• BajiFuyu •

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¡Y love you!

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Escucharon atentamente las reglas del juego recibiendo sus respectivas canicas que fueron entregadas por los guardias. Chifuyu miró a Baji quién estaba absorto de cualquier pensamiento en su propio mundo siendo manejado por sus sentimientos sin llegar a controlarlos totalmente, miraba tan fijamente la bolsa con sus 10 canicas que parecía una estatua, estaba demasiado concentrado en su bolsa como para preocuparse de su mirada, de cualquier mirada ajena.

Tragó saliva, acercándose hasta el pelinegro sin dirigirle la palabra o ser capaz de intentarlo si quiera, no sabía que pensar, decir o hacer. Jamás llegó a ponerse en aquella situación, de por si era demasiada bizarra.

Keisuke caminó hasta encontrar un lugar dónde sentarse; unas pequeñas escaleras de cemento, al momento de ya no estar de pie colocó su mano en su frente dudativo, sintiendo un horrible dolor de cabeza que se extendía hasta su nuca con intenciones de atormentarle, sintiendo el calor del momento que podría decir era adrenalina, recorrer todo su cuerpo hasta la más mínima parte de su ser. Levantó la vista viendo a Chifuyu quién se encontraba a su lado, de pie, con esa sonrisa de siempre que pretendía calmar y tranquilizar cosa que siempre lograba sin dudas, ese caso no fue la excepción, Chifuyu en general le traía paz, seguridad y reconfortamiento sin importar la situación, aunque no se pudiera mantener de pie a si mismo Chifuyu era bueno para levantarlo a él.

Redirigio su vista a el reloj, ya quedaban 9 minutos con 13 segundos. El tiempo pasaba más lento que antes, o así se sentía. Aún así no era el suficiente tiempo que hubiese pedido si le hubieran dejado elegir, no lo era. Mordió su labio inferior, a diferencia de él, Chifuyu estaba tranquilo, o eso quería aparentar, conociéndolo; por dentro era un caos humano peor que cualquiera en esa sala, o intentó de ello.

—Oi Chifuyu...— Llamó, a lo que el nombrado hizo un pequeño y casi inaudible sonido en señal de estar prestando atención a sus palabras, suspiro sin saber muy bien de que hablar; porque de todos modos ambos allí ya sabían el tema principal, el que quería evitar o suspender lo más posible, pero no podían hacer ese pequeño deseo egoísta, porque en sus manos estaba la vida ajena.

—¿Que se supone vamos a...— No alcanzó a terminar de formular una pregunta, pues antes de terminar fue interrumpido abrupdamente por el rubio natural.

—¿Sabe? Mi sueño era ser pilotó. Pilotó de aviones de guerra, mejor dicho.— Más que una despedida era una confesión, porque nunca le confesó cuál era su sueño o meta para estudiar en algún futuro distinto, en cambio, Chifuyu sabía perfectamente lo que Baji quería ser, vamos, como para no saberlo.

—Pero, si es por usted, estaría dispuesto a estudiar administración de empresas o algo parecido, así usted podría abrir la tienda de mascotas libremente y de forma más sencilla.— Acotó a la conversación, Baji formuló una pequeña sonrisa amarga.

—¿Piloto de aviones? Eso es genial Fuyu.— Hizo un cumplido a lo que el menor sonrió como respuesta, notó un pequeño tono rojo en las mejillas ajenas.

—Lo sé, todo lo que viene de mi es genial.— Rodo los ojos ante el ego de su amigo, realmente no le molesta o incomodaba aquella forma de ser, era uno de los detalles que le hacían adorar aún más a el Matsuno. Sobre todo siendo el único que conocía tan a fondo a Chifuyu como para saber que a el le quedaba la frase; "el ego hasta el cielo y la autoestima por el suelo.''

—Pero en serio Chifuyu tenemos que hab...— Nuevamente no dejó que tocará el tema, interrumpiendolo de una forma más torpe.

—¿Y usted? ¿Que nombre le hubiese puesto a Peke.J? Tiene que admitirlo, Peke.J es un nombre genial.— Hizo un pequeño puchero, Baji entrecerro los ojos y suspiro derrotado, ignorando el pequeño juego sucio que estaba haciendo Chifuyu al cambiar los papeles en esa historia.

'°•. Aún Al Borde De La Muerte •Squid Game x Tokyo revengers•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora