—Resurrectio ars. —Pronunció, provocando que en el lugar se hiciera presente una fuerte luz, la cual al desvanecerse se dejó ver a varias personas— Bien, resultó bien. —Suspiro mirando a las personas, las cuales se mostraban confundidas y en alerta— Les digo que no pueden usar su chackra, así que no se esfuercen.
Formó una sonrisa un tanto altanera mientras se cruzaba de brazos.
—¿Quién eres? —La primera en hablar fue una peli-roja, la cual, aunque esta más que sorprendida por regresar a la vida, estaba más que alerta ante la presencia de aquel muchacho— y cómo...
Estaba sin palabras al ver a todos y más a su querido esposo vivos, quería llorar y abrazarlo, pero antes tenía que saber que estaba pasando.
—Me da hueva explicarles todo, así que mejor se los muestro. —Shasqueo sus dedos haciendo que la información de todo lo que había pasado y estaba pasando actualmente llegara a sus memorias.
—Esto es.. —Susurro sin creerlo el Namikaze.
—Ahhh vamos a ver a nuestros hijos!! —El grito de emoción por parte de Kushina y Mikoto hizo sonreír un poco a sus esposos.
—"Veremos a nuestros hijos..!!"
—Sí, sí y no quiero arruinar su emoción, pero—suspiro llamando la atención de todos los presentes—. Tengo que contarles algo a lo cual estar prevenidos de antemano. —Serio.
—Y eso es..? —Hablo Shisui no evitando hacer una mueca, teniendo un mal presentimiento.
—Primero.. Minato y Kushina, confirmenme, ¿Cuántos hijos tienen?
—Dos, por supuesto! —Afirmó la peli-roja con seguridad— Mi niño Dei y mi Naru.
Ante sus palabras, Alexander sonrió.
—Bien, entonces.. Prepárense para lo que les diré. —Murmuro, no negaría que se sentía un poco tenso e incómodo—. Para empezar, Narutin y Deidei no saben que son hermanos y la razón detrás de eso es porque, en primer lugar ustedes mantenieron a Deidei oculto por su seguridad y en segundo, murieron sin darle la posibilidad a ambos de conocerse o interactuar debido a las circunstancias y a que Deidara fue secuestrado y alejado de Konoha. —Explico haciendo que la pareja hiciera una mueca— además..
Definitivamente escuchar eso no fue nada agradable y reconfortante para Minato y Kushina, los cuales se sentían bastante decepcionados y furiosos por lo que había hecho Konoha, según, la mejor aldea de todas.
