin embargo a los tres días, él volvió sin brillo en sus ojos, labios partidos, piel sucia, ropajes rasgados… la Nieta del anciano, al verlo le sonrió, y le ayudó a limpiarse… mientras lo vestía… tomó su rostro… él la miró… la mitad de su rostro hermoso, y la otra mitad el alma sedienta de sangre. El mismo rostro que lo quiso devorar anteriormente.

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