El Reino

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Derek

Estuve esperando este momento toda mi vida, mi padre me habló de lo fascinante que era la coronación y que pronto me iba tocar a mi, yo iba a ser el sucesor del trono de Asgar. Un reino muy estable en el cual nada malo podría pasar. Mi madre Hestia aún cree que soy muy jóven para gobernar, pero confía en mí. La coronación se va a celebrar la semana que viene, un viernes a la nochecer habrá una gran fiesta en el castillo dónde cualquier persona de cualquier clase social puede entrar. De pronto, el sonido chirriante de una puerta abriéndose me saca de mis pensamientos, en cuanto me giré la figura de mi doncella estaba situada enfrente de mi.

- Disculpe, mi señor. No pretendía molestarle pero su madre me ha coaccionado para decirle que se debe de preparar. -puso las manos enfrente de su vestido de sirvienta y sonrió de lado a lado-

-Disculpas aceptadas, pero la próxima llamé a mi puerta, que no lo haga hace que en verdad me moleste, ahora porfavor, dígame para que me tengo que preparar no me gusta que te quedes con las palabras en la boca, me haces perder mi preciado tiempo. -Comenté agobiado-

-Mi arrepentimiento -hizo una pequeña reverencia y vi como sus mejillas pálidas tomaron un tono color carmesí-

Mi mirada impaciente se poso ante ella.

- Se incorporó en su posición - Le han invitado al corral de teatro más famoso de Asgar, sus súbditos quieren que vean su representación, a su madre no le molesta en ir, cree es -se trabó-bueno que...-le interrumpí-

-¡Es suficiente!-ordené y la doncella dio un pequeño respingo- puede retirarse.

Como usted mande mi señor.- Agachó la cabeza y su sonrisa desapareció. -

En cuanto oí la puerta cerrarse, respire profundo. Debía de ir a aquella presentación, ya que a cuantos más eventos asista mi estima será más alta.

...

Dominick

-¡Jamás, jamás y jamás! -Chillé indignado-

Mi mayordomo contemplando mi situación cruzó los brazos e hizo una sonrisa torcida.

-Mi señor -levantó su dedo índice para inquirir algo-

-¡Ahora no, Acisclo! -hice una pausa intentando mantener el control- Tengo que pensar en algo de inmediato, para que ese mezquino granuja sinvergüenza no llegue al trono, algo por lo que no acabe ajusticiado. ¡El trono debe de ser mío! Porque debería de ser la segunda opción cuando puedo tener todo el control. -Me acerqué lentamente a Acisclo-Si tienes una idea no me vendría mal.

-Mi señor-Agachó la cabeza-

Con eso di a entender de que no tenía ni una miserable idea, Acisclo era uno de mis mejores mayordomos y podía contar con él para lo que fuera, pero a veces era tan inútil como un parabrisas de un submarino, además le tenía mucho cariño ya que era el único que me trato como a su hijo. Él se puso en el lugar de mis padres cuando ellos nunca estuvieron allí, para dar el cariño que un niño necesitaba.

-Sabes que no importa -Dije en un tono molesto-

-Se aclaró la garganta- Pero se de alguien que puede ayudarle a vos, si usted lo desea, por supuesto.

-Entonces hablé-ordené

-El bibliotecario, es decir, puede ir a la biblioteca y tomar libros que le servirán para enriquecer sus conceptos. Hay de todo tipo mi señor, lo que no le recomiendo son los libros de caballería. Esas novelas claramente son muy idealistas casi imposibles de contrastarlas a la realidad. -Sonrió de una manera pícara y noté que en sus ojos había un brillo que se salía de la locura-

-Me gusta como piensas Acisclo... Me gusta como piensas-Asentí lentamente la cabeza mientras me frotaba las manos- Prepara todo para la salida, manda un carruaje para que salga pronto.-Saqué la campana que siempre guardaba en mi bolsillo y la agite suavemente - ¡Ya! -Levanté la voz demasiado eso hizo que Acisclo saliese disparado-

...

-¿Tu crees qué nuestro hijo podrá gobernar el reino? Yo no estoy tan segura. -Expulsé todo el aire que contenía-

-Claro que sí mi vida, le he estado preparando para esto toda mi vida, confía en mí. Recuerda que yo no moví ni un dedo por este reino y mira cómo los súbditos me aman y me halagan.

-Yo no estaría tan segura. -Confesé un poco lamentada-

-Deberías, yo se lo que hago. -Admitió en un tono de voz demasiado seguro-

-Entonces demuéstralo. -Me giré y me encontré a mí hijo un tanto cabreado-¿Hijo? ¿Desde hace cuánto tiempo estás escuchandonos?

-El progreso consiste en el cambio.
(Miguel de Unamuno)

...

Hola cukis!!! El primer capítulo al fin del príncipe sin reino, se que me van a matar por dejaros ahí con la intriga. Pero eso es de lo que va esta novela de secretos y de misterios.
Leeré sus teorías
Las amo, gracias por su apoyo.
☆Me ayudarías mucho sí me das una estrellita, para que esta historia llegue a más personas.

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⏰ Última actualización: Jun 17, 2022 ⏰

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