Siempre quise una familia grande y cariñosa, al principio era una ilusión, luego una meta y después se quedó como un recuerdo de lo que algún día quise.
Y ahí estábamos, era un 19 de noviembre del 2017 , estaba tan nervioso, salimos corriendo de la Universidad directo a la iglesia, teníamos todo listo, en cuanto llegamos, se llevó a cabo la ceremonia, solo éramos tu y yo, tal vez no era lo que me había imaginado para cuanto me casara pero mande todo al carajo cuando te ví junto a mi parado en un altar con las respiraciones agitadas y después de 1 hora, al fin ya estábamos "casados " vaya esa palabra sonaba tan malditamente bien, al fin podía decir que era "Min jimin", estaba demasiado emocionado, tenía 19 años y tu 20 , creíamos y jurábamos que estábamos tocando el cielo, estábamos en el punto más alto de nuestra relación creímos que sería así para siempre . Después de salir de la iglesia fuimos a comer, después a tu departamento y ahí por primera vez me reclamaste como tuyo.
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Los besos en los labios se hacían cada vez más intensos, tus frías manos se colaron dentro de mi camisa, rodee mis brazos en tu cuello, me cargaste y me dejaste sobre la cama, pronto la ropa comenzo a desaparecer de nuestros cuerpos, me besabas con tanta delicadeza y amor que me sentía desfallecer en tus brazos. Me pediste permiso para comenzar y yo te dí acceso, jamás había sentido tanto placer, jamás me había sentido tan amado
Las penetraciones eran lentas pero placenteras,en todo momento te encargaste de que yo también lo disfrutará. Me amaste tanto, sentía que de mi cuerpo salían fuegos artificiales , sus toques quemaban deliciosamente mi piel. El sonido de nuestras pieles chocar, mis gemidos y sus jadeos inundaron la habitación, pronto los rayos del Sol en pleno atardecer iluminaron mi rostro y cuerpo haciendo que la fina capa de sudor que cubría mi ser brillara tal cual Perla.
Ambos nos corrimos un par de veces más para luego caer rendidos en la cama después de hacer el amor. El me tomó de la cintura haciendo que lo mirara y ahí estaba con esa bella sonrisa de gomita y esos felinos ojos mirándome a mi, sonriendome a mi, y solo a mí.
Si esto era un sueño, no quería despertar jamás.
El primer mes fue espectacular, yo aun vivía con mis padres y el en su departamento, pronto nos iríamos a vivir juntos, estábamos ahorrando para rentar un departamento en la provincia de daegun. Los encuentros carnales eran constantes y los disfrutabamos al máximo, al segundo mes nos fuimos a vivir juntos, y nuestros familiares aun no se enteraban qué estábamos casados, pero eso era lo de menos por el momento.
Amaba mi vida junto a yoongi, lo tenía todo, un hombre que me amaba y una pequeña familia de dos. ¿Que más podía pedir? , tal vez debí ser más ambicioso, debí querer más y ser un poco más egoísta con tu amor, ya que parece que para ti mi amor nunca era suficiente. Debí pedir más, merecía más y me conforme con tan poco. Primer error , pudimos haberlo tenido todo, pero no fue así, el tiempo y el destinó fue codicioso con nosotros, fue envidioso de nosotros y de nuestro amor de jóvenes
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