Histeria

MENTIRAS ESCRITAS

"Hola Tony, sé que la situación actual te debe tener desesperado, probablemente para estos momentos ya me está buscando, deja de hacerlo, si iba a irme es porque sabía que no podrías encontrarme. 

Todavía recuerdo las palabras de Sal cuando lo interceptamos bajo el escenario, tú probablemente ya no lo hagas, siempre tuviste problemas con la memoria, pero para eso tienes a Jarvis supongo.

Un 6 de octubre nació mi hija, con una perfecta salud y el peso ideal, solo éramos ella y yo contra el mundo, no quise presentarla a su padre pues sabía el estilo de vida que llevaba y que hubiera detestado hacer una tarea que no pidió , traté de darle todo mi amor, pero no siempre los hijos pueden vivir de amor, un día ya me fue imposible seguirla cuidando, hice cosas... lo necesario para asegurar su bienestar, pero esto se salió de mis manos.

¿Por qué yo? Te preguntarás, Tony, aunque no lo creas esto te incumbe tanto como a mí, probablemente ya habrás pensado en que quiero dinero, no Tony, mis trabajos me permiten vivir bien, tampoco quiero fama o algo así, eso ya lo construí yo por mi propia cuenta. Tony te busco ahora porque eres Iron Man, pero aún más importante eres Tony Stark lo que quiere decir que siempre sabes encontrar soluciones hasta para lo imposible, por eso decidió asignarte el trabajo de ondas electromagnéticas y metafísica, te aseguro que mientras más te adentres a la investigación más te encariñaras con ella, como yo lo hice, sé que no es la máquina convencional que esperabas o largos textos, pero no los necesitas, solo a ella, Dorian, tu hija. En la mochila encontrarás todo lo necesario.

No tuve opción y si es que no estás tan enojado ahora me haría feliz si me hicieras los últimos dos favores, diciéndole que por siempre será lo más importante en mi vida, que no tuve opción y segundo que la quieras tanto como yo, no tiene a nadie Tony, así como tú, cuando menos te lo esperes serán indispensables el uno al otro"

Maya Hansen.

- ¡Niña será mejor que bajes o yo subiré! - grito Tony desde la planta baja, con voz irritada ¿Qué le pasaba a este hombre? No pasado ni 24 horas de su pelea y quería hacer otra, ignore sus gritos y baje lo más rápido que pude tratar de no tropezar.

- ¿A dónde vamos?- Pregunte

- Sube al auto- ignoro mi pregunta y se dio la vuelta pero me quedé en mi lugar haciendo que volteara a verme.

- A donde vamos- repetí, Tony cerró los ojos exasperado.

- Escucha, tu- me dijo bruscamente con su dedo- vas a subir a ese auto.

- No- respondí inmediatamente.

- ¿Qué ocurre? - preguntó Pepper llegando a la sala- Es hora- le dio una mirada reprobatoria a Tony y después a mí.

El camino fue corto pero silencioso, Happy y Tony iban en la parte de enfrente del auto, Pepper tenía la mirada puesta en la ventana y no me había hablado en todo el camino absorta en sus pensamientos ni siquiera se dio cuenta cuando llegamos, por otro lado, el cansancio me estaba matando el día anterior no había podido dormir, la vista del cuarto era embelesadora pero lo que me quitó el sueño fue la misma pregunta que taladraba mis oídos ¿Dónde está?

- Pepper- la llamé suavemente antes de entrar a lo que parecía ser una clínica. Tony se adelantó y entró más rápido que pudo.

- ¿Sí? - trato de darme su mejor sonrisa.

- Yo... necesito tomar mis medicamentos

- Por eso estamos aquí- señalo con la cabeza a la clínica que teníamos en frente - Te quieren hacer unos estudios, serán rápidos- trato de completar su idea al ver mi cara extrañada- Sé que tu mamá ya te hizo los hizo, pero ellos son muy buenos y...